Acuerdan Convergencia y Carlos Sánchez la alianza por el desarrollo y la equidad

“Las puertas están abiertas para todos”: Luis Walton

 La Alianza Guerrerense de Carlos Sánchez Barrios, que tuvo acercamientos con el PVEM y con los precandidatos del PRD al gobierno estatal, Félix Salgado Macedonio y Zeferino Torreblanca Galindo, finalmente llegó a un acuerdo político con el Partido Convergencia para crear un Plan de Gobierno, como antesala para crear un frente opositor.

En conferencia de prensa, Luis Walton Aburto, presidente estatal de Convergencia, y Sánchez Barrios, de la ex priísta Alianza Guerrerense, definieron las bases de este compromiso, en donde a preguntas al respecto, el ex precandidato priísta dejó entrever que aceptaría no ser el candidato a gobernador por esta alianza.

Con Sánchez Barrios estuvieron los aliancistas Álvaro Leyva Reyes, Antonio Colín Ramírez, Rafael Encarnación Alfaro y Guadalupe Castillo Díaz, la vocera del grupo. Con Walton, ex candidato a alcalde y a diputado federal por Acapulco, que declinó esta vez a ser candidato a gobernador, estuvieron el delegado del CEN de Convergencia, Fernando Pineda Ménez; el regidor Mario Ramos del Carmen y su vocero de prensa, Anituy Rebolledo Ayerdi, quien leyó el documento del acuerdo.

Antes del comienzo de la conferencia, a las once horas, circuló entre reporteros y agentes de Gobernación federales, estatal y municipales, el rumor de que la convocatoria era para dar a conocer el respaldo de Convergencia al precandidato del PRD al gobierno estatal, Zeferino Torreblanca.

Ello, porque dos días antes Torreblanca acudió a la sede del partido Convergencia en Acapulco, a felicitar a Luis Walton por su cumpleaños, reunión a la que también acudieron políticos de otros partidos.

“Zeferino Torreblanca es mi amigo al igual que Carlos, pero la visita fue por motivo de mi cumpleaños” –dijo Walton a pregunta de si esa reunión se podría entender como un adelanto de un acuerdo político.

Al final de la conferencia, Walton Aburto afirmó que la alianza que ese día se concretó con el grupo de Sánchez Barrios, se mantenía abierta a otras organizaciones, partidos y personajes. “Las puertas están abiertas para todos”, dijo, a pregunta de su Convergencia tenía aún considerado una alianza con Zeferino Torreblanca, en caso de que fuese candidato por el PRD y decidiera serlo por otro partido.

El convenio de alianza por un plan de gobierno por el Desarrollo y la Equidad, establece ocho puntos, entre ellos, “garantizar los anhelos de desarrollo y equidad por un nuevo rumbo para Guerrero”; mantener un diálogo abierto con todos los guerrerenses y luchar por una auténtica fiscalización ciudadana al gobierno, así como aprovechar plenamente los recursos potenciales de cada región, así como una consulta directa a las comunidades sobre los proyectos de desarrollo e inversión.

La alianza se compromete a tener un combate frontal a la pobreza y a la marginación de los guerrerenses y buscar fórmulas de distribución equitativas y transparentes de la inversión estatal a los municipios, evitando la discrecionalidad o las preferencias por partido político o cercanía personal.

Se exige además una mayor asignación al estado de recursos del presupuesto federal, pues “es mucho lo que Guerrero ha aportado”, además de que se señala, se requiere generar un clima de confianza y de justicia para garantizar la inversión privada. Se ofrece también trabajar por la educación y el bienestar de la población, y se concluye que “estamos convencidos de que hoy más que nunca se han abierto las posibilidades de triunfo a condición de que marchemos unidos”.

Convergencia y Alianza por Guerrero exhortan a conformar una “gran coalición” para “enterrar de una vez para siempre la antidemocracia, el caciquismo, la corrupción, la impunidad , las complicidades y el autoritarismo”.

La conferencia fue saludada con porras como “¡Alianza, Alianza!”; “¡Convergencia, Convergencia!”; “¡Carlos, Carlos!” y “¡Walton, Walton!”, rubricando, lo que sí parece por lo pronto, una alianza anti-PRI.