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Movilizarse para contrarrestar las protestas de los normalistas, insta Rogelio Ortega a la sociedad

*Hagamos expresiones pacíficas, mesuremos nuestros enojos y vayamos todos en una ruta de armonía para reconstruir la paz”, dice. Visitó Iguala, donde el 26 de septiembre policías municipales asesinaron a tres estudiantes y desaparecieron a otros 43

Alejandro Guerrero y Eduardo Albarrán

Iguala

El gobernador Rogelio Ortega Martínez insistió en su llamado a mesurar las protestas por la desaparición de los 43 normalistas desaparecidos la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre en Iguala, luego de haber sido detenidos por policías municipales de Iguala y Cocula.
El gobernador visitó ayer los municipios de Iguala, Tetipac, Ixcateopan y Taxco, en la zona Norte del estado.
En Iguala se reunió con vecinos, profesionistas y representantes de cámaras de comercio, y también asistieron aguirristas como Reyna Jaimes y Guadalupe Catalán, así como la presidenta del comité municipal del PRI, Sonia Adán Salgado.
En sus discursos, Rogelio Ortega convocó a la sociedad a realizar acciones pacíficas para contrarrestar las protestas que realizan estudiantes de Ayotzinapa, maestros de la CETEG y miembros de organizaciones de derechos humanos, y mencionó al Centro de Derechos Humanos Tlachinollan, al que pidió “que hagan todo el esfuerzo por impedir, por cancelar, por renunciar a las acciones violentas que agreden a terceros”.
Reclamó que cuando se bloquea la autopista se hace mucho daño a los visitantes, a los prestadores de servicios, comerciantes y transportistas.
Llamó a defender a los empresarios porque son empleadores, “porque si se retiran, cuántos empleos vamos a perder en Guerrero y a dónde se van a ir”.
El gobernador se dirigió a los familiares de los 43 normalistas desaparecidos, a los estudiantes de Ayotzinapa, a los profesores organizados de la Ceteg y los grupos defensores de derechos humanos como el Centro Tlachinollan, y dijo que “yo les hago un sincero llamado, eviten los actos de violencia, los bloqueos que ocasionan grandes pérdidas para la economía del estado”.
Pidió a la gente de la sociedad civil “que me acompañen en esta súplica para que cesen los actos  de violencia, que hagamos expresiones pacíficas, que mesuremos nuestros enojos y que vayamos todos en una ruta de armonía para reconstruir la paz”.
“Si a mí me dijeran que poniéndole fuego a todos los lugares emblemáticos de las instituciones gubernamentales y así van a regresar con vida los 43 jóvenes normalistas, pues saldríamos con ellos a prenderle fuego a todos esos edificios, pero eso no ayuda y no sólo no ayuda, sino que afecta”.
Agregó que afecta más cuando se saquean los comercios y cuando se bloquean por horas la autopista.
Señaló que “ahí están los liderazgos visibles, los familiares, están los jóvenes líderes de Ayotzinapa, líderes de la Ceteg, están los defensores de derechos humanos de Tlachinollan y todos ellos con nombres y apellidos, pero hay quienes al amparo de un escudo masivo se introducen embozados, enmascarados y pueden ser hasta provocadores que quieran desestabilizar la armonía y la economía del estado, eso no ayuda, eso afecta”.
En declaraciones a reporteros al término de su reunión con empresarios y sociedad civil, Ortega Martínez pidió a los manifestantes a realizar sus acciones de protesta dentro de la legalidad “y que desistan y abandonen las acciones de violencia”.
Se le preguntó del poco eco que ha tenido su llamado y el del Congreso hacia los manifestantes para evitar sus acciones violentas, y afirmó que su llamado ha sido atendido “medianamente”.
Recordó que la noche del viernes hubo una amenaza de realizar la quema de automóviles, lo cual ya no se realizó, “yo espero que prevalezca la sensatez y que los actos de violencia se vayan inhibiendo y reduciendo hasta que quede sólo la ruta de la construcción de la paz”.
Respecto a la caravana de familiares y compañeros de los normalistas desaparecidos desde el pasado 27 de septiembre, señaló que “es por la solidaridad”, y agregó que “la causa que enarbolan es muy justa” y comentó que “hacía muchísimos años que no se generaba un movimiento como este, con mucha solidaridad por algo noble y justo”.
Indicó que este tipo de movimientos “nos obliga a los gobernantes que atendamos como se lo merecen los familiares y los muchachos. De decirles toda la verdad de cómo va la investigación y reconstruir, junto con ellos, el tejido social y la paz”.
Respecto a la demanda de 123 plazas para normalistas egresados de normales públicas que integran el FUNPEG, Ortega Martínez señaló que “es justo su reclamo. Necesitamos más maestros. Nosotros serémos coadyuvantes para resolver su demanda”.
Sobre el acercamiento de las familias de los desaparecidos con miembros del EZLN, Ortega dijo que éste es sólo un movimiento social dialoguista “que no realiza actos violentos y que pueden ayudarnos mucho en este proceso de diálogo y paz”.
En este lugar el miembro del Consejo Ciudadano, Roberto Castillejo, pidió al gobernador la construcción de una biblioteca pública, lo cual se comprometió a realizar el mandatario.

