Da el púbico una larga ovación a El demonio de mediodía en su preestreno

 Destacan el montaje y la actuación de la obra dirigida por Salvador Velasco

 Con una ovación de pie y un prolongado aplauso Acapulco recibió la obra El demonio de mediodía por su tratamiento del tema, montaje y actuación, acerca el teatro local al profesionalismo dramatúrgico.

La obra dirigida por Salvador Velasco y presentada en el Salón Chilpancingo del centro de convenciones dura dos horas y 20 minutos, sin embargo, en ningún momento se vuelve cansada o tediosa, al contrario, la intensidad tanto actoral como del argumento van creciendo hasta un anunciado pero trágico final.

El demonio de mediodía retrata la vida de El rey sol Felipe Segundo, hijo de Carlos Quinto personificado por Enrique Caballero quien de su propia mano corta su descendencia en el linaje al asesinar a su primogénito, Don Carlos de Austria, infante de España caracterizado por Ángel Lara Martínez.

La historia tiene lugar en diferentes habitaciones del castillo llamado El Escorial, lugar de habitación y de reinado de Felipe segundo, la escenografía movil y sencilla, se resuelve por medio de cuatro columnas que se colocan en puntos estratégicos del teatro, así como muebles y utilería que cambian para mover a los actores de la recámara real, al despacho, a la capilla o a un calabozo.

La obra presenta la vida durante el imperio español del siglo 16 y la proliferación de la Santa Inquisición, así como los sinuosos vericuetos del poder que llevan al absolutismo, a la traición y a la muerte.

La obra original de Kurt Becsi que en 1965 interpretara al español el dramaturgo mexicano Rodolfo Usigli, cuenta con un reparto de 14 actores en escena, con Enrique Caballero e Iris García Cuevas en los papeles estelares.

Esta última representa el papel de Isabel de Valois, madre de Isabel La Católica, quien engaña al rey Felipe con su hijo, Don Carlos y provoca la caída del linaje de los reyes de España. En su papel, Iris García se desenvuelve con fluidez, interpretando a una reina valerosa, que aunque comete adulterio en un mundo tan enérgicamente apegado a las leyes de Dios, logra salvar su vida aprovechando el embrujo de amor que ejerce sobre el rey.

El demonio de mediodía aborda también el absolutismo hispano del siglo 16 y su contexto crítico; muestra el debate entre el individuo y el estado, así como las perversiones que resultan del ejercicio del poder absoluto.

La obra es una historia de pasión y poder, dos fuerzas que mueven al ser humano hasta la consumación de su destino, terrible y sublime, absurdo hasta el crimen.

Es una producción cuidada al detalle en cuanto a su ritmo que mezcla elementos del teatro clásico con el contemporáneo por medio de la música con instrumentos modernos y sonidos barrócos.

Además actúa en la obra Raúl René Soto como el cardenal Don Diego de Espinoza, quien es el depositario de la confianza del rey, así como su cómplice en el asesinato de Don Carlos.

Participan en la producción los grupos teatrales, Grupo Plástico Octágono, el Taller Escénico Acapulco, La Gruta de la Casa de la Cultura Zona Sur de la Universidad Autónoma de Guerrero, Arte Escénico Ananda y el taller de teatro Quimera.

El estreno de la obra será el 30 de abril a las 20 horas en el Salón Chilpancingo del centro de convenciones de Acapulco. Habrá tres funciones posteriores el 1, 7 y 8 de mayo.