Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Se enfrentan padres y normalistas con militares en el Batallón de Iguala

* Los desalojan a golpes y pedradas y reportan 15 heridos

*En el cuartel de Chilpancingo queman una camioneta oficial

*También protestan en instalaciones de Acapulco, Tlapa, Cruz Grande y de otros estados

Desalojan militares a golpes, pedradas y gases a padres de Ayotzinapa del 27 Batallón de Iguala

*Irrumpen en el cuartel para exigir que los dejen revisar las instalaciones y buscar a sus hijos, pero los contienen en la entrada unos 200 soldados con equipo antimotines. Los manifestantes reportan 15 heridos, entre ellos dos familiares de desaparecidos y el dirigente estudiantil Omar García. Incendian dos camiones de empresas en la carretera de esa ciudad a Chilpancingo

Alejandro Guerrero

Iguala

Soldados con equipo antimotines replegaron a golpes, a pedradas y con gases lacrimógenos de las instalaciones del 27 Batallón de Infantería a padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, quienes encabezaron a un contingente que intentó entrar a buscar a los jóvenes a ese edificio.
Hubo intercambio de pedradas y botellazos entre ambos bandos, lo que dejó un saldo preliminar de 15 manifestantes heridos, principalmente padres de familia y estudiantes, informó el vocero de los padres Felipe de la Cruz.
Más tarde, estudiantes de diferentes escuelas que apoyan al movimiento por la presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos prendieron fuego a dos camiones que retuvieron en una tienda por la que pasó la caravana, uno era de la empresa Oxxo y otro de Sabritas. Lo incendiaron en la carretera federal Iguala-Chilpancingo en el kilómetro 126, en la salida de esta ciudad. En el camino a Chilpancingo otro camión fue incendiado a dos kilómetros de Venta Vieja, era de la empresa Jugos del Valle.
La protesta en el cuartel fue después de la 1:30 de la tarde de ayer en exigencia de que se abran las instalaciones del Ejército para que los familiares de los estudiantes desaparecidos puedan buscarlos, ante la sospecha de que soldados participaron en la detención y desaparición de los jóvenes y que éstos pudieran estar dentro de instalaciones militares.
Cerca de la 1:45 de la tarde los padres, estudiantes normalistas y de otras escuelas llegaron a las instalaciones del 27 Batallón de Infantería en siete autobuses, los cuales estacionaron junto al Periférico Oriente, entre la zona militar y la plaza Galerías Tamarindos propiedad del ex alcalde José Luis Abarca Velázquez, señalado como autor intelectual del ataque y la desaparición de los jóvenes.
En la entrada principal al Batallón se colocó una reja de malla ciclónica y de alambre de púas de unos tres metros de altura, mientras en el interior esperaban unos 200 soldados con equipo antimotines, en sus escudos se leía Policía Militar.
Unos 500 manifestantes encabezados por el vocero Felipe de la Cruz y el presidente del comité de padres de familia, Melitón Ortega llegaron a la reja de acceso, ahí a través de un megáfono pidieron la atención de los mandos militares para que les permitieran el acceso para buscar a los 43 desaparecidos.
El lugar parecía vacío pero en el módulo a un lado de la reja estaban escondidos al menos cinco soldados que grababan a los manifestantes.
Ante la desatención de las fuerzas castrenses padres y jóvenes retiraron unas vallas de metal que había junto a las rejas, mientras otros jóvenes se apoderaron de un tráiler de la empresa Coca-Cola y derribaron lentamente la puerta de acceso, el frente del tráiler entró unos cinco metros a la zona militar.
De los 500 manifestantes sólo unos 50 entraron a las instalaciones militares y a unos 20 metros, al llegar a la primera calzada fueron bloqueados por los antimotines, al encararse unos jóvenes lanzaron conos de tránsito, gas de un extintor de fuego y palazos a los uniformados.
El señor Melitón Ortega encaró a los militares y mediante un megáfono les exigió la liberación y presentación con vida de los normalistas desaparecidos, “yo soy padre de familia, ustedes son los responsables de la desaparición de nuestros hijos, aquí estamos para exigir a estos militares que nos los regresen, hasta que no entreguen a los chavos con vida no vamos a parar”.
En ese momento se escucharon detonaciones de petardos y los manifestantes retrocedieron algunos metros, pero se tensó más la situación. Hubo un intenso intercambio de pedradas, palazos de los manifestantes y empujones de los soldados que rociaban gas lacrimógeno con una manguera.
La tía del normalista desaparecido Adán Abrajám de la Cruz, María Inés Abrajám Gaspar observó a un soldado sin equipo antimotines arrojar una roca al rostro de un joven manifestante que salió sangrando del lugar y lo siguió para reclamarle, separándose del grueso de su bando.
Mientras esto sucedía, unos 15 minutos después del primer jaloneo, los soldados se reagruparon y a pedradas y empujones sacaron a los manifestantes, pero quedaron dentro María Inés y un reportero de TeleSur, al segundo se le permitió la salida luego de identificarse y por la presión, después de la gresca, de reporteros que se plantaron en el lugar y exigieron su liberación, pero a la mujer la retuvieron más tiempo.
La familiar del joven desaparecidos relató que al principio los soldados la protegieron de los proyectiles que entraban a las instalaciones y luego la amenazaron con detenerla e iniciarle una investigación porque entrar a esas instalaciones sin permiso era un delito.

