CARTAS (No cree que el PRD pueda garantizar una elección interna legal y transparente)

Señor director:

 Mucho le agradeceré la publicación de la presente en su prestigiado diario.

Resulta obvio que el coordinador de la precampaña de Armando Chavarría, Florentino Cruz Ramírez, salga en defensa de la opción del senador como el más indicado desde su punto de vista para ser el candidato del PRD para la gubernatura de Guerrero. Lo que sería relevante es que fueran los ciudadanos, esos que según el ex rector de la UAG le brindan ¿un enorme caudal de respaldo? quienes lo hicieran.

Pero por lo menos aquí en Acapulco, donde vivimos casi un tercio de los ciudadanos que votaremos en el 2005 para gobernador, no tengo otro cosa que ir a mi trabajo, por mis hijos a la escuela o a cualquier otra de mis actividades, para ver autos y más autos con una calcomanía de Zeferino; en promedio quince calcomanías de Zeferino, o más, por una de Chavarría.

Por ello me parece injusto y carente de objetividad que el señor Cruz Ramírez, en lugar de ensalzar las virtudes de su candidato, pretenda minimizar el trabajo de los otros, que en el caso del realizado por Zeferino gran prestigio le ha dado al PRD en el estado, y nos salga con que cualquiera que hubiera venido a gobernar Acapulco después del desbarajuste priísta de 1996 a 1999, y con la disposición de terminar su periodo, sería recordado como un buen gobernante. Y por supuesto que no es así. Me extraña que una persona con elevados estudios como el señor llegue a conclusiones tan erróneas y considere que la población de Acapulco en su gran mayoría opina que Zeferino fue un buen gobernante sólo porque gobernó después de tal periodo y concluyó su mandato y remate acusándonos de sumisos e ignorantes, “introyectados” en la cultura del súbdito y seguidores del “mesías”.

¿Ese es el respeto que le merecemos los ciudadanos a quiénes nos están pidiendo el voto?

Por supuesto que nos importa el programa de gobierno de los candidatos. El caso es que el programa de gobierno de Zeferino ya lo conocemos en Acapulco en los hechos, y no sólo en las hermosas y rebuscadas palabras de los dirigentes universitarios, que con tan brillantes ideas de gobierno seguramente tienen colocada a la UAG en la vanguardia de las universidades públicas del país.

Y aunque somos ignorantes no dejamos de entender su estrategia: alargar la definición del candidato del PRD al máximo para que el candidato priísta siga nadando solito y colocar cuando ya no les quede más remedio por tener el tiempo de la elección constitucional encima, urnas en todo el estado, en una elección interna sin garantías de ningún tipo –¿o Florentino Cruz me podrá decir sin faltar a la verdad que la estructura del PRD en el estado garantizaría un proceso legal y transparente?– para que el PRI meta sus manotas y se instale al candidato cómodo. Ese por el cual, por lo menos en Acapulco con su gran caudal de votos, prácticamente no vemos que se apoye, aunque el señor Cruz diga lo contrario.

 Félix Cardona Reyes
Ignacio Zaragoza 31-A
Barrio del Hueso
Acapulco, Gro.