Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Abrir todas las fosas de Iguala, exigen a la PGR

Que abran todas las fosas que hay en Iguala, demandan familiares de desaparecidos

 

 

Alejandro Guerrero

Iguala

Familiares de desaparecidos recientes manifestaron que están dispuestos a buscar, excavar y si es posible exhumar cuerpos, ante la omisión del Ministerio Público federal de la Procuraduría General de la República (PGR), y exigieron que abra todas las fosas en este municipio.
El viernes una caravana de 35 familiares de desaparecidos de Iguala, Huitzuco y Cocula, recorrieron parte del cerro Gordo en el paraje La Joya, acompañador por promotores de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), agentes de la PGR y la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), donde ubicaron más de 30 puntos con indicios de posibles fosas, además de los ocho acordonamientos que hicieron las autoridades en las que estimaron que podría haber restos humanos.
“No se hace justicia, la verdad, eso deberían de hacer las autoridades, destapar todas (las fosas) para ver qué es lo que hay, no nomás ir a escarbar y ya”, expresó frente a una de las zonas acordonada por la PGR la señora Esperanza Rosales Segura, a quien le desaparecieron a su hijo Alejandro Moreno Rosales en la colonia Grupo Colosio, al sur de Iguala el 13 de noviembre de 2009, cuando éste tenía 17 años y trabajaba de ayudante de una pipa repartidora de agua potable.
La madre de uno de las más de 200 víctimas de desaparición que recientemente hicieron públicas sus historias, se dijo impresionada al ver las fosas de donde en abril y octubre fueron exhumados los restos de 17 personas.
“Me siento impresionada, nunca había visto yo esto, hasta ahorita estoy viendo lo que es, yo nunca sabía lo que había en Iguala hasta ahorita que lo estoy viendo”.
Demandó justicia para todos los desaparecidos, “que se compruebe todo lo que hay y que no escondan lo demás las autoridades, que abran todas estas fosas en presencia de todos nosotros”, pidió.
Dijo que si las autoridades no hacen su trabajo, como madre de uno de los desaparecidos y con el apoyo de quienes pasan por una pérdida similar, está dispuesta a excavar con sus propias manos las fosas para buscar los restos de sus familiares.
“Soy madre soltera y vivo sola con mis hijos,  los dejé ahorita solos para venir a acompañar a los que vienen a la búsqueda porque a mí me urge encontrar a mi hijo, tiene cinco años que no sé nada de él y no es justo lo que están haciendo”, expuso.
Otro caso de los más de 200 recientemente denunciados, es el de la señora Bertha Moreno García, madre de José Manuel Cruz Moreno, desaparecido el 2 de enero de 2009 en la colonia Loma del Zapatero cuando tenía 22 años y era ayudante de albañil.
La mujer, que vive en una de las colonias que es paso obligado para llegar al paraje La Joya donde entre abril y octubre han sido exhumados los restos humanos de 36 personas, incluyendo las halladas en el paraje Monte Hored, menciona que ya conocía de la existencia de las fosas clandestinas a través de las notas periodísticas en los medios de comunicación, pero nunca las había visto.
Entre lágrimas, la madre que participó el viernes en la caravana que integraron familiares de víctimas de desaparición, manifestó que siente “coraje y rabia” por no encontrar a su familiar y pidió, “siquiera que nos dijeran ‘ya los matamos, ya les hicimos lo que les hicimos’, pero que nos digan dónde los dejaron, pero no nos dicen lo que les pasó”.

 

Toman Ayotzinapa, la FECSM y el Cecop las casetas de La Venta y Palo Blanco para recaudar dinero

Ocupan la primerta durante 3 horas y la otra 2 para pagar el juicio de Marco Antonio Suástegui y para las familias de los 43 estudiantes desaparecidos, informan

 