Lluvia de piedras y botellas

Cuando fueron replegados, los manifestantes retuvieron un segundo tráiler de doble remolque de la empresa cervecera Corona, lo pararon en la entrada del Batallón junto al primer tráiler y bloquearon el carril interno del Periférico Oriente.
Estudiantes sustrajeron cientos de envases de cerveza vacíos y los arrojaron a los militares junto a cohetones y piedras. Los soldados también arrojaron botellas y piedras hacia afuera durante unos 30 minutos aproximadamente, lo que generó una lluvia de piedras y botellas.
En todo momento un helicóptero de la Marina sobrevoló la zona y desde el interior de las instalaciones militares algunos soldados fotos y video.
Cerca de las 2:15 el intercambio de proyectiles concluyó con la retirada de los manifestantes, y poco después Inés Abrajam fue liberada.
Afuera de las instalaciones del Batallón quedaron decenas de cartones de cerveza vacíos en el piso y una gran cantidad de vidrios.
Más tarde llegaron peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE) y de la Procuraduría General de la República (PGR) para hacer las diligencias y tomar evidencias y huellas de los dos tráileres que fueron abandonados en el lugar.
En declaraciones a reporteros luego de ser liberada, María Inés Abrajam dijo que la amenazaron con dejarla encerrada, “y me dijeron que me iban a investigar y que me iban a detener, que persona que entra ahí ya no sale”.
Mencionó que adentro la tuvieron retenida junto a un reportero, “pero a él lo dejaron salir y a mí no”.

No se esperaban una agresión, dice Felipe de la Cruz

Por separado, el vocero de los padres de los normalistas desaparecidos, Felipe de la Cruz dijo que el mitin en el cuartel fue “porque volvemos a asegurar que fueron los militares los que intervinieron en la desaparición de los muchachos”.
Dijo que no esperaban la respuesta de represión y agresión de los militares, “y hoy podemos decir con claridad al mundo que los militares participaron en el ataque y desaparición de los normalistas y hoy agreden a los padres de familia únicamente por exigir la presentación con vida de sus hijos”.
Ante la pregunta dijo que tenían lesionados a dos padres y a tres alumnos descalabrados entre ellos el dirigente estudiantil de Ayotzinapa Omar García, que en total había unos 15 lesionados “con botellas y piedras que tiraban los militares, y que bueno que no fueron balas porque entonces estaríamos hablando de muertos”.
Dijo que debido a la agresión “no tuvimos más que replegarnos porque nosotros no venimos a generar violencia, porque no queremos más llanto en otras familias, por lo que decidimos regresar para resguardarnos de la agresión”.
Recordó que la demanda principal del movimiento es la presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos y que pedían que algún mando militar dejara pasar pacíficamente a una comisión de padres a revisar sus instalaciones, “porque son más de tres meses de búsqueda y no tenemos nada aún”.
Afirmó que la agresión la iniciaron los militares desde el momento en que lanzaron gases lacrimógenos y replegaron a los padres y alumnos con antimotines, “lo único que hicimos nosotros fue defendernos sin armas y ahí está el resultado de varios heridos y varios golpeados”.
En la noche la normal de Ayotzinapa emitió un boletín en donde informó que los heridos eran los padres de familia Mario César Gonza?lez Contreras, Bernabe? Abrajam Gaspar, Mari?a Concepcio?n Tlatempa y los estudiantes Omar Garci?a, Sergio Ochoa Campos y Jose? Herna?ndez Pen?a.
De búsqueda ciudadana de los normalistas desaparecidos dijo que se aplazó tentativamente para el 14 de enero, ya que en las comunidades en las que tiene presencia la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria hubo elecciones.
Dijo que hoy se reunirían con los policías comunitarios para dar a conocer la fecha y las rutas de búsqueda.

