Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

PERISCOPIO

La mano de Añorve y la respuesta de Figueroa. El PRI va a llevar su proceso de elección de candidato a gobernador hasta mediados de enero. Eso le dijo el presidente del Comité Ejecutivo Nacional César Camacho, a los aspirantes con más probabilidades que ven con optimismo la posibilidad de recuperar Casa Guerrero ante la crisis por la que pasa el PRD y sus candidatos.
“No pasa nada”, dijo Camacho a algunos de los impacientes priistas, que piensan que dejar diciembre daría ventaja al PRD, Movimiento Ciudadano y Morena, que tampoco dan luces en la fecha definitiva para elegir a su candidato.
Por cierto, bastante inconforme anda el aspirante del figueroísmo a dirigir el cargo, el presidente del PRI en el estado Cuauhtémoc Salgado, porque en las últimas encuestas ordenadas por ese partido no ha aparecido en las filtraciones que de las mismas han aparecido en algunos medios.
–No me incluyeron en la encuesta –se ha quejado de las mediciones de popularidad, donde aparecen como punteros el recientemente abucheado diputado federal Manuel Añorve, el alcalde de Chilpancingo Mario Moreno, frecuentemente señalado como si tuviera relaciones con un grupo delictivo y el diputado local Héctor Astudillo, quien al parecer sería el que menos puntos negativos tiene.
El descontento de los figueroístas por esta clara maniobra –¿acaso de Añorve?– fue expresado en un extenso desplegado que se publicó ayer en este y otros periódicos, dirigido a Camacho y la secretaria general Ivonne Ortega Pacheco en el que se quejan de la “actitud dolosa y perversa de quienes pretenden manipular o distorsionar la realidad, mandando a elaborar encuestas a modo y pagando en diversos medios la difusión de información tergiversada y totalmente ajena a la realidad, con la clara intención de confundir, no solo a la sociedad, sino a la misma dirigencia nacional”.
Para más señas, el presidente de la CNOP, César Flores Maldonado, del grupo político figueroísta que impulsa a Cuauhtémoc Salgado, encabeza la lista de los firmantes en la que se incluyen los dirigentes de la CNC, la OMPRI y la Red de Jóvenes y la mayoría de los presidentes de los comités municipales.

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Un (ex) añorvista para el PRD. El PRD eligió este domingo a su presidente en Acapulco. En sesión de Consejo Municipal, designaron como tal a Isaías Arellano, un cuadro político del ex regidor y ex diputado local de ese partido, Ramiro Solorio Almazán, ahora secretario técnico de la fracción del PRI en la Cámara de Diputados federal, en donde el jefe es el sonorense Manlio Fabio Beltrones.
A su cargo actual, Solorio, priista de origen, pasado después al PRD y enquistado como regidor por el partido Convergencia, hoy Movimiento Ciudadano, llegó apoyado por el ahora diputado federal Manuel Añorve Baños, el vicecoordinador de la bancada priista. Como regidor, desertor de Convergencia y regresando de nuevo al corral del PRI, Solorio promovió a sus cuadros en diversos espacios de gobierno, entre ellos al profesor Arellano, que fue director de Conservación y Mantenimiento del ayuntamiento de Añorve.
Bueno, si en el PRD estatal es secretario general el ex priista Jorge Salgado, diputado federal militante ahora del PRD no por sus convicciones, sino porque el jefe Ángel Aguirre, ahora en funciones de ex gobernador, decidió cambiar de camisa, pues qué esperar. Que se siga en la línea.

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Y en eso del abaratamiento de las camisas de partido, esto le pasó al diputado local Javier Taja, quien se hizo regidor hace algunos años merced a unas elecciones internas donde valían más los votantes llevados a las urnas que la carrera o méritos de partido de los concursantes.
Resulta que en una caseta de cobro de la Autopista, donde normalistas de Ayotzinapa boteaban a favor del movimiento, fue identificado por algunos participantes.
–Ese es diputado del PRD –gritó alguien, como llamándole a cuentas.
–No muchachos, soy (ahora) del PRI –dijo, como para exonerarse.
Y le llovieron regañadas.

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