Empujones en la Casa de la Cultura por la entrega de apoyo de Sedesol federal a vendedores de playa

Karina Contreras

Unos mil 500 vendedores de playa y parianeros se aglutinaron en los alrededores de la Casa de la Cultura para cobrar mil 300 pesos de apoyo de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) federal, aunque ninguna autoridad quiso informar el porqué de dicho pago.
La gente se arremolinó en los accesos de la Casa de la Cultura. Unos llegaron desde las 6 de la mañana para ser los primeros y cuando abrían la puerta para acceder se empujaban, por tal situación varias personas se cayeron y resultaron con raspones y heridas en las manos.
En el lugar, algunos líderes trataban de meter a su gente y gritaban dónde estaban los de Pie de la Cuesta, de La Diana, La Quebrada, Puerto Marqués o Revolcadero.
Al preguntarles a varios de los vendedores de qué era el pago, unos dijeron que era por Empleo Temporal y otros un apoyo de la Sedesol para los comerciantes de playas y parianeros “contra el hambre”.
Los líderes buscaban la forma de meter a su gente y los movían de puertas ocasionando desorden y empujones.
Uno de los empleados de la Secretaría de Desarrollo Económico, de nombre Gustavo, trató de organizar a los presentes y pidió a todos irse atrás de la reja para poder abrirla y que entraran con calma.
Les solicitó que cooperaran para operar bien y atenderlos a todos; “podemos atender a 100 personas cada cinco minutos. pero necesitamos que nos ayuden con orden”. Y es que en el lugar había mujeres con niños de escasos meses y personas de la tercera edad que sufrían empujones.
Aunque se buscó una entrevista con el trabajador municipal para que explicará en qué consistía el apoyo y de qué programa era, se negó a darla argumentado que era del gobierno federal.
Ante la falta de orden para poder ingresar poco después de las 11 de la mañana, los empleados anunciaron que la entrega se cancelaba hasta nuevo aviso porque los empujones habían causado ya varios lesionados.
Luego los trabajadores pusieron los candados a las puertas, pero pesar de esa situación la gente continuó afuera de la Casa de la Cultura esperando a entregar los documentos para recibir el apoyo hasta después de las 2 de la tarde.