Lourdes Chávez y Argenis Salmeron

Chilpancingo y Acapulco

Jóvenes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM), de la Normal de Ayotzinapa y comuneros del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a La Parota (Cecop) tomaron las casetas de La Venta y Palo Blanco de la Autopista del Sol.
Los estudiantes pidieron cooperacion a los automovilistas en apoyo a los familiares de los 43 desaparecidos y para solventar los gastos del juicio de su vocero Marco Antonio Suástegui Muñoz, preso en Nayarit.
La caseta de La Venta fue tomada durante 3 horas y la de Palo Blanco por dos.
En Palo Blanco, un centenar de estudiantes de la FECSM, que aglutina a las normales rurales del país pidieron cooperación sin incidentes.
Los manifestantes en este punto fueron estudiantes normalistas, jóvenes de diferentes estados de la Eepública que llegaron a Guerrero para solidarizarse con el movimiento por la presentación con vida de 43 alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa detenidos-desaparecidos en Iguala el 26 de septiembre.
Llegaron cerca de las 12 del día, y como ha ocurrido desde que comenzó su lucha, los trabajadores de Caminos y Puentes Federales se retiraron para evitar cualquier confrontación con los estudiantes.
Cruzaron la caseta el alcalde de Zihuatanejo Éric Fernández Ballesteros, y el diputado federal de Movimiento Ciudadano Víctor Jorrín que entregaron su cooperación de 50 pesos. Ninguno de los dos fue reconocido por los normalistas.
Los estudiantes revelaron que también cruzaron la caseta dos patrullas de la Policía Federal, y una quiso pasar sin hacer su aportación.
Momentos antes de retirarse, los estudiantes permitieron el paso libre a los conductores, regresaron a la Normal Rural a las 2 de la tarde.
En La Venta, los normalistas y comuneros tomaron a las 10 de la mañana cuatro de las siete casetas que hay en el lugar, y se negaron a proporcionar información de la movilización.
Los manifestantes expresaron a los automovilistas que la cuota voluntaria era de 50 pesos, y se escuchó que les decían: “son para los familiares de los normalistas desaparecidos” y “son para los gastos del juicio de nuestro vocero encarcelado”.
También se subieron a los autobuses de las líneas Estrella de Oro y Estrella Blanca que circularon por la caseta y les pidieron a los pasajeros una cooperación voluntaria. No realizaron pintas ni daños.
Los manifestantes tampoco decomisaron camiones de carga durante su movimiento como en otras ocasiones ni hubo vecinos de la colonia Lucio Cabañas a la expectativa para recibir los alimentos que en ocasiones regalan.
Los inconformes se retiraron de la caseta de La Venta a la 1 de la tarde, y los trabajadores de Capufe reanudaron labores.
En la caseta aún permanecen las consignas contra el presidente Enrique Peña Nieto como: “fuera Peña”  “justicia para Ayotzi” y “vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
El martes, el Movimiento Popular Guerrerense (MPG) tomó la caseta de La Venta y ocho autobuses y dos camionetas de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) para trasladar a manifestantes a la marcha del 20 de noviembre en la ciudad de México.

 

 

“Sigue un movimiento armado”, dijeron padres de Ayotzinapa; fue por desesperación, matizan estudiantes

Lo que se está valorando es una búsqueda ciudadana con la ayuda de las policías comunitarias, aclara el comité de la Normal Rural

 

Redacción

Ante la falta de resultados en la presentación de sus hijos, el viernes algunos padres de familia molestos advirtieron que “lo que sigue es un movimiento armado”, declaró ayer el comité estudiantil de Ayotzinapa, y subrayó que esa posición es resultado de la desesperación.
El dirigente estudiantil David Flores Maldonado dijo ayer que la lucha por los 43 normalistas desaparecidos es pacífica. Sin embargo, se comprende y se explica la posición de ese grupo de padres que ayer protestó afuera de la Comisión de Defensa de los Derechos del Estado de Guerrero (Codehum) y lanzó botellas de agua a funcionarios federales cuando salían en sus vehículos al grito de “asesinos de estudiantes”.
Afirmó que sus palabras fueron por la desesperación en que se encuentran, la impotencia y el coraje después de más de 50 días de búsqueda de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, sin ningún resultado.
Luego señaló que algunos medios de comunicación “le están dando visibilidad a declaraciones que no son del consenso de todos los padres de familia ni de los estudiantes. Fue un incidente desafortunado”, dijo en alusión a las expresiones de protesta del viernes al medio día de algunos padres de Familia. Y en referencia a uno de los participantes en esa manifestación, dijo que “hay gente que se acerca a dar su apoyo pero no son padres directos de los compañeros. Ustedes (los medios) están desviando la atención, nosotros no estamos en esa actitud, seguimos en la exigencia a las autoridades de continuar con las investigaciones”, expuso.
A pregunta expresa sobre la declaración de que lo que sigue es un movimiento armado respondió que “no, se está valorando una búsqueda ciudadana con la ayuda de las policías comunitarias. Nosotros mantendremos las protestas pacíficas, el movimiento mantendrá la llama encendida para no quede en el olvido, como lo hemos hecho en las últimas protestas. Hemos demostrado que nuestros movimientos son pacíficos”.
En la protesta del viernes una de las madres incluso dijo que estaban dispuestos a “desollar a policías”, y ayer Flores Maldonado reiteró “como ya te dije hay gente que se acerca, no los tenemos bien identificados pero no es (padre de alguno de los 43 desaparecidos), las declaraciones son al calor de la impotencia y el dolor de no saber de los compañeros. Los papás están desesperados”, insistió.
La protesta del viernes fue mientras se desarrollaba una de las reuniones que han tenido los padres y los normalistas con funcionarios federales, quienes no informaon de ningún avance en la localización de los alumnos desaparecidos.