Iguala no está sola

En su intervención, Rogelio Ortega manifestó el respaldo total de su gobierno al alcalde interino de Iguala y a los igueltecos.
Convocó a la unidad de las y los guerrerenses “para salir de la crisis, una crisis social y política que se originó aquí el día 26 y 27 de septiembre, pero que me dicen los que saben que pudo haber sido en cualquier otro municipio del estado de Guerrero ante la penetración de la delincuencia organizada en todo el tejido social”.
Dijo que le tienen que demostrar a los políticos que “los ciudadanos que no militamos en partidos políticos podemos hacer bien las cosas y no para quitarlos a ellos tampoco, (porque) son parte también de nuestros problemas y en todos los partidos hay gente buena y algunos no tan buenos”. Mencionó que su gobierno es coadyuvante en el caso del asesinato de los estudiantes y la desaparición de los 43 normalistas, “queremos estar con ellos en su dolor y en su luto, y con un trato de humildad, de sencillez y de tierra, mirándonos a los ojos”.
La primera visita oficial de Ortega Martínez a Iguala como gobernador estaba programada a las nueve de la mañana en el museo a la bandera y santuario a la patria, lugar al que llegó una hora después ya que fue a desayunar picaditas de salsa roja y carne de puerco en salsa roja con frijoles, acompañado de su esposa Rosa Isela Ojeda y el rector de la UAG, Javier Saldaña Almazán, en una fonda de la popular plaza Garibaldi, donde también invitó a desayunar a algunos reporteros.
Luego caminó por la calle Juan Ruiz de Alarcón, zona donde el ex alcalde José Luis Abarca reubicó a comerciantes ambulantes; algunos se le acercaron a saludarlo y otros le aplaudieron a su paso.
Antes, el gobernador, el rector y el alcalde Silviano Mendiola realizaron un recorrido en las instalaciones donde está ubicado temporalmente el centro de salud Agustín Batalla.
Ortega, Saldaña y Mendiola Pérez caminaron por la explanada municipal junto a la zona en la que fueron reubicados los expendedores de revistas y periódicos, siguieron por la calle Independencia hasta llegar al kiosco de la ciudad y de ahí al museo a la bandera, donde se reunió con representantes de los colegios de profesionistas, clubes de servicio, gente de la sociedad y el cabildo de Iguala.
A este encuentro también asistió el diputado del PRD, el aguirrista Oscar Díaz Bello.
“Vamos a trabajar juntos de la mano y vengo a decirles que Iguala no está sola, que se ve ya la luz en la salida del túnel para que nosotros siendo solidarios dejemos de lado la incertidumbre y la apatía”, dijo.
En la reunión con empresarios, profesionistas y sociedad civil no se dio la participación a ninguno de los presentes, sólo hubo la participación de los mensajes del alcalde Silviano Mendiola y del mandatario estatal.
En su mensaje ante el gobernador, el alcalde Silviano Mendiola dijo que no se puede exigir justicia violando la ley, pero la justicia requiere poder, inteligencia y voluntad para tomar las mejores decisiones, donde lo primero es no lastimar los derechos de terceros.
Mendiola confió en que los recursos estatales y federales para la reconstrucción y rehabilitación de las áreas dañadas del Ayuntamiento y el impulso económico “llegarán a nuestro municipio. Le pido que no deje a la suerte el destino de los igualtecos, sino por el contrario, que con la solidaridad y empuje que dé al municipio, estaremos dando un paso importante hacia el progreso”.
Por separado, José Isabel Arines Hernández, funcionario del gobierno de José Luis Abarca, entregó al mandatario un oficio a nombre del Frente Igualteco, en el que pidió la intensificación de la búsqueda de los normalistas, que gestione ante el Congreso la revocación de mandato de síndicos y regidores del cabildo igualteco, a quienes en días pasados llamó “narco-cabildo”, y que se donen o expropien los terrenos del ejido de Iguala donde han sido halladas fosas con restos humanos para que en estos lugares se creen parques y zonas de ecoturismo.

