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Rechaza Vicario el cargo de delegado especial y será presidente del CDE del PRI

Saca el acuerdo de una reunión el miércoles con Madrazo

 Ayer tomó posesión como secretario de Organización y hoy lo hará como presidente en una asamblea estatal. Se menciona a la añorvista Erika Lurhs como secretaria general

 Hugo Pacheco León Chilpancingo

El senador Héctor Vicario Castrejón rechazó el cargo de delegado especial en funciones de presidente del PRI, y ayer rindió protesta como secretario de Organización lo que le abre la puerta estatutaria para que este viernes, en Asamblea Estatal sea ungido presidente del Comité Directivo Estatal del PRI.

Trascendió que en la Secretaría General del CDE será designada la añorvista Erika Lurhs Cortés, quien fue propuesta por el movimiento feminista priísta que encabeza María Inés Huerta Pegueros y la ex alcaldesa y secretaria de la Mujer, Sandra Belkis Ocampo.

El ex aspirante a gobernador, Héctor Vicario confirmó vía telefónica que se reunió el pasado miércoles con Roberto Madrazo en la ciudad de México, donde rechazó la figura de delegado especial con funciones de presidente, que es la figura estatutaria que el CEN podía decidir para dirigir el partido en Guerrero, como se anunció el lunes al hacer pública la renuncia de Héctor Apreza Patrón como presidente estatal y de Silvia Romero Suárez, como secretaria general.

En un acto discreto, al que no fue invitado El Sur, efectuado a las 14:30 horas, el todavía presidente en funciones (porque el CEN aún no acepta la renuncia), Héctor Apreza Patrón dio a conocer a integrantes del CDE y dirigentes de los sectores y organizaciones del partido de la renuncia al cargo del secretario de Organización, Roberto Torres Aguirre. Enseguida dio posesión al senador Héctor Vicario Castrejón y le tomaron la protesta estatutaria.

Posteriormente, en entrevista vía telefónica, Héctor Vicario informó que el acuerdo político con todos los aspirantes a gobernador para declinar por Héctor Astudillo, fue que sería presidente estatal del PRI y no delegado especial.

Por ello convino con Roberto Madrazo, en la ciudad de México, que este viernes en una asamblea estatal –en la que estarán todas las fuerzas políticas internas priístas– se dé a conocer a través del delegado estatal del CEN, Guillermo Fonseca Alcaraz, que se acepta la renuncia de Héctor Apreza y de Silvia Romero.

En ese mismo acto se dará a conocer el acuerdo del CDE que –según el estatuto– en orden de prelación el secretario de Organización ocupa el cargo de presidente estatal, y de esa manera Héctor Vicario será ungido.

También se informará de la renuncia del secretario de Elecciones, el ex diputado Ernesto Sandoval Cervantes (quien pasará al cargo de secretario de Organización y se desconoce quién ocupará su cargo), para que en su lugar sea designada Erika Lurks, y por acuerdo del CDE sea la nueva secretaria general.

Los movimientos de la Secretaría de Elecciones y la Secretaría General se esperaba que ocurrieran este jueves por la noche, pero al cierre de la edición aún no se concretaban.

Vicario reconoce pugnas internas, “pero no son batallas campales”

En la víspera de rendir protesta como presidente             estatal del PRI, el senador Héctor Vicario dijo a El Sur que su “futuro político no depende del derrota del PRI en este proceso electoral, que será reñido, o del triunfo del candidato Héctor Astudillo Flores, sino de la gente de Guerrero”.

La respuesta del senador fue a la pregunta del reto que significará para su carrera política y aspiración a la gubernatura asumir la dirigencia estatal del PRI, en un escenario incierto de triunfo para su partido, por eso añadió: “el candidato tiene el perfil adecuado para asegurar el triunfo electoral y el futuro depende de la organización y trabajo del partido”.

Además retomó las advertencias del candidato Héctor Astudillo, de que se requiere “un pacto” y “una tregua” interna para asegurar ganar la elección constitucional de febrero de 2005, y explicó que en las “cinco ciudades importantes del estado y en las 21 restantes ciudades intermedias (sic), existen conflictos y pugnas naturales propias de las fuerzas políticas o de militantes que buscan cargos de representación popular, y la prioridad será reconciliar para todos salir juntos con el proyecto de Héctor Astudillo”.

Además adelantó que una prioridad será la integración y posicionamiento de todas las fuerzas políticas del partido, “porque tareas electorales hay muchas”.

Resaltó que que pactar y emplazar a una tregua no quiere decir que en el PRI haya “una batalla campal”, sino de lo que se trata es que “todos echemos agua por el mismo carril y no se distraigan en alguna otra aspiración”.

También dijo que una de las principales tareas será la de buscar financiamiento, como las aportaciones de los militantes y funcionarios y de administrar con transparencia las prerrogativas para que puedan hacer una campaña digna de los guerrerenses que genere confianza en el electorado.

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