Decomisan armas y droga en Petaquillas, se enfrentan a delincuentes y arrestan a 18

*Uno de los detenidos con mariguana llevaba credencial de Policía del Estado, informa la nueva Policía Comunitaria; más tarde efectivos de la Fuerza Estatal acudieron a buscar a uno de los suyos

*Participan en una asamblea permanente 500 vecinos e integrantes del FUSDEG del Valle del Ocotito

*No llegan funcionaarios estatales a una reunión y se cancela

*Nadie en su gobierno sabía de la misma, dice Rogelio Ortega y ofrece asistir él mismo a la comunidad vecina de Chilpancingo

*Es una señal de represión que la Fiscalía mantenga la acción penal contra Nestora, advierte la CRAC

Comunitarios en Petaquillas decomisan armas y droga, se enfrentan a delincuentes y arrestan a 18

*En su primer día de actividades después de su fundación, la organización de autodefensa contra el crimen organizado más cercana a la capital del estado mantuvo una asamblea permanente con participación de 500 vecinos e integrantes del FUSDEG del Valle del Ocotito. Manifiestan su apoyo al movimiento de Ayotzinapa. Uno de los detenidos con mariguana llevaba credencial de Policía del Estado, informan; más tarde efectivos de la Fuerza Estatal acudieron a buscar a un elemento

Rosalba Ramírez García

Petaquillas, Chilpancingo

En menos de 36 horas de la actividad del Frente Unido por la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) y de la recién creada Policía Comunitaria de la comunidad de Petaquillas municipio de Chilpancingo, esta organización de autodefensa del pueblo arrestó a 18 personas, decomisó armas de fuego y droga y tuvo un enfrentamiento armado con un grupo de presuntos delincuentes.
Aproximadamente a las 12:35 de la tarde de ayer, después de que se anunció que la reunión con el gobierno del estado se suspendió, unos 30 policías comunitarios de Petaquillas dirigidos por integrantes del FUSDEG del Valle del Ocotito detuvieron un camión del transporte público.
Se trata de un camión de la ruta Chilpancingo-Colotlipa municipio de Quechultenango, del Circuito Río Azul, que fue detenido para su revisión a la llegada a Petaquillas, cuando se dirigía a la capital. Esta comunidad es la más cercana a la ciudad capital donde existe un movimiento de autodefensa del pueblo contra el crimen organizado.
En el camión, los policías comunitarios encontraron tres paquetes de mariguana preparada para su traslado, completamente comprimida y sellada con cinta canela.
Dos de los paquetes grandes cilíndricos pesaban cada uno 18 kilos y el pequeño pesaba 3.5 kilos, que hacían un total de 39.5.
El camión de placas 35-54-FMC era manejado por Oscar Espíritu Saldaña de Mochitlán, quien también fue detenido mientras se investiga para confirmar su presunta responsabilidad en el traslado de la mariguana.
En ese camión iban nueve pasajeros, y atrás una camioneta en la que supuestamente iban tres hombres más “custodiando el cargamento”, y al pedirles sus identificaciones uno de ellos portaba una credencial que lo identifica como policía estatal, informaron policías comunitarios que participaron en la detención y decomiso.
Todos los pasajeros, el chofer del camión, los hombres de la camioneta entre los que iba un civil con identificación de policía estatal, hacían un total de 11 personas y fueron trasladados a la comisaría donde eran resguardados mientras se recaba información para determinar su inocencia o responsabilidad por el traslado de la droga.
Una hora después, a la 1:25, el comisario junto con otros representantes de la comunidad y del FESDEG presentaron el decomiso.
Y sólo media hora después llegó a la comisaría otro grupo de policías comunitarios que habían detenido a tres personas, dos jóvenes hombres y una mujer a bordo de un vehículo blanco de placas HBE-61-63, porque durante la revisión encontraron dos armas largas, una corta, cargadores, municiones, chalecos antibalas, máscaras, bolsas de mujeres y una dosis pequeña de mariguana.
“Son dos, AR-15 y un cuerno de chivo, lo decomisado en armas largas”, informó el promotor del FESDEG Crescenciano Ramírez.
Entre lo decomisado estaba una nota escrita a mano presuntamente de la novia de uno de los detenidos a quien se dirige como “talibán”.
Ante la asamblea, el comisario Aquímides Vargas Encarnación preguntó a aproximadamente a unos 500 pobladores que estaban en ese momento, si la mariguana y armas decomisadas se deberían entregar al Ejército o destruir en la comunidad.
Todos los asistentes sin excepción, gritaron que tenía que ser destruida en la población; “la policía y el Ejército son cómplices”, “se los van a regresar a los narcos”, manifestaron vecinos.
A lo largo del día los pobladores iban al centro de la comunidad frente a la comisaría y regresaban a sus casas, pero volvían al pequeño Zócalo cuando había algún decomiso o detención anunciado por las campanadas de la iglesia.
La recién formada Policía Comunitaria de Petaquillas se solidarizó con la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa por el embate en su contra el 26 y 27 de septiembre pasado y exigieron a las autoridades federales la presentación con vida de los normalistas detenidos y desaparecidos en Iguala.
Por la tarde aproximadamente a las 4:30 llegaron tres elementos de la fuerza estatal en la patrulla 274 que dejaron en la entrada a la población y entraron caminando hasta la comisaría para preguntar por su compañero detenido, porque dijeron que se habían enterado por medios electrónicos que había un policía estatal en la comisaría.
Iban encabezados por el coordinador de la región Centro de la Fuerza Estatal, Antonio Rojas, que dijo que acudieron sólo porque les informaron que había uno de sus compañeros detenido, pero los policías comunitarios no los dejaron ver a los recluidos.
Mientras los policías estatales preguntaban por su compañero detenido, los ciudadanos les reclamaban a gritos que nunca les dieron seguridad y reprochaban que asistieran sólo porque estaba ahí uno de sus compañeros.
Los coordinadores del FUSDEG informaron a los uniformados que no tenían a ningún policía estatal y que posiblemente se había malinterpretado porque uno de sus integrantes porta vestimenta camuflageada, chaleco antibalas, casco y tiene el rostro cubierto, incluso salió para que lo vieran.
Finalmente no entregaron a ninguno de los detenidos, aunque los policías que detuvieron al grupo de 11 personas en el primer hecho afirmaron que uno de ellos portaba una credencial de policía estatal.