Ofrece a los delincuentes un intercambio

En otro acto, Rogelio Ortega tuvo un encuentro con estudiantes universitarios acompañado por el rector Javier Saldaña, donde se supervisó la construcción de las oficinas de la coordinación regional de la universidad, que llevan un 95 por ciento de avance según el responsable de la obra.
En su discurso Ortega reiteró su ofrecimiento a miembros de la delincuencia organizada su libertad y su vida a cambio de la de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.
“El reclamo es justo, es legítimo y la exigencia a las autoridades, la búsqueda intensa para encontrar a los muchachos, y lo he planteado, si fuera necesario que me citen al lugar que sea para hacer un canje, para hacer una negociación con quienes los tienen retenidos y puedan ser sus rehenes, al costo que sea, incluso de la propia vida y quienes nos conocen saben que no somos demagogos, saben que lo decimos de manera sincera y seria”, expresó.
Dijo que se suma al llamado a las autoridades de exigir a fondo la investigación y que se castigue a los responsables materiales e intelectuales de este genocidio y aún más, que se siente el precedente ejemplar para el “nunca jamás”.
En su discurso con los universitarios el rector Javier Saldaña festejó que por gestiones de Rogelio Ortega, la Secretaría de Hacienda “autorizó” subsanar el déficit que viene arrastrando la universidad, que es de 246 millones de pesos.
Agregó que la UAG será representante de México en el Parlamento Internacional de Educación, en el que participan 38 países.
Señaló que la UAG es la única universidad del país que abrió 4 mil espacios en 15 programas, tres preparatorias, 100 licenciaturas y los postgrados.
“Con estas acciones vamos a acompañar a nuestro gobernador de la paz y de la esperanza para que a Guerrero le vaya mejor en poco tiempo. Rogelio, donde ha estado, ha dado buenos resultados”, dijo.
“Nuestro gobernador no es el culpable. Nuestro gobernador viene a ayudar a reconstruir el tejido social. Viene a buscar la paz. Queremos decirles a nuestros hermanos de Ayotzinapa que vamos a estar con ellos de la mano para exigir justicia. Pero que nos demos la oportunidad de vivir en paz los guerrerenses, hermanados”, señaló.

No será “tapadera”

