Apoyo para la feria de la plata, pide el alcalde de Taxco al gobernador

Claudio Viveros Hernández

Taxco

En un encuentro con el gobernador del estado, Rogelio Ortega Martínez, el alcalde de Taxco, Salomón Majul González, solicitó conjuntar esfuerzos para lograr un mayor impulso a la promoción turística de este destino y, de manera especial, una proyección nacional e internacional de la Feria Nacional de la Plata que se realizará del 22 al 29 de este mes.
En vísperas de la feria, Majul González demandó que se fortalezcan los apoyos que redunden en beneficio de la promoción y difusión de esta ciudad platera, cuna de notables orfebres a quienes se dedica este festejo, a fin de que lleguen más visitantes y disfruten de las actividades artísticas y culturales, así como los diversos atractivos que tiene Taxco.
Asimismo, luego de que el programa fuera presentado el pasado martes en la ciudad de México, dio a conocer que pidió al Ejecutivo estatal enriquecerlo, ya que se trata de un festejo que otorga identidad a la artesanía platera y reconoce el arte de sus orfebres que han dado fama mundial a Taxco.
En este sentido, propuso a Ortega Martínez hacer una mayor aportación de recursos que permitan la contratación de artistas de talla nacional o internacional que favorezcan el elenco artístico de la edición 77 de la Feria Nacional de la Plata y ofrecer un programa de calidad, como ha insistido durante las semanas recientes a través de las redes sociales, esto en respuesta a la ciudadanía que exige actividades con artistas de renombre que refuercen este festejo.
En esta suma de esfuerzos y colaboración institucional, destacó que el gobierno municipal que encabeza está en la disposición de aportar recursos para la contratación de un artista extra, previo acuerdo con el gobierno estatal para definir la propuesta.
A dos días del arranque de la Feria Nacional de la Plata, el alcalde taxqueño expresó que Taxco es una ciudad tranquila y segura y se encuentra lista para recibir con los brazos abiertos a miles de visitantes.

Desfile con poca protesta

Por otra parte, el tradicional desfile del aniversario de la Revolución Mexicana se desarrolló en esta ciudad sin incidentes, con saldo blanco, pero también sin manifestaciones de solidaridad con los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, salvo un acto efímero en el zócalo al atardecer.
De acuerdo con reportes del oficial mayor del ayuntamiento taxqueño, Raúl Burgos Ocampo, el desfile transcurrió en orden con la participación de 20 instituciones educativas de distintos niveles, entre las que aparecieron otras organizaciones y grupos pequeños de la tercera edad en un recorrido que inició alrededor de las 10 de la mañana en el Parque Vicente Guerrero y concluyó en La Garita unas tres horas más tarde.
El desfile de los contingentes fue observado a su paso por el zócalo por autoridades del municipio, al igual que cientos de personas desde distintos puntos bajo la vigilancia de policías federales apostados a discreción en sitios estratégicos.
Las bandas de guerra predominaron en la descubierta de varias instituciones. En otros casos fueron los sonidos ensordecedores de música de banda, electrónica y otros géneros y estilos, con los cuales grupos de adolescentes y jóvenes en su mayoría protagonizaron bailes y movimientos que rayaron entre la ridiculez y el exotismo, ataviados con vestimenta y calzado fuera de tono que reflejó un gasto inútil ante la crisis y la situación social y política que se vive.
Como cada año, lejos de exaltar y recordar la gesta heroica revolucionaria, el desfile se tornó más en un carnaval desenfrenado y en el cual se observó la pérdida de identidad, sin ningún asomo de valores y conciencia social.
Ante las acciones que se generaron ayer en el país y a nivel internacional, con protestas y manifestaciones en solidaridad por los hechos ocurridos en Iguala y la desaparición de 43 estudiantes normalistas el 26 y 27 de septiembre, en Taxco sólo se observó a un solitario docente que desplegó una cartulina en sus manos ante el paso del desfile y algunos estudiantes inhibidos que no se atrevieron a mostrar las hojas tamaño carta de sus cuadernos en las que habían escrito “fuera Peña Nieto”.
Unas dos horas después del desfile, uno de los frentes del kiosko en el zócalo de la ciudad fue utilizado calladamente por cerca de una decena de hombres y mujeres jóvenes, que se identificaron como “Ayotzinapa vive, Taxco”, y quienes colocaron un mural con las fotos de los 43 normalistas desaparecidos y rótulos con diversas consignas sobre pliegos de papel en el que estamparon las huellas de sus manos con tinta roja.
La consigna principal fue: “vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
Decenas de personas se mostraron solidarias con la acción, otras, en su mayoría, permanecieron indolentes, como si nada sucediera. En las calles quedaron los rastros del desfile. Más allá, fue un 20 de noviembre más.