Retienen dos camiones y los queman en la carretera

Los manifestantes se retiraron de las instalaciones militares y caminaron por el Periférico a la calle lateral de la carretera Iguala-Chilpancingo y a unos 50 metros de ésta, unos estudiantes retuvieron dos camiones que entregaban mercancía a una tienda de la cadena Oxxo en la colonia CNOP.
Cerca de las 2:47 de la tarde fueron retenidos dos camiones, uno de la empresa Sabritas y otro de la tienda Oxxo, sus choferes los condujeron unos 200 metros pero luego se fueron y dos normalistas se llevaron las unidades.
Todos los manifestantes subieron a los autobuses en que llegaron y se fueron rumbo a la capital del estado.
A 500 metros del retén militar de la entrada a la comunidad El Tomatal, en el kilómetro 126 de la carretera federal Iguala-Chilpancingo en el punto conocido como Los Chones, entre las comunidades de Tomatal y Rancho del Cura, los estudiantes atravesaron en la carretera los dos camiones y les prendieron fuego, lo que suspendió la circulación vial más de una hora, hasta que llegaron bomberos y personal de Protección Civil a sofocar el fuego cuando las unidades prácticamente habían sido calcinadas.
Más tarde llegaron grúas y las unidades fueron movidas a un costado de la cinta asfáltica y la circulación vial se regularizó luego de retirar las cenizas y los restos que quedaron en la carretera.

Incendian manifestantes por Ayotzinapa una camioneta en la entrada de la 35 Zona Militar en Chilpancingo

*Encabezados por padres de los estudiantes desaparecidos intentan entrar en busca de los jóvenes, pero los reciben unos 300 policías militares con equipo antimotines

