Descargan aguas negras en los ríos de la Tierra Caliente; no funcionan las plantas de tratamiento

Israel Flores

Ciudad Altamirano

En los nueve municipios de Tierra Caliente, ocurren descargas directas de aguas negras a los ríos de la región, porque la mayoría no cuenta con sistemas de tratamiento; de las tres plantas que se construyeron, dos están deshabilitadas y sólo la de Altamirano funciona, pero sin cubrir la totalidad del servicio.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) recibió el reporte de que la planta de aguas residuales de Ajuchitlán fue arrastrada por el río Balsas en septiembre de 2013. El estanque mayor fue arrastrado por la corriente y quedó atorado junto al puente Miguel Alemán, en Altamirano, 14 kilómetros adelante de donde estaba. Desde entonces, no han restaurado el servicio.
La planta de aguas residuales en Zirándaro, por sus costos dejó de funcionar desde hace cinco años. Las descargas se hacen directamente al río Balsas porque no se ha puesto a funcionar nuevamente el sistema.
En Altamirano, donde está la tercera planta de aguas residuales, fue rehabilitada de forma parcial después de que quedó afectada por las inundaciones de septiembre pasado por la creciente del río Cutzamala.
En Cutzamala, Arcelia, Tlapehuala y Coyuca de Catalán estaba un proyecto de construcción de nuevas plantas tratadoras, al igual que en Tanganhuato, municipio de Pungarabato, pero no continuaron las gestiones.
Las descargas directas de aguas residuales a los ríos Balsas y Cutzamala provocan multas mensuales de hasta 100 mil pesos a los ayuntamientos por parte de Conagua.