Marchan mujeres priistas en Chilpancingo y Acapulco contra feminicidios y violencia

Salvador Serna / Rosendo Betancourt Radilla

Acapulco / Chilpancingo

Unas 350 mujeres priistas del movimiento Mexicanas por la Paz marcharon en Chilpancingo y Acapulco para pedir el cese de la violencia que desató el gobierno panista de Felipe Calderón Hinojosa, exigir a las autoridades competentes un alto al reciente brote de feminicidios en diversas zonas del puerto y que las campañas políticas no se basen en descalificaciones y ataques.
En Chilpancingo, a paso lento, las mujeres vestidas de blanco gritaron consignas como “mujeres por la paz”, “las familias quieren paz” y “Guerrero quiere paz”.
En Acapulco el contingente partió de la glorieta de la Diana con destino al Asta Bandera, de la playa Papagayo donde la mayoría a pie y otras en automóviles, vestidas de blanco portaban cartulinas y banderines con alusiones a la paz, tolerancia y responsabilidad inmediata a las autoridades.
En Chilpancingo la caminata partió de la alameda Granados Maldonado, y fue encabezada por la ex síndica Socorro Mondragón y la coordinadora del movimiento en la región Centro, Mercedes Calvo Elizundia, avanzó unos 500 metros hasta llegar al Zócalo, donde realizaron un mitin y una cadena humana.
Calvo Elizundia, esposa del coordinador de campaña en Guerrero de Enrique Peña Nieto, Héctor Astudillo Flores, dijo que el país no aguantaría otro sexenio de violencia que al momento, de acuerdo a cifras oficiales rebasa los 60 mil mexicanos asesinados.
Se le preguntó su opinión sobre que el candidato del PRI a la Presidencia es señalado por movimientos estudiantiles, y consideró que la juventud tiene que ser escuchada siempre y les recomendó “encaminarse por las propuestas, no por la descalificación”.
Se le recordó que el movimiento que representa es partidista, organizado por la ex dirigente nacional del PRD, Rosario Robles Berlanga, y justificó: “Peña Nieto es el único que ha ofrecido propuestas y no ha estado descalificando a los contrincantes, creemos que es el único que tiene rumbo hacia algo concreto”.
Mientras que en Acapulco unas 100 mujeres de la organización Mexicanas Comprometidas por la Paz marcharon por la paz.
Al frente del contingente, un grupo de jóvenes sostenían una manta con la leyenda Mujeres Mexicanas, Comprometidas por La Paz, lo que llamó la atención de turistas que les tomaron fotografías e incluso algunos se sumaron a la caminata al enterarse que culminaría en la playa Papagaya, a un lado del Asta Bandera.
“Queremos y exigimos la paz social. Las mujeres de Acapulco estamos preocupadas y no queremos más secuestros y violencia, ya no queremos sentir miedo por lo que le puede pasar a nuestras familias. Queremos que la ciudadanía nos apoye, que haga su sentir. Tenemos familiares secuestrados, por eso estamos aquí comprometidas”, dijo la señora Juanita Salas, que iba acompañada por sus hijas y nietos.
También se observó a algunas maestras de la zona 6 de Acapulco se sumaron a la marcha, la cual fue convocada por medio de las redes sociales de internet.
“Nosotros somos mujeres trabajadoras, ha habido casos de mujeres que salen a sus centros de trabajo y ya no regresan, queremos vivir tranquilas y en paz”, demandó una de las profesoras.
Por el centro comercial La Gran Plaza, el contingente, donde  iban estudiantes de las universidades Loyola, Americana y Tecnológico de Acapulco, hicieron una pausa para repartir banderines con odas a la paz y la tolerancia a peatones y automovilistas.
“Pedimos a las autoridades un alto inmediatos a los feminicidios”, indicó la estudiante en Administración de Empresas, Maritza Alcaraz Jiménez.
Al llegar a la Asta Bandera las mujeres se conglomeraron justo en medio del camellón de la Costera para mostrar su manta y cartulinas a los automovilistas, peatones y curiosos turistas que se acercaron a darles su apoyo.
Al final llegó la candidata a diputada local por el PRI, Julieta Fernández, quien también es coordinadora de redes de la sociedad civil de Enrique Peña Nieto en el estado.