“Vamos a hacer justicia por nuestras propias manos”

En un video difundido por El Universal en su pagina de internet, uno de los manifestantes dijo “aquí están los padres de familia y están externando su dolor y ya no es un dolor es una rabia, es un coraje, próximamente si no aparecen nuestros compañeros desaparecidos lo que sigue es un movimiento armado, se va hacer una llamada a todo el pueblo para que responda y vayamos a buscar a nuestros hermanos, a nuestros hijos, a nuestros sobrinos, pero ya no vamos a ir en marcha ya no vamos a ir pacíficamente, vamos a ir armados y vamos a buscarlos y si no los encontramos vamos a agarrar a los presidentes municipales y vamos a hacer justicia por nuestras propias manos”.
Una madre que portaba el cartel con la imagen de su hijo desaparecido agregó “así como ellos nos hicieron así les vamos a hacer. Esto no se va a quedar así, nosotros como padres de familia vamos a llegar hasta las últimas consecuencias, caiga quien caiga, nosotros no tenemos miedo, y si el pinche gobierno nos quiere matar pues que nos mate, pues”.
Y en alusión a que a la reunión no vino ningún secretario ni el procurador, exclamó: “No hay nadie del gobierno, son puros pinches achichincles del gobierno aquí, y si nos quiere matar ahorita, si nos va a cargar la chingada que nos cargue ahorita, pero queremos que nos entreguen a nuestros hijos”.
Un joven con una boina intervino y demandó: “Castigo para el maldito gobierno ¿Qué hace? asesina, no lo hay”.
“Ellos también tienen familia, tienen hijos
también”, dijo otra de las madres de familia.
La primera madre que intervino agregó “si secuestraran al hijo de un rico, en diez minutos, en veinte minutos ya pagan su rescate, pero como nosotros somos campesinos no tenemos para pagar señores”.
“No nos hacen caso”, se dolió una más de las madres.
El mismo joven de la boina volvió a intervenir y dijo “¿Cuántos padres de familia dejaron  su trabajo, perdieron su cosecha por andar buscando a sus hijos, por saber una razón?”, lo que fue acompañado por exclamaciones de apoyo de madres y familiares.
“Ya dos meses van a ser y todavía estamos acá”, dijo otra madre de uno de los 43 estudiantes desaparecidos, cubierta con un rebozo.
“¿Que quiere el gobierno? Mañana otra reunión, pasado otra más y ¿Así nos va a cargar? ¡Ya basta! Ya basta de este pinche maldito gobierno corrupto”, reclamó uno de los manifestantes.
“¡Puras reuniones!” dijo una mujer más.
“Si no sueltan a nuestros hijos vamos a agarrar a un pinche policía y le vamos a pelar de la cara así como sacaron a uno de nuestros hijos, así se los vamos a hacer a esos policías”, dijo una madre de familia que sostenía con sus manos el retrato de Felipe Arnulfo Rosa.
“Eso quieren para que vean como duele”, agregó otra madre que estaba en la protesta y señaló “ojo por ojo, diente por diente”.
“Yo no tengo miedo” dijo una madre y recordó que los normalistas fueron desaparecidos “hace 55 días señores”.
“¿Cómo es posible que hasta el día de hoy no den una pinche respuesta?, como es que hasta el día de hoy nos vienen a hacer pendejos a los padres de familia con el pinche dolor, que tienen a estudiantes y así nos cargan”, reclamó otro de los familiares. (Redacción, con información de Jacob Morales).