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Unos 300 policías federales y estatales con equipo antimotines se atrincheraron en la 35 Zona militar en espera de los padres de los 43 estudiantes detenidos-desaparecidos de la Normal Rural de Ayotzinapa, que después de una protesta en Iguala se manifestaron en Chilpancingo.
En la capital los manifestantes incendiaron una camioneta blanca a unos metros de la puerta de una de las instalaciones militares, y advirtieron que continuarán estas acciones hasta que se les permita el acceso a los cuarteles para buscar a los estudiantes.
Los padres y estudiantes de la Normal Rural reiteraron que los soldados fueron participes de la masacre y desaparición forzada de los normalistas en el ataque de policías municipales y sicarios en Iguala la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre.
Desde las 11 de la mañana los policías llegaron al cuartel ante la versión de la protesta en instalaciones militares, donde se colocaron alambres de púas sobre los accesos principales y un anuncio como advertencia: “estas instalaciones militares son propiedad de la federación  y su ingreso a las mismas sin autorización se considera un delito que será sancionado conforme a la ley de la materia”.
Al medio día padres y estudiantes se fueron de Ayotzinapa a Iguala, y a las 4:30 regresaron a Chilpancingo a protestar en la 35 Zona militar, donde se confrontaron con el Ejército, principalmente de manera verbal.
Al frente avanzaron algunos padres de los 43 detenidos-desaparecidos en Iguala hasta el acceso principal cerrado, cubierto con alambres de púas y unas estacas de metal fueron levantadas del suelo para impedir el acceso de vehículos por la fuerza.
A través de una bocina desde el cuartel se buscó establecer comunicación con los manifestantes que ya habían cerrado el carril de sur a norte del bulevar Vicente Guerrero y la calle lateral.
La voz en el altavoz, que se no identificó por nombre o cargo, dijo que respetaban la protesta pero pidió respeto para la institución militar. La respuesta fue inmediata, “ustedes no lo hicieron”, “asesinos, Ayotzi vive, la lucha sigue sigue”, “vivos se los llevaron, vivos los queremos”, “bola de traidores”.
“Les pedimos sean amables, que se conduzcan con respeto a las instituciones”, insistieron desde adentro.
“Las instituciones rompieron el pacto social”, “ustedes no están con el pueblo y lo saben”, “no hacen nada por la población”, “entreguen las armas, entreguen a los muchachos, entreguen a los 43”, respondieron distintas voces.
El presidente del comité de padres de los desaparecidos, Melitón Ortega denunció que los policías y los militares están en todos lados “y no sirven para nada”, en alusión a la violencia generalizada que hay en todas las regiones del estado.
El abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña, Tlachinollan, Vidulfo Rosales Sierra explicó que las manifestaciones en los cuarteles militares de ayer son un acuerdo de la Asamblea Nacional Popular, y que van a continuar hasta que les permitan revisar las instalaciones.
La voz en el altavoz desde el cuartel ofreció que una comisión de manifestantes podría ser atendida por autoridades federales y estatales, y personal de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum), y la respuesta fueron más reclamos encendidos, “fuera el Ejército de Guerrero”, y de manera dispersa los manifestantes más jóvenes lanzaron piedras a los policías que al otro lado de la reja que se protegieron con sus escudos.
Luego los padres se movieron hacia  la carretera y pidieron a los manifestantes que evitaran los ataques, porque ellos no tenían equipo de protección y saldrían lastimados cuando les devolvieran las pedradas.
Antes de irse, un grupo con el rostro cubierto llevó a unos metros de la entrada del cuartel una camioneta blanca, al parecer particular, que incendiaron frente a las instalaciones como protesta, y se retiraron poco después de las 5 de la tarde.
La inquietud no terminó con la salida de los camiones del servicio público de la carretera donde viajaban los manifestantes, los policías se movieron de prisa a la puerta dos para proteger  el acceso cerrado, pues trascendió que quisieron entrar al edificio por este paso pero resultó falso.

