Hay quienes buscan dar la orden para reprimir la protesta, acepta Rogelio Ortega

*Afirma también el gobernador que dentro del movimiento por la presentación de los normalistas de Ayotzinapa existen grupos radicales que “quieren que haya más muertos para lograr la salida del presidente Enrique Peña Nieto”

Daniel Velázquez

El gobernador Rogelio Ortega Martínez reveló que todas las noches antes de dormir ora y le pide a Dios que haya paz y armonía en el estado y deseó que el 2015 “sea el año de la armonía y de la paz de las y los guerrerenses”.
Les dijo a las organizaciones que exigen la presentación con vida de los 42 normalistas desaparecidos que no sean ingenuos porque hay quienes están dispuestos a dar la orden de que haya una represión en su contra.
Criticó que hay organizaciones dentro del “movimiento” que se generó después de la desaparición de los normalistas que le apuestan a la movilizaciones radicales porque quieren que haya más muertos para lograr la salida del presidente de la República Enrique Peña Nieto.
“Seguramente que aquí en este tramo no va a ganar el que grite más, sino el que escuche más”, dijo.
El gobernador encabezó en el teatro La Fortaleza una reunión de trabajo para la Comisión para la Armonía y el Desarrollo Sustentable de Guerrero. En su discurso dijo que cada día está con la inquietud de “qué repertorio de acciones van a realizar los líderes que están conduciendo este movimiento”.
Agregó que desde que era estudiante universitarios no hacía “oficios religiosos”, pero desde que es gobernador hace una oración: “Tu que creaste todo y que tienes el poder de decidir sobre el presente y futuro de los seres humanos, ayúdame para que mañana no vuelva a suceder otra tragedia”. Pide que haya paz y armonía.

“Radicales” apuestan a que no se dé la orden de disparar

Indicó que el 17 de diciembre cuando los integrantes del Movimiento Popular Guerrerense marcharon de Ayutla para pedir a los militares que abandonen la zona también le pidió a Dios que evitara una tragedia.
Ortega Martínez dijo que hay “quienes” –sin identificarlos–, tienen la tentación porque “creen que a peor, mejor y se radicalizan desde el lado del movimiento generando acciones para ir al choque, a la confrontación, a donde tope, porque tienen la idea de que si hay mas muertos se va a intensificar el conflicto y que va a caer el nuevo gobierno de Guerrero, que en todo caso sería lo de menos, y que puede caer el presidente de la República y que no va a haber orden para decirles que los van a parar y que les van a disparar, creen que no”.
“Son ingenuos, porque por supuesto que hay quienes sí están decididos a dar esa orden”, advirtió y por eso los ciudadanos y él como gobernador debe evitar que haya una salida autoritaria al conflicto de los normalistas que genere “más muertos, heridos, más desaparecidos y encarcelados”.
Pidió “tolerancia al máximo” para cerrar el paso a una salida autoritaria y buscar el diálogo y los acuerdos con las organizaciones que integran la Asamblea Nacional Popular. Ponderó que de parte de ellos ya hubo muestra de sensatez porque no bloquearon la Autopista durante la temporada vacacional.
Dijo que reconocía esa disposición porque eso muestra que se pueden construir acuerdos y cumplirlos “y tomemos la ruta de la armonía, la reconciliación, la paz, la paz que Guerrero necesita, no la paz de los sepulcros ni la que se consigue a punta de bayoneta y fusil, la que se construye día a día, dialogando, tomando acuerdos para bien de Guerrero, si todos ponemos todos ganamos”.

Pondera nuevamente las candidaturas ciudadanas

En su discurso, el gobernador nuevamente ponderó a los candidatos ciudadanos como opción a los partidos políticos, dijo que “seguramente que muchas ciudadanas y ciudadanos se estarán preguntando, ¿a qué clase de calaña nos van a presentar ahora los partidos políticos?”
Dijo que hay mucha preocupación porque este año es electoral en Guerrero.
“El tema de la elección debe ser un gran foro también, para que ahí en la discusión veamos las propuestas de los partidos políticos, las propuestas de los ciudadanos que quieran participar y contender para representarnos”, dijo.
Reiteró en su llamado a los ciudadanos para que “con una gran lupa vigilemos a los partidos políticos y vigilemos muy bien a quiénes postulan, para que nunca más vuelva a suceder un hecho como el de Iguala”.
Insistió en que el voto es una conquista de los ciudadanos que en México “costó mucho” y reiteró que una democracia cara como la mexicana “pero es más cara” una guerra que causa además de pérdidas materiales la muerte de seres humanos por eso las elecciones son una oportunidad para elegir a las autoridades.
Rogelio Ortega reiteró que lo ocurrido con los estudiantes en Iguala fue el detonante de una crisis que evidencia las fragilidades del estado mexicano producto de un problema que se gestó hace muchos años, se dejó crecer y penetró todos los ámbitos de la sociedad y las instituciones, el narcotráfico.
Indicó que la delincuencia organizada empezó por financiar campañas políticas porque las condiciones del sistema político mexicano hacían que una campaña política de un aspirante a un cargo de elección popular se ganara con dinero y entonces los políticos encontraron esos recursos en la delincuencia organizada y los recibieron.
Abundó: la situación se agravó cuando los delincuentes decidieron meterse a los partidos políticos y no financiar candidatos sino ser “delincuentes gobernantes” y puso como ejemplo “el caso más extremo es el de Iguala” con José Luis Abarca Velázquez del PRD quien se sabe es parte del grupo Guerreros Unidos por la relación de parentesco de su esposa María de los Ángeles Pineda Villa con los líderes de ese cártel.
“El 2014 quedará en la memoria como el año trágico en el que perdieron la vida, esa noche la madrugada del 26 y 27 de septiembre seis personas en Iguala mas de 20 heridos y 43 jóvenes de Ayotzinapa desaparecidos y lo que resulta de este una gran crisis política y social”.