 

En tres años hubo 42 quejas contra la policía preventiva de Iguala, reporta la Codehum

Acumuladas en 14 años, 77 quejas por desaparición forzada en el estado, informó el presidente del organismo, Ramón Navarrete Magdaleno

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Antes de que los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa fueran detenidos-desaparecidos en Iguala, la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) levantó 166 actas de personas reportadas como extraviadas o legalmente privadas de la libertad, e integró 77 quejas por desaparición forzada en 14 años, informó el presidente del organismo, Ramón Navarrete Magdaleno.
Pero en total, la Codehum solicitó información a las dependencias de gobierno para la localización de 940 personas en este mismo periodo, porque organismos oficiales de derechos humanos de otros estados solicitaron la implementación de protocolos de búsqueda para localizar a 774 personas, cuya desaparición se relacionó con Guerrero.
En consulta en sus oficinas, el funcionario reconoció que la mayoría de los casos del estado siguen abiertos, porque las investigaciones no han tenido el éxito que quisieran, y precisó que la desaparición forzada sólo se establece cuando se acusa a alguna autoridad como presunta responsable de privación ilegal de la libertad.
Navarrete Magdaleno reconoció que las cifras oficiales no evidencian la magnitud del problema, pues en las investigaciones de los homicidios y la desaparición forzada de los 43 alumnos de la normal de Ayotzinapa el 26 de septiembre, siguen encontrando fosas clandestinas y sólo en la primera ubicación se reportaron restos de 38 personas.
En alusión a los estudiantes que fueron detenidos por policías municipales de Iguala y de Cocula, detalló que en los últimos tres años se han radicado 42 quejas contra la policía preventiva de Iguala, pero no precisó cuántas de ellas corresponden a desaparición forzada. En 2012 hubo 10 quejas; en 2013, 14, y en lo que va de 2014, ocho.
No se cuentan entre esos casos el de los estudiantes de Ayotzinapa, que fue atraído por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y es investigado por la Procuraduría General de la República.
Sobre la investigación de las 77 quejas de desaparición forzada en Guerrero, reconoció que “hay muchas dificultades; tenemos expedientes que por más investigados, estamos en ausencia del desaparecido”.
No obstante, señaló que cuando hay hallazgos de fosas clandestinas, como las
de Iguala, se van documentando y se incluyen como nuevos sitios para nuevas búsquedas y para cotejar los expedientes.
Las cifras oficiales de la Codehum indican que las denuncias de privación ilegal de la libertad en Guerrero (que no necesariamente llegan a una queja) de 1999 a 2014, fueron, en promedio, 10 por año. El mayor número de casos se denunció en 2008, con 38; y en 2004 sólo dos.
Sin embargo, en los desaparecidos de otros estados que se buscaron en Guerrero, hay un incremento sustancial a partir de 2010 hasta lo que va de 2014, donde se reportaron, en promedio, 117 casos por año.
De 2000 al 2009, el promedio de búsquedas de personas en hospitales, cárceles y servicio médico forense de Guerrero, fue de 18.6.
Navarrete Magdaleno estimó que hoy los familiares de personas desaparecidas en la zona Norte están recurriendo directamente a la Procuraduría y a las organizaciones que están realizando estudios de ADN para identificar a los cuerpos, “porque de momento no consideran la violación de los derechos humanos de los que son víctimas, la gente está más preocupado en localizar a sus familiares”.
Reconoció que antes de Ayotzinapa se usó poco el ADN como método de identificación de cuerpos; se ocupaba el esquema de reconocimiento a través de la dentadura, alguna lesión del hueso que se pudiera ver, ropa, los zapatos u otra característica.
“El ADN sólo lo auxiliaba la PGR a tomar, ahorita hay mejores condiciones, no deja de ser una pericial poco usada, hasta que pasan cosas como ésta se pueden ver la carencia de técnicas del investigador, en delitos de estas características”, dijo.
Finalmente, indicó que la Codehum abrió el expediente VG/246/2014-III, para investigar y dar un seguimiento de las autoridades estatales sobre la aplicación de protocolos para identificación de los restos que se están encontrando en las fosas de Iguala, y del tratamiento a los familiares de las víctimas.
En la prensa se mencionan que sólo en 2014 se han exhumado de 116 cuerpos de 73 fosas, y que el año pasado fueron rescatados 45 cadáveres de 36 fosas clandestinas.
“La queja que estamos abriendo es con motivo del hallazgo de las fosas y para conocer si el estado o el órgano investigador está haciendo la parte que le toca en la identificación, contacto con las familias, con los registros y más datos específicos”, explicó.

 

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