Marcha el MPG al Batallón de Tlapa; reclama que no defendieron a los normalistas en Iguala

Carmen González Benicio

Tlapa

Integrantes del Movimiento Popular Guerrerense (MPG) se manifestaron frente al 93 Batallón de Infantería y entregaron un oficio en que solicitaron la entrada al lugar para buscar a los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala.
La actividad inició cerca de las 11 de la mañana, los manifestantes se concentraron en la gasolinería de la comunidad de Atlamajac de donde marcharon a las instalaciones del 93 Batallón al norte de la ciudad.
Al frente iba el carro de sonido, profesores y alumnos de la Universidad Intercultural del Estado de Guerrero y de la licenciatura  en Desarrollo Comunitario Integral (LDCI) de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), representantes de colectivos y miembros diferentes organizaciones.
Al llegar al Batallón el contingente fue frenado en la entrada por una barricada de madera y alambre de púas con la que cerraron el paso, además de tablas de picos en el piso, mientras al fondo esperaban un grupo de militares, otro a los extremos y en varios lugares estratégicos.
Los militares fotografiaron y grabaron a los manifestantes desde diferentes ángulos  con celulares y cámaras, se llegaron a observar a más de 10 personas enfocando y desde afuera otros que vestidos de civil.
Del MPG hubo oradores que pidieron y reclamaron la nula intervención de los militares el 26 y 27 de septiembre en Iguala que derivó en el asesinato y desaparición de estudiantes normalistas y otros ciudadanos.
Participó una comerciante que se quejó de que el gobierno federal no los apoya y los golpea con el aumento de impuestos, les niega apoyos para sembrar y producir  para mantener a sus hijos, entonces la pobreza los obliga a migrar y buscar internados, como sucedió a los normalistas.
Dijeron que se plantaban ahí para remover la conciencia de los militares que antes que nada eran personas que trabajaban para un gobierno, pero el pueblo paga sus salarios por lo que deben defenderlo y no golpearlo, “es un Ejército que ahora da pena y avergüenza, y sólo se le recuerda por sus gestas heroicas pero está desprestigiado por sus mandos”.
Cuestionaron que no defiendan al país ante la venta de los recursos y las reformas del gobierno federal porque ya no se le ve como “defensor sino como represor”.
Después de las intervenciones que duraron alrededor de una hora, los soldados del Ejército pidieron hablar y les fue concedida la palabra porque “nosotros queremos dialogar y respuestas para encontrar a los normalistas”, dijeron los manifestantes, pero pidieron que no se salieran del tema o los dejarían hablando solos.
Preguntaron otra vez por qué no defendieron a los estudiantes normalistas si los tuvieron enfrente y al igual que ellos son hijos de campesinos, y que era lamentable que sus “armas las usaran para matar al pueblo”. Exigieron a los soldados que dijeran en dónde están los normalistas porque lo saben.
El comandante de Infantería y encargado del Batallón, Luis Ernesto García Serrano les dijo que antes que nada respeta los derechos humanos de las personas y que esa era parte de la visión del Ejército, y que por ellos no había ningún inconveniente en dejarlos pasar a revisar el cuartel, pero que debían entregar un oficio solicitándolo para que les resolvieran en dos o tres días.
Dijo que sus puertas siempre han estado abiertas a la ciudadanía a la que invitan a recorridos y actividades que realizan.
Al concluir su intervención con un megáfono y desde atrás de la barricada de alambres de púas se acercó un integrante del movimiento a dejarle el oficio de solicitud que fue recibido por otro militar sin salirse de la barricada.
García Serrano les dijo que les informaría el día y la hora para entrar y la definición de la comisión que lo haría.
Tras esta acción los manifestantes se retiraron del lugar en marcha y pararon en el punto de reunión donde se juntaron.
Los militares quitaron la barricada de la entrada del inmueble.
Más tarde el MPG convocó a bloquear las carretera por los ataques contra estudiantes en Iguala.

