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Es frío y calculador que la PGR quiera cerrar el caso Ayotzinapa, dice dirigente de la UCEZ en Iguala

*El ataque y la desaparición a los normalistas se suma a la primera desaparición masiva en esa ciudad, recuerda la hija de Arturo Hernández. También a su padre lo quisieron vincular con Los Rojos, se queja

La dirigente de la Unión Campesina Emiliano Zapata (UCEZ), Soledad Hernández Mena calificó como “frío y calculador” que la Procuraduría General de la República (PGR) pretenda cerrar el caso Ayotzinapa, y desestimó la versión de que los normalistas fueron asesinados y quemados en el basurero de Cocula.
Ayer en conferencia de prensa, la hija del asesinado líder de Unidad Popular, Arturo Hernández Cardona, manifestó su respaldo al movimiento en apoyo a Ayotzinapa en demanda de la presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos por policías la noche y la madrugada del 26 y 27 de septiembre en esta ciudad.
Expuso que el ataque y la desaparición a los normalistas se suma a la primera desaparición masiva en esta ciudad, el 31 de mayo de 2014, durante el gobierno de José Luis Abarca Velázquez, con la desaparición forzada de ocho activistas y la ejecución de tres de ellos, entre éstos su padre.
Recordó que esos ataques, las autoridades pretendieron vincularlo al grupo delictivo Los Rojos, como se pretende hacer con el ataque y desaparición de los normalistas.
“Puedo descalificar toda la investigación de Jesús Murillo Karam al tratar de vincular a los normalistas con Los Rojos, porque el día que mi padre apareció (asesinado) él tenía una cartulina que era firmada por Los Rojos, cuando mi padre no tenía nada qué ver con la delincuencia, y sólo quedó en medio de la rivalidad de intereses entre los grupos de la delincuencia”.
Declaró que es “frío y calculador” que la federación pretenda dar por cerrado el caso cuando aún hay muchos cuestionamientos e inconsistencias, como el motivo por el que se dejó crecer al cártel de Guerreros Unidos, ante la presencia en la zona Norte de Guerrero y el sur de Morelos y en el Estado de México, este último cuando aún era gobernado por Enrique Peña Nieto.
Planteó que debe de ser la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Coidh) la que enjuicie al titular de la PGR, Jesús Murillo Karam, y al ex gobernador Ángel Aguirre por su omisión en los ataques de septiembre y el encubrimiento al ex alcalde José Luis Abarca, a su esposa Ángeles Pineda y al ex secretario de Seguridad Pública de Iguala, Felipe Flores Velázquez, quien a cuatro meses de los hechos sigue prófugo y es calificado como el “enlace” entre la policía y el Ejército.
Demandó al gobernador Rogelio Ortega Martínez que en lugar de decir que los normalistas se han quedado entre 30 y 80 millones de pesos de la toma de casetas, “que diga cuál es su interés político al hacer estas declaraciones”.
Consideró que el gobierno federal no puede pasar a un proceso de indemnización cuando aún hay cosas claras, pues no hay evidencias físicas ni científicas de que los normalistas fueron asesinados y calcinados en el basurero de Cocula.
La activista repudió la represión del gobierno federal contra del movimiento en apoyo a Ayotzinapa, y la agresión de este miércoles en contra de 12 estudiantes, a los cuales agentes armados detuvieron, esposaron, golpearon, amenazaron y encañonaron.
Soledad Hernández, quien es precandidata del PRD a la diputación federal por el distrito 02 con cabecera en Iguala, afirmó que el homicidio de su padre fue político para “abrir espacios” dentro de las diputaciones y la alcaldía.
Ayer, la hija Arturo Hernández ofreció sola una conferencia, en las oficinas de la UCEZ, a su espalda había una manta con el número 43 y la leyenda “Nos faltan 43, justicia Ayotzinapa”. (Alejandro Guerrero / Iguala).

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