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Bloquean padres de Ayotzinapa y estudiantes la Costera de Acapulco y retienen al alcalde una hora

Al ex gobernador Ángel Aguirre no se le investiga y debería de estar en la cárcel, se queja el papá de uno de los desaparecidos, Melitón Ortega. “Ni policías tenemos” y no va a reprimir las manifestaciones, afirma Luis Walton. Sale del bloqueo acompañado de sus escoltas luego de un diálogo de unos 10 minutos con los manifestantes

 

Karina Contreras / Aurora Harrison

Padres de familia de los 42 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, estudiantes de esa escuela, maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), electricistas, alumnos de la Normal rural de Chihuahua y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) retuvieron ayer al alcalde Luis Walton Aburto del partido Movimiento Ciudadano (MC) durante una hora y le exigieron que se pronunciara por la presentación con vida de los estudiantes.
Al concluir su bloqueo en la costera a las 4 de la tarde, jóvenes de Ayotzinapa, de la UNAM y de Chihuahua (a quienes se pudo identificar por su complexión física y vestimenta) aventaron bombas molotov a la camioneta suburban del alcalde Luis Walton Aburto, la que antes desvalijaron y destruyeron por dentro. De la camioneta sacaron un sobre amarillo tamaño carta que subieron a un autobús.
Los padres de familia llegaron por la calle María Bonita a la glorieta del Centro de Convenciones alrededor de las 12:15. En ese momento el alcalde se retiraba del lugar donde encabezó una reunión de turismo.
La camioneta en la que se trasladaba el funcionario fue parada, los manifestantes la rodearon normalistas encapuchados.
Los guardaespaldas del alcalde rápidamente se acomodaron alrededor de la camioneta y los activistas les dijeron que no le harían nada, que sólo era una manifestación.
Estudiantes mujeres, al parecer de Chihuahua (pues en Ayotzinapa sólo hay hombres), incitaron a sus compañeros a que pintarrajearan la camioneta retenida y en ella escribieron: “El pueblo organizado vencerá”, “Fue el Estado”, “La sangre será vengada 43”, “Asesinos viajan aquí” y “Ayotzi vive”.
En el lugar se vivieron momentos de tensión, los normalistas poncharon las llantas traseras de la camioneta blindada.
Mientras los jóvenes boicoteaban el vehículo, padres de familia de los desaparecidos de Ayotzinapa se concentraron con las fotos de sus hijos, ocuparon un carril, el que va de la base naval al centro de la ciudad, mientras que durante unos quince minutos las mujeres normalistas bloqueaban el sentido Centro-Base y gritaban consignas.

La protesta fue porque el Presidente no responde sus demandas, acusan padres de los desaparecidos

El papá Melitón Ortega tomó el micrófono y explicó que estaban en protesta porque el presidente de la República Enrique Peña Nieto no había dado una respuesta positiva a su planteamiento de que las autoridades presenten con vida a los 42 estudiantes desaparecidos desde la noche del 26 de septiembre en Iguala. y que ese era el motivo por el que estaban manifestándose. Advirtió que para ellos no hay vacaciones en estos días, que no habrá Navidad ni Año Nuevo, y que seguirán sus actividades de protesta de manera pacífica.
“No vamos a cesar ninguna actividad que las que tenemos programadas, porque sabemos que el gobiernos federal en estos días se ha dedicado a amenazar, hostigar y reprimir a los padres de familia”, expuso.
Acusó que no ha habido respuesta del gobierno, la Procuraduría General de la Rebública  (PGR) ha querido cerrar el caso con el argumento de que los cuerpos encontrados en el basurero de Cocula son de los muchachos, pero “no estamos dispuestos a dejar el caso ahí, nosotros seguiremos luchando”.
Aseguró que sus manifestaciones son de manera pacífica y responsabilizó a los gobiernos federal, estatal y municipal, “si sufrimos una agresión por parte de la Policía Federal, nosotros no venimos a agredir a nadie, nuestro movimiento es pacífico para exigir el esclarecimiento de los hechos en Iguala. Queremos que nos presenten con vida a nuestros hijos y además venimos exigir también al gobierno federal que castigue a los responsables”.
Agregó que saben que al ex gobernador Ángel Aguirre “no se le está haciendo una línea de investigación, exigimos a la Procuraduría que se haga una línea de investigación para que ese ex gobernador esté en la cárcel”.
También exigió cárcel para “los militares que participaron” en los ataques de policías y sicarios la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre en Iguala.
De la retención del alcalde de Acapulco, el padre de familia subrayó que el movimiento por los jóvenes tiene nada en contra de él, pero que lo hacen responsable si hay alguna agresión en contra de los manifestantes.
Añadió en su mensaje que lo único que quieren es que les digan en dónde están sus hijos, “que nos entreguen a nuestros hijos, que nos den la información de dónde los tienen, que el Ejército nos los entregue, no vamos a descansar, para nosotros no habrá Navidad, no habrá año nuevo mientras no aparezcan nuestros hijos”.
De la tregua que pidieron turisteros del puerto, subrayó: “No va ver tregua para nada, que los empresarios exijan al gobierno que nos devuelvan a nuestros hijos y, mientras, vamos a seguir con nuestras actividades todo el periodo vacacional, hasta el 5 de febrero tenemos programadas las actividades. Ni un paso atrás, aquí vamos a estar”.
Otro de los padres dijo que estaban encabronados y que pedían 2 minutos con los responsables de la desaparición de los normalistas porque “tenemos métodos más eficaces para hacerlos confesar”.
Dijo que no habrá elecciones y “Guerrero no se cansa y los padres tampoco”.  Indicó que no vale más el turismo ni el dinero que la vida de 42 jóvenes. Calificó como inhumano que los turisteros pidan una tregua y “para nosotros no hay vacaciones, descanso, vamos a seguir en la lucha una y otra vez”.

