Desalojan transportistas al kínder Luz y Alegría de la capital; los padres bloquean calles en protesta

Padres de familia, maestras y alumnos del kínder Luz y Alegría, tomaron las calles del encauzamiento del río Huacapa, para exigir a la SEG el pago de renta del salón que utilizan para tomar clases * Foto: Éric Chavelas Hernández

Lourdes Chávez

Chilpancingo

La Organización de Transportistas Unidos de Chilpancingo (Otuch) desalojó los muebles del jardín de niños Luz y Alegría, donde los alumnos habían recibido clases por casi dos meses, porque la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) no cubrió a tiempo el pago de la renta que se venció hace 15 días, denunciaron padres de familia, que en protesta bloquearon dos calles alternas, junto al encauzamiento del río Huacapa.
En abril comenzaron las primeras manifestaciones de padres de familia de este jardín, porque con el sismo del 20 de marzo pasado descubrieron que existía un dictamen de Protección Civil estatal que inhabilitó el edificio escolar hace dos años, por riesgos de deslizamientos.
Con los últimos sismos, el jardín fue desocupado y se suspendieron clases hasta que los padres de familia, exigieron clases para los niños y los trabajadores comenzaron a trabajar sobre una calle alterna al jardín, a un lado del zoológico de Chilpancingo, como protesta.
A partir de mediados de abril, los padres y maestros instalaron a los niños en la bodega de la Otuch, donde incluso el alcalde de Chilpancingo, Tulio Pérez Calvo, ofreció pagar la primera renta.
Los padres de familia que ya sabían del desalojo, se presentaron en la bodega de la Otuch, ubicada a un lado del encauzamiento del río Huacapa y bloquearon con automóviles particulares y con los muebles del plantel, los dos sentidos de la avenida y una calle que comunica al centro de la ciudad.
Luego de casi tres horas de protesta, se presentaron en el lugar la directora de Preescolar de la SEG, Rosario Aguirre Muñoz, para hacer el pago a los encargados, y ahí recibió los reclamos de los padres de familia.
En entrevista, la funcionaria declaró que el dueño de la bodega incumplió con los requisitos que pidió la SEG para liberar el pago, “pero se liberó, ya cubrió con los requisitos, ya le traen el cheque”.
Luego invitó a los padres a levantar la protesta porque ya se había liquidado el adeudo, y aseguró que fue cuestión de la SEG. Aceptó que no hubo una intolerancia de parte de los dueños de la bodega al sacar a la calle los muebles del jardín de niños y cerrar la puerta, y añadió “si no le conviene, que diga, nos interesa que a los niños se les atienda, por eso se va a hablar con ellos”.