Secuestran a dos hombres en Iguala a pesar de la vigilancia federal; uno huye y a otro lo ejecutan

Alejandro Guerrero

Iguala

Hombres armados secuestraron a dos personas el domingo, una de ellas, un taxista que logró escapar cuando lo dejaron atado en un árbol y atestiguó cómo los delincuentes torturaron a otro secuestrado al que le cortaron los dedos de una mano y después ejecutaron de un disparo.
El plagio de las dos personas se registró en diferentes puntos de Iguala durante este domingo a pesar de la vigilancia de la Policía Federal, la Gendarmería y la Marina.
Una fuente policiaca informó, según declaraciones ministeriales de un taxista, de quien se omiten sus datos por su seguridad, que éste fue secuestrado cerca de las 8:30 de la noche del domingo por un grupo de hombres armados que minutos antes habían abordado su taxi para solicitarle un servicio.
Los cuatro hombres le hicieron la parada en la calle Altamirano, cerca del mercado municipal, y le pidieron que los llevara a la colonia Rufo Figueroa, al sur de la ciudad.
En el Periférico Sur, antes de entrar a la colonia Rufo Figueroa, uno de los pasajeros lo amagó con un arma que le puso en su cabeza, posteriormente lo ataron de pies y manos y lo metieron a la cajuela del taxi.
Según el testimonio, después de unos minutos detuvieron el taxi y los pistoleros metieron en la cajuela a otro hombre atado de pies y manos.
Siguieron por una brecha de terracería durante varios minutos, según el testigo, y posteriormente los bajaron y los vendaron de los ojos.
El transportista, narró que aunque iba tapado de los ojos logró ver cuando al otro plagiado le cortaron los dedos de una mano, y escuchó los gritos de dolor, minutos después lo mataron de un disparo.
Después de esto, nuevamente lo metieron a la cajuela del taxi y lo llevaron hasta un cerro, donde lo dejaron atado a un árbol, advirtiéndole que no se moviera de ahí, y que sería liberado hasta que su familia pagara un rescate.
Al irse sus plagiarios, logró desatarse y caminó varios minutos por una brecha hasta llegar a una carretera, por donde pasó una urvan de la ruta Mezcala-Chilpancingo, la cual lo llevó hasta el crucero de la carretera federal México-Acapulco.
Más tarde pidió auxilio a una patrulla de la Policía Federal que pasó por el lugar, la cual lo trasladó hasta Iguala, donde fue atendido de las lesiones que le provocaron los plagiarios, y el lunes denunció el hecho.