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Exigen castigo a los asesinos del hermano de presunto secuestrador

 

 El crimen, en Tixtla, el 20 de abril. Judiciales me obligaron a decir que yo había participado en un rapto y si no accedía matarían a mi familia y están cumpliendo, dice el hermano de la víctima

 Roxana Ibarra

El vocero de los presos políticos perredistas recluidos en el Cereso de Acapulco, Jerónimo Hernández Refugio, pidió al procurador Jesús Ramírez Guerrero castigo a los asesinos de Heriberto Padilla Nava, hermano de uno de sus compañeros, Ismael Padilla Nava, el 20 de abril a las 2:30 de la tarde, en la calle Prolongación Acapulco, de Tixlta, y que no detengan sólo a “chivos expiatorios”.

Hizo un llamado también al PRD y a las organizaciones sociales de izquierda para que exijan justicia, “pues se repite la misma historia de que las personas que simpatizan o son miembros de una organización campesina son asesinados”. Dijo que Heriberto Padilla era miembro de la organización campesina de Tixtla, Vicente Guerrero.

Por su parte, Ismael Padilla Nava denunció que el asesinato de su hermano podría tener tintes políticos, “porque en la tortura que recibí fui amenazado por los judiciales que me detuvieron, quienes me dijeron que si no aceptaba ser particípe del secuestro de Raúl Astudillo –delito por el cual está preso– iban a asesinar a su familia, y creemos que cumplen las amenazas”.

“El 26 de julio de 2000, cuando me detuvieron en el deportivo Vicente Suárez, los judiciales me trajeron por diferentes partes, me vendaron los ojos y me torturaron hasta el 2 de agosto, que me presentaron en el Cereso de Tixtla, y el 18 de agosto me trasladaron al penal de Acapulco”, contó.

Agregó que el asesinato de su hermano ocurrió un día antes de que un familiar le informaran que su sentencia podría dictarse en 15 días. Pidió a las autoridades que su sentencia se apegue a derecho.

Heriberto Padilla Nava es hermano también de Felícitas Padilla Nava, quien fue trasladada sin previo aviso, la madrugada del viernes, del penal de Neza Bordo, luego de que pasó dos años en el penal de máxima seguridad La Palma, en Almoloya, estado de México, al penal de Cuautitlán, ubicado en un municipio alejado del estado de México. Esto lo informó en un comunicado la coordinadora por la Libertad por los presos políticos, Cruz Arteaga.

“Los presos políticos perredistas nuevamente levantamos la voz para exigir justicia y que este crimen no quede sin castigo”, dijo Hernández Refugio.

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