Denuncian normalistas que grupos ajenos al movimiento han tomado casetas haciéndose pasar por estudiantes

El FUNPEG y Ayotzinapa acusan que “normalistas egresados”, “disidentes” y hasta transportistas han tomado las casetas de La Venta, Palo Blanco y el Maxitúnel para pedir “cooperación” que no es para la lucha por los desaparecidos y que la desprestigia

Jacob Morales Antonio

Chilpancingo

Grupos que se presentaron como pertenecientes al movimiento Resistencia Normalista Guerrerense (RNG) 126 tomaron durante hora y media la caseta de Palo Blanco y la caseta de La Venta de la Autopista del Sol, donde pidieron cooperación a los automovilistas.
En Chilpancingo, se retiraron cuando estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa llegaron a la caseta de Palo Blanco; los estudiantes de Ayotzinapa denunciaron que gente ajena al movimiento ha tomado las casetas de peaje en nombre de la lucha por la aparición de sus 43 estudiantes detenidos y desparecidos en Iguala el 26 de septiembre.
Otro grupo de normalistas del Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG) tomó por dos horas el Maxitúnel de Acapulco.
Representantes de la Normal Rural de Ayotzinapa y del FUNPEG que no quisieron dar sus nombre denunciaron por separado que personas ajenas al movimiento han tomado las casetas del Maxitúnel de Acapulco, de La Venta y de Palo Blanco de la Autopista del Sol, a nombre de la lucha estudiantil; y cobran una “cooperación” que no es para los familiares ni para apoyar la lucha, afirmaron.
Abundaron que, el dinero que piden quienes se hacen pasar por integrantes del FUMPEG, de Ayotzinapa e incluso maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) no llega a manos de los familiares, y afectan la imagen del movimiento.
El representante del FUNPEG indicó que las casetas de La Venta y Palo Blanco han sido tomadas por normalistas egresados “desertores” del movimiento, transportistas de Xaltianguis encabezados por un líder a quien apodan El Buda, por vecinos de la colonia aledaña en la caseta de La Venta, el túnel de Acapulco, y por turistas “chilangos”, pero afirmaron que esas acciones no son acuerdos de la Asamblea Popular Nacional; los normalistas culparon al gobierno de tratar de desestabilizar con estas acciones al movimiento.
Un normalista del FUMPEG que también pagó 50 pesos en la caseta de Palo Blanco a los integrantes de Resistencia Normalista cuando se dirigía a la reunión estudiantil en Ayotzinapa, alrededor de las 12:30 del día, pasó al mismo tiempo que estudiantes de Ayotzinapa y representantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM). Ambos conversaron con quienes tenían tomada la caseta, que en todo momento se cubrieron sus rostros, y minutos después estos se retiraron con el dinero recaudado.
El estudiante del FUNPEG informó que, durante su trayecto de Acapulco a Chilpancingo, otro grupo que se identificó como “de egresados” mantenía tomada la caseta de La Venta, manifestación que no reconoció. Afirmó que los integrantes del FUNPEG mantenían tomada la caseta del Maxitúnel de Acapulco.
Los representantes de Ayotzinapa y del FUNPEG acordaron retirar a los supuestos “normalistas egresados”, bajo la promesa de una reunión con sus dirigentes, que no están en el movimiento y con quienes han tenido altercados, como en la caseta de La Venta el 12 de noviembre.
Abundaron que la exigencia de los normalistas egresados del RNG es de plazas para educación básica, pero no asisten a las reuniones en Ayotzinapa, además de que lo que recaudan no es entregado al movimiento por los 43 desaparecidos.
Uno de los que mantenían tomada la caseta desde las 11 de la mañana dijo en entrevista que la acción era en apoyo a Ayotzinapa y que eran egresados de las normales públicas identificados en el movimiento del RNG.

La toma de la Caseta de Palo Blanco

Alrededor de las 11 de la mañana, unas 15 personas que se identificaron como egresados normalistas de la RNG, que antes formaban parte del FUNPEG, tomaron las casetas. Llegaron en camionetas particulares y pidieron de forma pacífica una cooperación de 50 pesos a los automovilistas que pasaban por la caseta de Palo Blanco.
Por hora y media se mantuvieron en la caseta de peaje, se instaron en los módulos donde están las computadoras y utilizaron las cajas para recaudar el dinero, incluso daban cambio a los usuarios. Se retiraron a las 12:30 del día, cuando estudiantes de Ayotzinapa llegaron al lugar.
Unos cien estudiantes que se trasladaron en dos autobuses de Futura se mostraron sorprendidos al llegar y ver tomada la caseta, porque no se les habían informado de la actividad a las organizaciones que participan en la Asamblea Popular Nacional, y señalaron que esas personas buscan desestabilizar la lucha de la Normal.
Durante las dos horas que los estudiantes de Ayotzinapa y del FECSM estuvieron en la caseta ubicada a 20 minutos de Chilpancingo, mantuvieron sus rostros cubiertos con pañuelos y bufandas. No hubo incidentes.
Alrededor de las 2:50, dos patrullas que escoltaban a un autobús de policías antimotines federales pasaron por el lugar y pagaron el peaje de 50 pesos a los normalistas. 20 minutos después, pasaron 18 patrullas de federales con armamento antimotines y cinco autobuses blancos con policías antimotines que saludaron a los reporteros que se tomaban fotos a los carros.
Para las 3:10 de la tarde, los normalistas se retiraron del lugar en los dos autobuses y se dirigieron a la Normal ubicada en el municipio de Tixtla.

Normalistas del FUNPEG toman el túnel de Acapulco

Unos 30 estudiantes del FUNPEG tomaron las casetas de cobro del Maxitúnel durante dos horas, donde de manera pacifica pidieron cooperación voluntaria a los automovilistas.
A la 1 de la tarde, los jóvenes, entre hombres y mujeres, llegaron a las casetas de cobro del Maxitúnel a bordo de una camioneta blanca Pinck Up y un autobús de Estrella de Oro; todos iban con el rostro cubierto con playeras y pañuelos, informaron los trabajadores de las casetas.
Según los trabajadores, los estudiantes se identificaron como normalistas de Ayotzinapa; ahí los jóvenes tomaron el lugar de los cobradores y les pidieron a los automovilistas una “cooperación voluntaria” , sin forzar una cantidad, y permitieron el paso libre de vehículos, autobuses y camiones.
Los jóvenes no destrozaron el equipo en las casetas y sólo se colocaron a los costados de los módulos de cobro y en las vías para pedir la cooperación.
Según los trabajadores de las casetas de Maxitúnel, los jóvenes argumentaron que la toma de las casetas de cobro era para ayudar en la búsqueda de los 43 normalistas de Ayotzinapa detenidos-desaparecidos desde el 26 y 27 de septiembre, en Iguala.
Después de las 3 de la tarde, los jóvenes se retiraron de las casetas; abordaron el autobús y la camioneta en que llegaron y se retiraron con dirección a Chilpancingo; según se informó. (Carlos Moreno / Acapulco).