Lleva la remodelación en Caleta un 60% de avance, mientras que en el Zócalo el 10%

Mariana Labastida

La obra de remodelación de la plazoleta en la playa de Caleta y Caletilla lleva un avance de 60 por ciento, mientras que la del Zócalo apenas un 10, según el proyecto, y los comerciantes no saben si se pararán los trabajos durante las vacaciones.
Las autoridades anunciaron que los trabajos de las diferentes obras se suspenderían por el periodo vacacional, y será hoy cuando los comerciantes sepan con certeza si sucedió así.
En Caleta y Caletilla, la plazoleta que es el acceso principal a esas playas casi se encuentra terminada: el piso, las jardineras están listas, sin embargo le hacen falta acabados.
Como parte del proyecto está la colocación de unos arcos, de los cuales los comerciantes se han quejado porque no los consideran de utilidad en el área, que se encuentra actualmente rodeada por madera para tapar la excavación.
Falta también el muelle y por eso los involucrados con el proyecto consideraron que la obra lleva un avance de 60 por ciento, pero los trabajos se suspendieron ayer.
En el Zócalo la remodelación que realiza el Fonatur va más lenta. Aunque en un principio se informó que los proyectos que realiza la dependencia federal en Acapulco se terminarían en diciembre, después se cambiaron las fechas poniendo como límite de entrega la inauguración del Tianguis Turístico que se tiene programada en mayo.
El avance de la obra del Zócalo se estima en un 10 por ciento pues faltan detalles en las escaleras que conducen a la Dirección de Reglamentos y Espectáculos. También el acceso que al lado de Catedral, las escaleras y la rampa de la calle La Quebrada al Zócalo no están terminadas, como tampoco el andador junto a la tienda Melody, por lo que la gente tiene que pasar caminando entre la tierra.
La mayor parte de la plancha del Zócalo está cubierta por una valla de metal y madera que cercan el área donde se trabaja. Allí está levantado parte del adoquín y destruidas las jardineras, sin embargo no se ven indicios del cambio de tubería que se dijo que se haría, tanto de la red de agua potable y drenaje. Y es precisamente el cambio e la tubería con lo que han justificado la demora los encargados de la obra, dijo Don José, del restaurante Mi Piaci.
Dentro del área delimitada hay tubos de concreto, mangueras y el material que se coloca en el piso.
Los comerciantes del Zócalo esperan que los trabajos se suspendan, como dijeron las autoridades, y que durante las dos semanas del periodo vacacional no tengan que escuchar el taladro con el que se rompe el actual piso. Además del polvo que los trabajos generan.
Aunque no les han informado mucho de la obra, dijeron que en un principio se terminaría el 15 de diciembre, pero por como van los trabajos incluso dudan que sea en febrero como les informaron funcionarios de Fonatur hace 10 días.