La CRAC debe de ser un ejemplo de gobierno en todo el mundo, dice Cirino en un acto por el 19 aniversario

*Organiza la Casa de Justicia de los pueblos originarios, de Santa Cruz del Rincón, mesas de trabajo. Se deslinda de todos los partidos políticos, exige la presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, el cese a la represión y la persecución. La Cruzada Nacional Contra el Hambre no es un programa que los beneficie, expone el dirigente. Es mentira que el gobierno persiga a la delincuencia organizada, tiene “pacto con los delincuentes”, afirma

Redacción

Por el 19 aniversario de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), la Casa de Justicia de Santa Cruz del Rincón de los pueblos originarios organizó mesas de trabajo para fortalecer a su Policía Comunitaria, en las que participaron unos 300 pobladores y se discutió la creación de otras estructuras que además de velar por la seguridad y justicia se ocupen de la defensa de sus tierras, la salud, la educación, la producción, la política y los medios de comunicación, para ser un ejemplo de gobierno en todo el mundo.
“Nos encanta copiar lo que viene de afuera, hasta nos peleamos, como hacen nuestros compas Eliseo (Villar Castillo), Abad (García Gracía), el Ejército, peleando por el Ejército, el otro que dice que se vaya, el otro que dice que se quede, y tiran de balazos y vienen, imagínense: indígenas peleando por el Ejército, que tontería”, opinó el dirigente Cirino Plácido Valerio (expulsado de la organización por la Casa de Justicia matriz junto a su hermano Bruno) en referencia a la división de la CRAC de San Luis Acatlán y les pidió mantenerse juntos.
En las mesas de trabajo se deslindaron de todos los partidos políticos para la elección del próximo año, exigieron la presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, el cese a la represión y persecución, rechazaron todos los actos de represión y acordaron no hacer “grilla” y mantener el orden.
En su discurso, el dirigente Cirino Plácido subrayó la importancia de no recibir dinero “para que no nos manipulen” ante la labor de impartición de justicia que realizan, y que el gobierno colectivo y la CRAC no deben de permitir ser divida por partidos políticos, intereses internos o “grilla”, y los invitó a reflexionar sobre el proyecto de vida que quieren en cuanto a seguridad, justicia, cero privilegios, sin impunidad ni contradicciones dentro del sistema de usos y costumbres.
A una propuesta de crear más casas de justicia respondió que se van a pelear porque cada comunidad va a querer imponer “gente que conviene”, se van a dividir, y les recordó que “así empezó Valentín (Hernández Chapa), crearon casas de justicia por todos lados y ¿Cómo están ahorita?, un desorden”.
Exhortó a crear una iniciativa que los ayude a tener un territorio y una forma de gobierno para que sean capaces de garantizar su propia seguridad, porque la Policía Comunitaria y la CRAC son instituciones pero “nos falta tener una institución de educación donde se formen niños, jóvenes” que piensen primero en el pueblo y después en ellos mismos, que su ideología se concrete en los hechos.
Afirmó que también requieren una institución que fomente la convivencia justa y democrática para ser un modelo y demostrarle al mundo que “somos capaces de gobernar colectivamente y hay que hacer política”.
Agregó que necesitan crear una estructura que se encargue de los temas de medio ambiente, justicia agraria y defensa de sus tierras con base en la Constitución, porque las tierras que trabajan “no son mercancía”.
También otra que vea los problemas de salud de los pueblos originarios tomando en cuenta los conocimientos de sus antepasados, no copiar “lo que viene de afuera”, y entonces criticó que muchos se pelean y mencionó a los coordinadores divididos de la CRAC de San Luis Acatlán, Eliseo Villar y Abad García.
Expuso que necesitan otros medios de comunicación bajo el control de los pueblos sin que se vuelvan mercancía, sino que sea un servicio, y que también es necesario que produzcan todo lo que consumen internamente, un mercado justo y “si sobra, vendemos”, porque un pueblo pobre y desorganizado no tiene futuro.
“Cuando tengamos todo eso, estamos gobernando. Por eso nosotros luchamos, decimos, luchamos por la constitución del derecho colectivo, donde el pueblo manda, la autoridad obedece a través de la asamblea comunitaria ejidal, comunal o regional, y estamos muy lejos todavía, donde se acabe el vicio, exceso del consumo del alcohol, envidia, egoísmo”, agregó.
Invitó a debatir y fundamentar sus propuestas, analizar y construir lo que quieren los pueblos originarios haciendo política y no “grilla”, lamentó la violencia que se vive “afuera”, como la matanza de Iguala la noche del 26 de septiembre y la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, e insistió en que es muy importante la formación porque no han sido formados para impartir justicia.
Subrayó que la Cruzada Nacional Contra el Hambre no es un programa que los beneficie, sino que es para la destrucción de su territorio con la entrada de carros y el Ejército, por lo que les pidió “no hay que auto dañarnos”.
Una de las mesas de trabajo concluyó que es conveniente y urgente unificarse ante el hartazgo de la sociedad “por tantas injusticias y atropellos”, porque todos son víctimas y las organizaciones o contingentes luchan de manera aislada, fracasan en la conquista de sus demandas y muchos líderes venden los movimientos para sacar provecho.
Compartieron el plan de acción de la Asamblea Nacional Popular, propusieron conformar un programa de lucha regional, se deslindaron de los partidos políticos por ser “camarillas de parásitos sociales” que sólo buscan beneficios personales, exigieron un castigo ejemplar para los responsables de la matanza y desaparición de normalistas por ser “un delito de lesa humanidad” y que los 43 estudiantes sean presentados.
Criticaron la guerra del gobierno federal contra el narcotráfico “para exterminar a los pobres, porque hay muchos y son un dolor de cabeza” porque es mentira que persigue a la delincuencia organizada sino que tiene “pacto con los delincuentes”, rechazaron todos los actos de represión e invitaron a crear un frente amplio de lucha y la libertad inmediata de todos los presos políticos.
Exigieron un alto al acoso a los policías comunitarios de Ayahualtempa, municipio José Joaquín de Herrera de autoridades agrarias y caciques porque “están demandados injustificadamente con el agente del Ministerio Público” por defender el derecho a la propiedad comunal, y el cese al despojo de las tierras de diez propietarios legítimos de terrenos en Chilapa por un particular y las autoridades agrarias.