Protestan y pintan CETEG, Cecop y MPG en la Base Naval en Acapulco; exigen buscar a normalistas en los cuarteles

*Instalan barricadas y colocan una valla de policías antimotines para contener a los manifestantes. Un marino sale a tratar de impedirles que escribieran sus demandas en las instalaciones  y se hace de palabras con cetegistas. Dos maestros fueron asesinados el viernes y sábado en la ciudad y las autoridades no hicieron nada, reprocha un profesor

Karina Contreras

Unos 150 integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), del Movimiento Popular Guerrerense (MPG) y del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Presa La Parota (Cecop) protestaron afuera de las instalaciones de la Octava Región Naval Militar, ubicada en Icacos, para exigir que se abran los cuarteles para buscar a los 43 normalistas desaparecidos por policías en Iguala desde el 26 y 27 de septiembre.
Durante una hora los manifestantes estuvieron afuera del cuartel y se hicieron de palabras con algunos soldados cuando éstos les impidieron que escribieran consignas en los muros de la entrada, y les gritaron: “Malditos asesinos”, “ Esos son esos son, los que chingan la nación”.
Antes de que llegaran los manifestantes, afuera de la Base Naval ya se encontraban unos 50 policías antimotines con escudos y unas barricadas para contenerlos.
A las 11:25 llegaron algunos manifestantes en siete camionetas, y otros en camiones urbanos con los integrantes de las diversas organizaciones que apoyan a los padres de familia en su lucha por la presentación con vida de los estudiantes desaparecidos. Cuando los vieron, los antimotines se colocaron en posición para contenerlos.
Los manifestantes se bajaron de las camionetas con el rostro cubierto, llevaban palos y los del Cecop sus emblemáticos machetes. Intentaron pasar a los antimotines para pintar los muros de las instalaciones de la Octava Región Naval Militar pero fueron contenidos por militares.
Los integrantes del MPG pintaron las barras de plástico y una carro de la marina que se encontraba en la explanada. Al carro militar le pintaron “Fue el Estado. Ayotzi 43. Narco gobierno”.
Nuevamente los manifestantes pretendieron pintar el muro y fueron interceptados otra vez por los militares encabezados por uno que en la solapa se leía Franyutti y les indicó: “Aquí ya no, respeten” y uno de los manifestantes que estaba encapuchado respondió: “¿Por qué no, podemos pintar donde queramos”, y le respondió el militar: “aquí ya no por favor” y se mantuvieron bloqueando el paso.
Los manifestantes gritaron “culeros, culeros”, “Malditos asesinos, corruptos” y “también tienen familia, preocúpense por el pueblo, porque son pueblo”.
Luego pintaron el suelo con frases como “Ayotzinapa vive, la lucha sigue”, “Investigar al Ejército”, “La autonomía es vida, la sumisión es la muerte”, “Militares asesinos” y “43, esto es del pueblo narcogobierno”.
También portaban pancartas donde se leía: “El ejército está involucrado. MPG”, “Abran los cuarteles. MPG”, “Investigar al Ejército, ya” y “Ayotzinapa, todo apunta a los militares”.
Durante su intervención el responsable de la comisión política de la CETEG en Acapulco, Walter Añorve Añorve Rodríguez reprochó la forma en que fueron recibidos, “hasta con gente armada”,  e indicó  que ya los quisieran ver en las colonias populares “donde se necesitan verdaderamente y ver si tienen valor como con nosotros”.
Añadió que es allá donde los quieren ver porque han sido asesinados otros dos maestros de “manera vil y cobarde”, uno el viernes en el centro y el otro el sábado en Renacimiento.
Indicó que estaban en la Base Naval para que las autoridades supieran que los ataques contra estudiantes de Ayotzinapa el 26 y 27 se septiembre en Iguala no se les olvida, “aquí venimos a exigirles que abran sus cuarteles porque no puede ser posible que a estas alturas no sepamos nada de los 42 (no cuenta al que fue identificado por su ADN) normalistas que se encuentran en calidad de desaparecidos”.
Reprochó que todavía esté impune el asesinato de siete personas, entre ellos cuatro normalistas oficialmente masacrados.
Subrayó que no van a permitir ni un muerto más y se quejó de que “a plena luz del día te matan o te desaparecen y lo peor es que las corporaciones se coluden con el crimen organizado”.
Añorve Rodríguez exigió la presentación con vida de los 42 normalistas y mencionó que protestaban en el cuartel porque hay indicios de que los muchachos están ahí porque “creemos y tenemos la esperanza de que estén vivos y en ese sentido vamos a seguir exigiendo y demandando su presentación con vida”.
Adelantó que el 26 de enero van estar en otra marcha en la ciudad de México para decirle una vez más a Enrique Peña Nieto que “no lo queremos gobernando el país”.
El dirigente de la CETEG condenó el asesinato de los dos maestros en días pasados y afirmó que eso es una muestra del fracaso en la seguridad pública y es una violencia que desde el 2011 no ha cesado.
Indicó que no pueden vivir bajo esas condiciones de zozobra, de inquietud y que es normal que los maestros no quieran regresar a dar clases si no hay las condiciones para su seguridad.
El representante del Sindicato Único de Trabajadores del Colegio de Bachilleres Sutcobach, Marco Antonio Adame Bello subrayó que la protesta era para exigir que se deje entrar a una comisión de padres, estudiantes, maestros y otros ciudadanos a revisar todos los cuarteles del estado y de otras entidades.
Indicó que hay evidencia de que los normalistas se encuentran vivos y “toda esa patraña que han construido las autoridades se encuentra por los suelos, tenemos que exigir y ese es el propósito de este acto político que realiza el Movimiento Popular Guerrerense en las instalaciones de la Octava Región Militar, porque hay evidencias que la Policía Federal, el Ejército, la Marina tenían conocimiento con mucha anterioridad de los actos ilícitos que se cometían en Iguala y solaparon y fueron omisos”.
Adame Bello indicó que van a seguir demandando la presentación con vida de los normalistas y que si el gobierno le apuesta al cansancio pues no se van a cansar y van a seguir firmes en su demanda.
Luego criticó que los políticos anden “apresurados preparando el terrenos electoral, no han entendido que la consigna clara de los padres de familia y de este gran movimiento es la no realización de elecciones porque es un teatro electoral, no representa los intereses de la sociedad”.
Subrayó: “Venimos a expresar claramente que el mandato de la asamblea popular es que en Guerrero mientras no aparezcan los jóvenes normalistas no hay condiciones para llevar a cabo una elección, y el pueblo no acepta, no permitirá volver entrar a este circo electoral, lo que demanda la sociedad es que se abran los cuarteles para continuar con la búsqueda de los jóvenes estudiantes y que se abra y se continúen la linea de investigación a los militares”.
El dirigente social que fue preso político, Bertoldo Martínez Cruz también se pronunció porque se abran los cuarteles porque consideró que los jóvenes que fueron desaparecidos en Iguala “es muy probable que estén en estos lugares y tenemos motivos suficientes para pensar eso, y por eso exigimos que se abran para poder buscarlos porque no es posible que en México desaparezcan personas y ni la policía ni el Ejército sepan, cuando ellos son los responsables de todo lo que sucede ”.
Luego de los discursos y de permanecer bajo los intensos rayos del sol, los integrantes de las diversas organizaciones se retiraron de la Base Naval de Icacos y se concentraron en las oficinas de los Servicios Educativos de la Región Acapulco-Coyuca de Benítez. Durante todo el tiempo que estuvieron los manifestantes, militares desde las torres grabaron cada una de las acciones.