El encuentro con Walton

El alcalde de Acapulco, Luis Walton Aburto estuvo cerca de 40 minutos en su camioneta retenido por manifestantes que exigen la presentación con vida de 42 normalistas desaparecidos por policías en Iguala. Después de ese tiempo se bajó del vehículo para dialogar con los padres de los normalistas, resguardado por sus escoltas.
Lo acompañaron el subsecretario de Asuntos Políticos y Religiosos del gobierno del estado, Delfino Hernández y el director de Comunicación Social del municipio, Ricardo Castillo Díaz.
Los normalistas que le cerraron el paso, durante el acercamiento, empujaron a reporteros mientras desde el sonido uno de los padres dijo que esperaban que no fuera nada más un golpe mediático que estuviera en el lugar.
Walton Aburto subrayó: “Siempre he dicho en donde quiera que he estado que vivos se los llevaron, vivos regresen, siempre lo he manifestado y le quiero decir a usted que nosotros hemos pedido que haya justicia para los responsables”.
Un padre de familia le respondió “nada más por el periódico para levantarse el cuello” y el alcalde refutó:  “no nada más en el periódico, públicamente lo he dicho, en donde quiera que he estado y ustedes deben saber”.
Una madre le reprochó: “No se ha solidarizado con el movimiento de los padres de familia, no ha hecho nada para la búsqueda de nuestros hijos”.  Un padre le dijo “las fuerzas que nos reprimen, a esas se deberían de mandar para allá para buscar a nuestra familia, no reprimiendo a nosotros, qué ha hecho usted físicamente por nosotros, nada más hablar, nada más”.
El alcalde respondió “ni policía tenemos, la policía está en paro desde hace cuatro meses”. Entonces le preguntaron quién manda a los agentes, porque “cuando hacemos un evento, como en Chilpancingo, en el aeropuerto, ¿De dónde salen esos policías?, ‘¿Por qué cuándo se perdió el diputado, lo secuestraron, y el jueves lo rescataron de los Guerreros Unidos, por qué, porque es diputado, ¿Y nosotros?”.
Walton Aburto respondió “nosotros no damos esas órdenes”, “de ninguna manera, no hay justificación”.
“Entonces usted esta igual que (el ex alcalde de Iguala, José Luis) Abarca que nada más es presidente de nombre, usted no es presidente porque no sabe nada, no tiene facultad de mandar a nadie y no sirve para nada” le dijo un padre de familia. El alcalde respondió “le quiero decir compañero, yo tengo mis facultades en Acapulco, policía no tengo porque esta desarmada, desde hace cuatro meses que se desarmó no tengo policías”.
Le responde el padre, “son las mismas palabras que dijo Abarca, es lo mismo, entonces para qué son presidentes” y después dijo “venimos a hacer una manifestación por la inconformidad que el gobierno federal no ha respondido nuestro planteamiento que es la presentación con vida, y además no ha creado una línea de investigación para excarcelar al ex gobernador Ángel Aguirre Rivero”.
“Queremos que se haga una investigación al Ejército mexicano de Iguala porque hasta la fecha ha ignorado ese planteamiento”, exigió.
Agregó “si el presidente tiene interés de intervenir en su momento para exigir al gobierno federal, y no hemos escuchado, ni hemos visto ningún desplegado o un pronunciamiento como Ayuntamiento en exigencia que se solucione nuestro planteamiento, eso quiere decir que todos los gobiernos de todos los colores no están para ayudar a los ciudadanos, y no han demostrado ese apoyo, por eso hacemos responsable al presidente y a su cabildo si algo le sucede a los padres que estaremos aquí, lo hacemos responsable”.
“Quiero decirle que en ningún momento lo violentamos, que quede claro, o dígame ¿Lo golpeamos?” dijo una madre y en respuesta Walton Aburto dijo “no, de ninguna manera”  y después le pidieron al alcalde que retirara a los policías de la Gendarmería Nacional que coordinaban la vialidad en la avenida Costera, y que hablara con la Policía Federal para que no los reprimieran por sus manifestaciones.
Luego del diálogo de unos diez minutos el alcalde se retiró y sus escoltas los llevaron junto a la secretaria general del Ayuntamiento, Magdalena Camacho,  a un Jetta para sacarlo del lugar. Los manifestantes siguieron bloqueando el carril de la Base-Centro durante cuatro horas, aunque no se provocó tráfico, pues los automovilistas rodeaban el Centro de Convenciones para salir a la Costera.
Faltando 30 minutos para las 4:00, los normalistas desvalijaron la camioneta en la que iba el alcalde, le quitaron los espejos retrovisores y destruyeron el interior. Le dieron de palos pero sólo estrellaron los gruesos cristales de la camioneta blindada y le aventaron tres bombas molotov, entonces se retiraron.
Entomnces llegaron policías federales y con un extinguidor rociaron la camioneta para que no se prendiera totalmente.

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