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Exigen estudiantes al rector de la UAG que atienda un conflicto en la prepa 11 de Tlapa o marcharán a la capital

Carmen González Benicio

Tlapa

En conferencia de prensa los consejeros y alumnos de la Unidad Académica Preparatoria número 11 Teresa Estrada, de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) exigieron al rector que atienda el conflicto laboral, de acoso sexual y de venta de calificaciones que la mantienen en paro desde hace 17 días.
En la plática realizada el viernes por la tarde estuvieron los padres de familia Álvaro Vivar Vivar, Ceferino Ureiro Bazán, la representante de los estudiantes Zair Banda Martínez y alumnos que remarcaron que si no hay respuesta para el lunes o martes marcharán en caravana de Tlapa a Chilpancingo, para que el rector Javier Saldaña les haga caso en su petición de destitución de seis profesores, a los que señalan de malas actuaciones.
Los alumnos entregaron un documento que denominaron Manifiesto del Paro de la Preparatoria, en el que exigen la salida inmediata de los profesores Ernesto Bravo Díaz, María González Hernández, Edwin Ramírez Vallejo, Celes Fierro Torres y Ernesto Gómez García.
Enfatizaron que Bravo Díaz es prepotente, déspota y represor contra los alumnos, a quienes humilla minimizándolos ante sus compañeros y comportándose como si fueran pares.
Contaron que el paro inició el 12 de noviembre por las denuncias presentadas por los estudiantes sobre el cobro de calificaciones por los catedráticos, así como la humillación, represión, el abuso psicológico, emocional, físico y acoso sexual del que eran objeto, lo cual consideraron una violación a sus derechos como universitarios.
Dijeron que eso estaba en el Reglamento de la Defensoría de los Derechos Humanos y Universitarios en que menciona que “no deben ser discriminados por razones de origen étnico, nacionalidad, sexo, ideología, religión, preferencias, situación económica o capacidades diferentes”, por lo que exigieron respeto.
Remarcaron que las anomalías son de años atrás pero que ahora como alumnos críticos y autónomos no lo obviarían ni lo permitirían porque eso dañaba su integridad y ética, por lo que pidieron apoyo y comprensión para continuar su movimiento hasta que reciban atención de las autoridades correspondientes para resolverlo.
La madre Josefina Camacho Casimiro, vía oficio del cual se tiene copia, denunció por acoso sexual al profesor Cele Fierro Torres para con su hija que va en cuarto semestre, dijo que a la joven e, profesor le pidió que fuera a su casa a realizar trabajos domésticos y que la podía llevar a donde quisiera como Chilpancingo y comprarle lo que quisiera y además pasaría sus materias de Historia y Filosofía.
La madre solicitó la intervención del director al considerar que esas peticiones ponían en riesgo la integridad de su hija que iba a la escuela a prepararse, no a ser hostigada.

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