Por otra parte, en la primera visita a su tierra natal Taxco, el gobernador Rogelio Ortega expresó que ante la tragedia ocurrida en Iguala su gobierno “no es tapadera de nada y tiene que ser transparente” para profundizar en la investigación y que no queden impunes las responsabilidades de los autores materiales e intelectuales del asesinato de seis personas y la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa.
Ante los hechos ocurridos el 26 y 27 de septiembre reiteró que ha pedido a las autoridades federales “hablar con la verdad por más dura que sea y que nos informen”, así como su disposición de coadyuvar para que haya resultados “ y se siente un precedente y un nunca jamás” para castigar a los responsables.
Después de haber estado en Iguala, Tetipac e Ixcateopan, a la que se refirió como la tierra de sus ancestros, Ortega Martínez fue arropado por más de un centenar de personas en un salón del hotel Misión, entre funcionarios, políticos, empresarios y ciudadanos, donde afirmó que la vocación del gobierno que encabeza es “que se haga justicia y no quede nada impune” ante la tragedia que ha devino en una crisis política y social.
Señaló que frente a los hechos de violencia Guerrero merece vivir en paz, armonía y superar los rezagos luego de los daños y pérdida de vidas humanas por los fenómenos naturales Ingrid y Manuel que afectaron la mayor parte de la entidad.
Luego de las protestas que han derivado en acciones violentas, reiteró aquí que no va a criminalizar los movimientos sociales ya que las manifestaciones, la crítica y la exigencia son un derecho, “pero no para transgredir la legalidad y violar el derecho de los demás”.
En su intervención hizo un llamado a “ser tolerantes al extremo” y pidió reflexionar a quienes participen en actos de violencia, para coadyuvar en la reconstrucción del tejido social.
Pidió a los partidos políticos que “pongan los ojos en personas con una trayectoria limpia y honesta”.
De buen humor y sin dejar de afirmarse como taxqueño y jumilero, dijo que si “me agarraron de bateador emergente” como gobernador interino es porque se fijaron que estamos haciendo bien las cosas en la UAG, de la que por cierto estuvo acompañado por el rector Javier Saldaña Almazán, de quien dijo en broma “yo lo traigo siempre porque él es mi blindaje”.
En esa encomienda añadió que “como este gobierno es de 11 meses tenemos que hacer lo de ayer, vamos con el tiempo y lo que hay qué hacer, hay que hacerlo ya”, por lo que pidió a sus paisanos que “quiero que me acompañen y yo los acompaño en el clamor por la paz”, ya que advirtió que “Guerrero se nos puede ir en la violencia y lo vamos a perder como agua que se nos va de las manos”.
“Ayúdenme, para que Guerrero no se nos vaya”, insistió, “vamos a trabajar por la paz, por la revolución de la cultura de la paz”, no sin expresar sentirse emocionado “de estar en mi tierra, con mi gente de Taxco, con mis taxqueños y taxqueñas”.
Ortega Martínez, estuvo aquí en un encuentro convocado por el Grupo Proyecto Guerrero, que preside el empresario hotelero Cristian Berger, al que asistió acompañado por el alcalde Salomón Majul González; los diputados locales Marcos Efrén Parra Gómez y Omar Jalil Flores Majul; el delegado de la Sedatu, Héctor Vicario Castrejón; y el alcalde de Tetipac, Néstor Serrano Rodríguez, entre otros funcionarios, empresarios de Acapulco y una mayoría de políticos priistas. (Claudio Viveros / Taxco)

Confirma el Consejo de la Judicatura que dictó formal prisión al ex alcalde de Iguala Abarca Velázquez

El juzgado Quinto de Procesos Penales federales dictó auto de formal prisión al ex alcalde de Iguala José Luis Abarca Velázquez como presunto responsable de delincuencia organizada, secuestro y homicidio.
En un boletín difundido por el Consejo de la Judicatura Federal, se informó que Abarca Velázquez es acusado del asesinato de Justino Carbajal Salgado así como del secuestro de Nicolás Mendoza Villa, Héctor Arroyo Delgado, Efraín Amates Luna y Dante Cervantes Delgado.
El auto de formal prisión fue obsequiado por el Juzgado Quinto, con sede en Toluca, Estado de México, dentro de la causa penal 100/2014.
El ex Alcalde de Iguala se encuentra recluido en el Centro Federal de Readaptación Social Número Uno Altiplano en el Estado de México, como ya había informado la Fiscalía General del Estado (FGE).
Por otra parte, el gobernador interino Salvador Rogelio Ortega Martínez visitó por primera vez el municipio de Iguala en una gira por la región Norte.
A la población y al nuevo presidente municipal, Silviano Mendiola Pérez, les prometió todo el apoyo institucional de su gobierno, según un boletín de prensa.
“Vine a Iguala a respaldar al presidente municipal y a sus habitantes, vamos a trabajar juntos para restablecer las condiciones de paz en Iguala”, aseguró el mandatario para luego trasladarse al museo de la Bandera, donde encabezó un encuentro con la sociedad civil y empresarios de ese municipio.
A su llegada recorrió la zona de comida de la Plaza Garibaldi, propiedad de Abarca Velázquez, donde los vendedores y locatarios le hicieron algunas peticiones. (Agencia Reforma / Ciudad de México).

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