Matan sicarios a un hombre y dejan herido a otro en céntrica parada de transporte en Zihuatanejo

Brenda Escobar

Zihuatanejo

Dos hombres fueron atacados a balazos cuando se encontraban en la caseta del transporte público ubicado en la avenida La Boquita, en el centro de Zihuatanejo; uno de ellos murió en el lugar de la agresión y otro más resultó con un rozón en la cabeza que le provocó daño cerebral, según se conoció más tarde.
El muerto fue identificado como Rafael Méndez González, de 60 años de edad, con domicilio en la unidad habitacional Infonavit El Hujal, en esta ciudad; tenía un balazo en la cabeza y quedó sentado en la banca de la caseta.
Mientras que el herido dijo llamarse Leonardo González Ramírez, de 62 años, de oficio rotulista, con domicilio en la colonia 24 de Abril, en esta ciudad.
Información conseguida en el lugar del hecho indica que el ataque ocurrió cerca de las 2 de la tarde de ayer jueves; según versiones de testigos, los dos baleados estaban sentados en la caseta conversando cuando desde el carril contrario,  hombres armados a bordo de un vehículo del que no proporcionaron características y que iba con dirección al centro de la ciudad, les dispararon y huyeron.
Luego de la agresión, los transeúntes llamaron a los paramédicos de Protección Civil municipal y de la Cruz Roja quienes dieron los primeros auxilios a las dos víctimas, sin embargo, Rafael Méndez murió por el disparo que recibió en la cabeza; mientras que el herido fue trasladado a un hospital de esta ciudad donde más tarde se reportó estable pero con lesión cerebral.
Al lugar llegó una hija del hombre muerto  quien dijo a los policías que su padre había sido propietario de un restaurante en la playa La Madera y que actualmente por su avanzada edad, se dedicaba sólo a socializar con sus amigos, “era un hombre bueno, le gustaba mucho pasear por aquí, platicar y tomar café con sus amigos”.
El hecho provocó que se congestionara la circulación vehicular en los dos sentidos de la avenida La Boquita, así como en la glorieta de la plaza Kioto que está ubicada a menos de 10 metros de donde ocurrió el ataque; decenas de curiosos se arremolinaron a observar en torno a la escena del crimen.
El agente auxiliar del Ministerio Público del fuero común acudió a hacer la diligencia correspondiente mientras que policías municipales, estatales y agentes ministeriales, así como militares y marinos acudieron a tomar nota del hecho.