Niega un juez la aprehensión a dueños de Las Salinas; los acusa empresa que quiere despojarlos

Brenda Escobar

Zihuatanejo

El abogado de los 18 copropietarios del predio denominado Las Salinas Viejas, ubicado en las inmediaciones de la comunidad Barrio Nuevo, en Zihuatanejo, Guillermo Sotelo Otero, del despacho R&N Abogados, en esta ciudad, dio a conocer que el juez Primero Penal de Primera Instancia en el Distrito de Azueta, Jesús Campos Ramírez, negó la solicitud de orden de aprehensión pedida por el Ministerio Público del fuero común en contra de sus clientes a quienes la empresa Médanos Ixtapa SA de CV demandó por el robo de unos rollos de alambre de púas y palos de madera.
Debido a que desde el 2005 los 18 campesinos han evitado que los inversionistas de la citada empresa los despoje de sus 161 hectáreas de tierras, éstos han hecho lo posible para que a través de las instancias legales se las adjudiquen.
Ayer jueves, el abogado Guillermo Sotelo dio a conocer que  el juez no encontró elementos para autorizar las órdenes de aprehensión en contra de sus clientes, “los están acusando por robo calificado con un monto superior a los 40 mil pesos que presuntamente es lo que cuestan los rollos de alambre y postes de madera que según los inversionistas, estaban en su terreno”.
Dijo que el Ministerio Público adscrito a los juzgados “apeló porque recibió la orden personalmente por la procuradora de Justicia de Guerrero, Martha Elva Garzón Bernal, ella fue la que ordenó que se apele la decisión del juez, por lo que también los abogados de Médanos Ixtapa al parecer apelarán en una segunda instancia”.
“Por ese motivo, como abogado de los campesinos, quiero hacer pública la preocupación de ellos ante esta situación, debido a que las tres denuncias que los inversionistas han puesto en su contra, el juez de Primera Instancia aquí en Zihuatanejo ha actuado conforme a derecho negándoles las órdenes de aprehensión porque no hay elementos para ello puesto que mis clientes tienen comprobado que son los legítimos dueños de esas tierras, sin embargo, los abogados de la empresa apelan a una segunda instancia y ahí es donde el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Jesús Martínez Garnelo, mete las manos”.
El abogado sostuvo que sus clientes “están muy gastados económicamente, además desde hace cinco meses que no pueden entrar a sus tierras para aprovechar el ciclo agrícola, entonces, están preocupados porque si la segunda sala ordena que se les detenga, de nuevo van a tener que recurrir al amparo de la justicia federal y gastar un dinero que no tienen”.
“A nombre de ellos, yo le hago un llamado muy atento al gobernador Ángel Aguirre Rivero para que sea el intermediario entre los inversionistas y mis representados, que no por pretender detonar turísticamente esa zona, pasen por encima de los derechos y la dignidad de mis clientes; que por favor tanto él como el presidente del Tribunal, el señor Jesús Martínez Garnelo saquen las manos de la justicia, que dejen de manosear la justicia y dejen que esto se resuelva conforme a la ley, no conforme a los intereses monetarios que seguramente los inversionistas les estarán ofreciendo”.
Médanos Ixtapa pretende construir en esa zona residencias turísticas, cuartos de hotel y un campo de golf con una inversión de poco más de 100 millones de dólares.
Desde el 2005, los 18 pequeños propietarios de la pequeña propiedad denominada Las Salinas Viejas, mantienen la defensa de sus 161 hectáreas que pretenden despojarles los inversionistas de la empresa Los Médanos Ixtapa, quienes se dicen los dueños de esas tierras que los campesinos tienen en posesión desde hace 30 años y en las que siembran maíz, jamaica, jitomate, sandía y chile.
El pleito legal contra los campesinos empezó luego de los inversionistas compraron a la vecina colindante de sus tierras –dueña únicamente de 55 hectáreas-, quien en el contrato de compra-venta que entregó a los inversionistas señala en una de las cláusulas que en las tierras que adquieren hay gente ocupándolas pero que éstas “no son problema”.
Pero los problemas empezaron para los campesinos cuando descubrieron que en un documento de apego y deslinde, la mujer incluyó las 161 hectáreas que son propiedad de ellos y de las que cuentan con los respectivos registros de propiedad desde hace 30 años y se las vendió a los inversionistas de Los Médanos Ixtapa.