En las políticas públicas no basta la buena fe, responde Calderón a López Obrador

Mayolo López y Gonzalo Soto / Agencia Reforma

Ciudad de México

Sin mencionar al candidato Andrés Manuel López Obrador, el presidente Felipe Calderón afirmó que no bastan ni la buena fe ni la rectitud de intenciones para hacer eficaz la aplicación de políticas públicas.
“No basta la buena fe. No basta la rectitud de intención de hacer cosas buenas que, a la hora de evaluarlas son, francamente, ineficaces o, incluso, que pueden exacerbar las distorsiones que tiene la desigualdad social y económica”, planteó en Los Pinos durante la ceremonia de presentación de un centro de evaluación de políticas públicas.
“Se requiere fundamento y precisión técnica, contable, en el diseño de políticas públicas, en su puesta en marcha y, por supuesto, en su evaluación”, sostuvo.
Horas después de que en su cuenta de Twitter intentara desmentir las proyecciones que formuló anoche en el debate Andrés Manuel López Obrador, Calderón enfocó una vez más sus baterías en contra del tabasqueño y se sumó a las voces que critican su voluntarismo y que supuestamente deposite toda su confianza en la voluntad del pueblo.

Replica Hacienda a las cifras

Luego que López Obrador planteara un ahorro de hasta 300 mil millones de pesos ajustando la nómina gubernamental, el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, dijo que prescindir de todo los funcionarios públicos federales del país generaría apenas un ahorro de 264 mil millones de pesos al erario.
Durante su intervención en la presentación del Centro de Aprendizaje en Evaluación y Resultados para América Latina (CLEAR), aseguró que con la eliminación de todos los sueldos y salarios de la administración pública federal, de acuerdo con el presupuesto, se llegaría al ahorro mencionado.
Subrayó que de los 264 mil millones de pesos, únicamente 0.7 por ciento está relacionado con los sueldos de los altos funcionarios del gobierno federal.
“Si el gobierno federal prescindiera de todos sus servidores públicos nos ahorraríamos esos 264 mil millones de pesos, de los cuales el 0.7 por ciento está vinculado a altos mandos”, dijo Meade.
Señaló que es fundamental manejar correctamente las grandes cifras económicas para no incurrir en engaños a la población.
“Es importante cuando uno defina en estos grandes números, porque un programa económico que descansa en ficción o en el engaño es el principal ingrediente de la tragedia griega que hoy estamos viviendo”, añadió.
Los comentarios del titular de la secretaría de Hacienda se dan un día después de que Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de los partidos de izquierda, prometiera un ahorro en el gasto de gobierno por medio del recorte a los sueldos de los altos funcionarios.
En una de sus intervenciones en el debate presidencial celebrado ayer, López Obrador afirmó que con el recorte señalado se generaría un ahorro de alrededor de 300 mil millones de pesos, mayor incluso a la cifra total de servicios personales dada a conocer por Meade.
Meade resaltó también los logros del Gobierno federal en materia de transparencia y rendición de cuentas, así como de la mayor cobertura y servicios de educación, salud y servicios sociales.

Defiende el PAN comentarios de Calderón

La dirigencia nacional del PAN justificó la intromisión del presidente Felipe Calderón en la contienda electoral, al sostener que el gobierno tiene derecho a defender sus cifras, y consideró normales las expresiones del mandatario.
Este lunes, durante el segundo debate presidencial, Calderón descalificó las cifras expuestas por el aspirante de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, consistente en reducir 300 mil millones de la nómina gubernamental bajando los sueldos de altos funcionarios. El mandatario escribió en su cuenta de Twitter, que sólo sería posible reducir 2 mil millones.
El presidente nacional del PAN, Gustavo Madero Muñoz, dio una conferencia de prensa este lunes acompañado de Juan Ignacio Zavala, el vocero de la candidata de su partido, Josefina Vázquez Mota, así como de su asesor en materia económica, Ernesto Cordero Arroyo.