Hollywood no es un monstruo, pero algunos de sus aspectos lo son, dice David Cronenberg

*La película del cinesta que retrata el lado obscuro de la meca del cine, Mapa a las estrellas, se estrenará este jueves en México

Mónica Delgado / Agencia Reforma

París

Entre los objetos turísticos que mejor se venden en Los Ángeles son los planos que permiten descubrir las mansiones de los famosos en las colinas de la ciudad.
Mapa a las estrellas (Maps to the stars), que se estrena este jueves en México, es un recorrido por un Hollywood, pero el de las pesadillas.
“Hollywood no es un monstruo, pero algunos de sus aspectos lo son”, comentó el cineasta David Cronenberg en entrevista.
De la mano del realizador canadiense, esas mansiones de lujo que hacen soñar al público revelan su faz oscura.
En la casa de Benjie (Evan Bird), de 13 años y máxima estrella juvenil del momento, la arquitectura minimalista, su luminosidad y apacibles jardines contrastan con todos los problemas subyacentes de la fama precoz, como la droga, y también con otros, como los secretos de familia.
“Las estrellas tienen dinero, la gente las adora y tienen un sentimiento de libertad, pero entienden que es una trampa, que en realidad no tienen libertad. Eso sucede principalmente con los niños en esta película”, destacó Cronenberg.
Detrás de los muros de su residencia, Havana Segrand, una premiada actriz de edad media interpretada por Julianne Moore, vive obsesionada por el recuerdo de su madre, una célebre actriz de las primeras décadas del cine que murió en un incendio.
El fantasma de esa madre la acosa y, para liberarse, consulta a Stafford Weiss, padre de Benjie y célebre terapeuta de las estrellas, interpretado por John Cusack.
Con la esperanza de con ello poder exorcizar a ese fantasma, también trata de obtener el papel de su propia madre en una cinta que se prepara sobre su vida.
Para Cronenberg, el uso de los fantasmas en su película es sólo un recurso narrativo y de ninguna manera una voluntad de hacer un filme sobrenatural.
“Es una manera de mostrar que los personajes están obsesionados por su pasado. Yo no creo en fantasmas ni en una vida más allá de la muerte. Soy ateo. Pero entiendo que cuando tienes seres cercanos, como tus padres, que mueren, los puedes escuchar y a veces hasta hablas con ellos porque siguen en tu pensamiento, en tu recuerdo”, opinó.
Aseguró que el Hollywood que presenta está lejos de ser una ficción total y son vivencias de su guionista, Bruce Wagner.
“Bruce dice que cada línea de diálogo es algo que escuchó realmente. No es realmente mi visión de Hollywood, sino la de Bruce. Me gustó mucho su guión y me pareció una muy buena manera de examinar la humanidad a través de ese filtro”.

De vampiro a chofer

La estrella de la saga Crepúsculo, Robert Pattinson, participa en esta cinta.
Bruce Wagner escribió el guión hace 10 años cuando trabajaba de chofer de limusina y buscaba destacar como actor.
El escritor incluyó a su propio personaje un poco al margen de la trama, interpretado por Robert Pattinson.
“Es un actor maravilloso, pero no quería un rol protagónico, no deseaba hacer una película en la que fuera la estrella principal. No se sentía con ganas de llevar toda la película”, dijo Cronenberg.
La cinta se estrenará en Estados Unidos en febrero próximo.