La persecución

Algunos de los asistentes a la asamblea permanente que hay en el centro de la población se percataron de que en el cerro que está justo atrás de la comisaría iba un grupo de unos siete u ocho personas que caminaban rápidamente hacia arriba.
Desde las azoteas, ventanas, la calle y balcones los pobladores señalaban la punta del cerro donde desaparecía el grupo de hombres que iban hacia el otro lado.
Los policías comunitarios no se organizaron rápido y dudaron varios minutos si se trataba de integrantes de algún grupo criminal, pero reaccionaron cuando dos de ellos regresaban sin el resto de los presuntos delincuentes.
Entonces tres camionetas con unos 12 policías comunitarios en cada una salieron rumbo al cerro, mientras el retén colocado rumbo a la salida hacia Mochitlán fue reforzado por unos 50 policías comunitarios,  tras detonaciones de arma de fuego que se escucharon en el lugar.
Ahí  hubo detonaciones de armas de fuego, pero los policías comunitarios se negaron a precisar si hubo disparos de los dos grupos o cuál de ellos lo hizo.
El grupo que subió al cerro a buscar a los presuntos delincuentes bajó a un hombre sin camisa que fue el único detenido, después de la insistencia de los comunitarios, también fue llevado a la comisaría.
Por la tarde, también en asamblea decidieron quemar uno de los tres paquetes de mariguana, el de 3.5 kilogramos frente a la comisaría, con los grandes de 18 kilos aún no deciden que harán y lo definirán en una asamblea más completa en la que haya mayor número de asistentes.
Los pobladores realizaron un “juicio popular” a uno de los jóvenes detenidos, no revelaron su nombre pero estaba en la comisaría porque los policías comunitarios le encontraron tres celulares y en uno de ellos tenía mensajes que podrían relacionarlo con grupos delincuenciales.
Sin embargo la familia del joven empeñó su palabra en el sentido de cuidar que el joven no tuviera amistades relacionadas con el crimen y acompañarlo a firmar una vez a la semana a la comisaría como muestra de su interés por reincorporarse de manera sana a la sociedad.
Tras la salida del joven, quedaron detenidas sólo 17 personas, los integrantes del FUSDEG y el comisario municipal acordaron no dar a conocer los nombres de los detenidos porque hay casos en los que no se comprueba su responsabilidad en hechos delictivos.
Pero confirmaron que eran 18 antes de la liberación del joven, entre los detenidos había por lo menos una mujer.