Bloquea el MPG dos horas la carretera frente al 48 Batallón del Ejército en Cruz Grande

Integrantes del Movimiento Popular Guerrerense (MPG) de Cruz Grande bloquearon durante dos horas la carretera federal Acapulco-Pinotepa Nacional frente al 48 Batallón de Infantería, exigieron la apertura de las instalaciones militares para buscar a los 43 estudiantes de Ayotzinapa detenidos y desaparecidos por policías municipales en Iguala.
La protesta comenzó alrededor de las 12 de la mañana frente a la sede militar ubicada sobre la carretera federal que comunica a los municipios de la Costa Chica y el estado de Oaxaca. En la manifestación participaron familiares de los estudiantes detenidos y desaparecidos, informó vía telefónica el integrante del MPG, Bulmaro Zaragoza.
En el mitin participaron unos 150 manifestantes que reclamaron justicia para los asesinados la noche del 26 y 27 de septiembre y que continúe la búsqueda de los 43 normalistas desaparecidos por policías. Además que el gobierno permita la búsqueda dentro de las instalaciones militares.
Indicó que en la entrada de la sede militar una manta los esperaba donde se leía la prohibición del paso y en caso de ser violado, sería penado por las leyes.
Al acto acudieron representantes del MPG de los municipios de Ayutla, Florencio Villareal (Cruz Grande), Cuautepec y Copala.
Bulmaro Zaragoza manifestó que el gobierno se ha visto pasivo en la búsqueda de los estudiantes y acusó que trata de hacer olvidar el caso.
Abundó que la movilización frente al Batallón fue de forma pacífica y no se registraron incidentes, y recordó que la actividad fue acordada por la Asamblea Nacional Popular. (Jacob Morales Antonio).

Llegan al cuartel de guardias presidenciales en el DF para buscar a los 43 normalistas

Agencia Proceso /?Agencia Reforma

Ciudad de México / Oaxaca / Tapachula

La búsqueda de los 43 normalistas desaparecidos en cuarteles militares de todo el país llegó ayer al Distrito Federal.
Decenas de personas Integrantes del Congreso Popular, Social y Ciudadano del Distrito Federal, se apersonaron durante más de una hora frente al cuartel de Guardias Presidenciales, ubicado en la calzada de Tlalpan donde entregaron una carta dirigida al general de Brigada de Arma, Inocente Prado López.
En ella solicitaron que se permitiera a una comisión acceder a las instalaciones para continuar con la búsqueda de los normalistas “secuestrados por las autoridades estatales y municipales”.
La misiva explica que los padres de los normalistas desaparecidos desde el 26 septiembre del año pasado, solicitaron al Estado mexicano entrar a los cuarteles e instalaciones militares de todo país a fin de comprobar que sus hijos no se encuentran en esos lugares pertenecientes a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
El escrito lo recibió Ignacio Martínez, comandante en turno, sin embargo no hubo respuesta.
Los manifestantes exigieron la presentación con vida de los 42 estudiantes de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa que continúan desaparecidos, lanzaron consignas contra el presidente Enrique Peña Nieto y desplegaron mantas con distintos mensajes.
En algunas de ellas podía leerse: “¡Ya basta de encubrir a funcionarios Asesinos!”, “¡Peña, dónde está la justicia!”, “¡Queremos justicia!”, “¡Todos somos Ayotzinapa!”, “Ya todo el mundo sabe que fue el Estado. ¡Ya renuncien!” y “¡Fuera Peña!”.
Después de más de una hora y sin una respuesta los manifestantes se retiraron no sin antes anunciar que el próximo 26 de enero realizarán una jornada de movilizaciones pacíficas por Ayotzinapa, en esta ciudad.

La sección 22 lleva protesta por Ayotzinapa hasta las sedes militares en Oaxaca

Docentes de la Sección 22, normalistas y colectivos realizaron ayer mítines en instalaciones de la Sedena), Marina y PGR en esta capital, Mixteca e Istmo de Tehuantepec en protesta por los 42 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala, Guerrero.
Los inconformes realizaron mítines frente a las sedes militares ante el impedimento de inspeccionar las instalaciones castrenses en búsqueda de los 42 normalistas de Ayotzinapa, quienes fueron desaparecidos desde el 26 de septiembre anterior.
Alrededor de las 17:00 horas, maestros de la región de Valles Centrales se apostaron frente al cuartel de la 28 Zona Militar, donde realizaron pintas como: “26 de Sept 2014 Ayotzi, Ejército Mexicano cómplice”, “Faltan 43”, “¡Fuera Peña!”, “¡Asesinos!” y “Ayotzi vive”.
Los profesores también realizaron pintas en el piso con el mensaje: “¡Ejército, asesino!”, y colocaron lonas con mensajes de apoyo a los normalistas desaparecidos, en contra de las reformas estructurales, así como reclamos para poner un alto al “terrorismo de Estado” y la criminalización de la protesta social.
En el Istmo de Tehuantepec, el comité de solidaridad con Ayotzinapa acudió a las oficinas de la Procuraduría General de la República (PGR), localizadas en el puerto de Salina Cruz, en donde se les permitió inspeccionar sus instalaciones.
Posteriormente, con una lona donde aparecen los rostros de los normalistas de Ayotzinapa, el contingente se dirigió a las instalaciones de la Marina Armada de México, en donde entregaron un documento sin que se les permitiera ingresar al cuartel.
Oscar de Lima Santiago, quien encabeza esta jornada de búsqueda y también lidera el colectivo Vientos de Cambio, manifestó que “la situación de los normalistas es considerada tragedia social.
De igual forma, integrantes de la sección 22 del SNTE-CNTE y alumnos de la Escuela Normal Experimental de Huajuapan (ENEH) se plantaron a las afueras de la 23ª Compañía de Infantería No Encuadrada (CINE) en la agencia municipal de Acatlima, en reclamo de la presentación con vida de los normalistas.
El vocero magisterial Mohamed Otaqui Toledo adelantó que para el lunes 26 se realizará una “acción global” por Ayotzinapa, al cumplirse cuatro meses de la desaparición de 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa.

Protestan maestros por desaparecidos de Ayotzinapa ante cuartel militar de San Cristóbal

Maestros de la Sección 7 del Sin-dicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) protestaron frente al cuartel de la 31 zona militar, en San Cristóbal de las Casas, parar exigir la presentación con vida de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.
Los maestros marcharon de la Unidad Administrativa, sede de representaciones del Gobierno del Estado, hacia el campamento de la Secretaria de la Defensa Nacional ubicado al sur de la ciudad.
En la movilización participaron unos 800 docentes, de acuerdo a organizadores.
Manuel Mendoza Vázquez, secretario suplente de la dirigencia sindical, dijo que con esta acción los maestros de Chiapas se sumaron a la convocatoria nacional para exigir la aparición de los estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos.
“Todas las investigaciones apuntan a que fue el Ejército Mexicano el que cometió el cobarde crimen contra los estudiantes”, acusó el dirigente magisterial.
La exigencia, abundó, es que también haya castigo para los autores materiales e intelectuales del asesinato de seis personas el pasado 26 de septiembre en Iguala, Guerrero.
Durante la protesta, los maestros gritaron consignas contra el Ejército y el presidente Enrique Peña Nieto.
Además realizaron pintas en el inmueble.
“Los responsables son ellos como brazo ejecutor armado de la oligarquía financiera que explota y oprime a nuestro pueblo de México”, arengó.
Los maestros demandaron que no haya impunidad en este crimen que consideran de Estado.
Advirtieron que las protestas continuarán y seguirán sumándose a las convocatorias de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en torno al caso Ayotzinapa.

468 ad