Se buscará reglamentar la actuación de las policías comunitarias, adelanta Ortega

*Ofrece ir a Petaquillas y llama “mentirosos” a quienes informaron que funcionarios de su gobierno tendrían ayer una mesa de trabajo con los vecinos de esa comunidad vecina de Chilpancingo que se levantaron contra la delincuencia organizada. También visitará Mochitlán y Quechultenango

Mariana Labastida

El gobernador Rogelio Ortega Martínez dijo que su administración buscará reglamentar las acciones de las policías que han formado los pueblos para que puedan trabajar “en la misma sintonía” con las diferentes corporaciones de seguridad del gobierno, luego del ingreso de policías comunitarios del valle del Ocotito a la comunidad de Petaquillas, donde los vecinos formaron su propio grupo para defenderse de la delincuencia organizada.
Ortega Martínez calificó a los vecinos que informaron que ayer tendrían una mesa de trabajo con autoridades del estado, como “mentirosos”, porque no tenía información de que alguno de sus funcionarios se reuniría con los pobladores, y ofreció ajustar su agenda para ir él a un encuentro con esa comunidad vecina de Chilpancingo.
Anunció que realizará esta semana un recorrido por la zona de las cañadas, en los municipios que serían afectados si hubiera un bloqueo en Petaquillas, como Mochitlán y Quechultenango.
Sobre la negativa de la Fiscalía General del Estado (FGE) para emitir un desistimiento a favor de la coordinadora de la policía comunitaria de Olinalá, Nestora Salgado García, dijo que el gobierno del estado buscará otras rutas en el ámbito jurídico, para distender el conflicto.
En el caso del vocero del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Parota (Cecop), Marco Antonio Suástegui Muñoz, se limitó a decir que hay una disposición de un juez, en referencia al traslado que se le concedió al penal de La Unión.
En declaraciones a reporteros al llegar al zócalo, para un recorrido de supervisión de las obras de remodelación, en relación con la entrada de policías comunitarios del Frente Unido por la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), de Ocotito a la comunidad Petaquillas, el gobernador indicó que no es un fenómeno de ahora, sino que inició hace 19 años, en las comunidades indígenas que se organizaron para dar seguridad a si mismos y se ha ido extendiendo. Que es una gran experiencia, que se debe de retomar lo positivo y hacer a un lado lo negativo.
Enfatizó que se entrará en una “ruta de institucionalización y establecer una normativa, para que los pueblos que han decidido organizar policías comunitarias, todos estemos en la misma sintonía, con un reglamento, con una normativa y colaboración con todas las instancias de seguridad”. Que se buscará una ruta de armonía, diálogo y acuerdos positivos.
El gobernador indicó que se reforzará la zona de Petaquillas, con policías federales o militares, como se ha estado trabajando en todo el estado. También indicó que hará un recorrido esta semana por esa región, para conocer el sentir de los vecinos.
Al preguntarle de porque los funcionarios estatales no habían acudido a la reunión con pobladores de Petaquillas, que se había programado para las 11 de la mañana de ayer domingo, el gobernador preguntó que con quién la habían pactado, porque con él no, “yo soy hombre de palabra” y calificó como “mentirosos” a los que dieron esa información.
“A mí no me informaron, pero yo estoy a la orden, para ajustarme en mi agenda e ir a todos los lugares donde la gente nos invite”, aseguró.
Sobre el hecho de que ningún funcionario estatal se ha acercado a los pobladores de Petaquillas, Rogelio Ortega indicó que no estaba enterado; insistió en que no sabía de la reunión de la que se le preguntó, y que mandaría a alguien.
De porqué no había enviado a nadie del gobierno del estado, a un día del ingreso de los policías comunitarios a Petaquillas, el gobernador respondió: “He bajado 15 kilos, son muchos los problemas que hay y he tratado de estar en todos”, mientras se tomaba un jugo de mandarina con zapote que le prepararon en un local cerca del zócalo. Y reiteró que hará una gira para atender el problema, “porque cualquier tapón que se ponga en Petaquillas afectará a los municipios del fondo”.
En relación con la información que dieron a conocer ayer mismo los policías comunitarios, sobre la detención de personas que trasportaban droga en un vehículo, Ortega Martínez expuso que “es el problema que tenemos en Guerrero, no nació de ahora, somos el primer productor de amapola en el mundo, imagínese si no se convertirá en un negocio atractivo”.
A pregunta de una reportera sobre la petición que hizo el alcalde de Coyuca, Ramiro Ávila, de que se dé seguridad a ese municipio, porque cuando se blinda Acapulco los delincuentes se mueve a las demarcaciones cercanas, Rogelio Ortega indicó que su gobierno tiene registrado cuando se concentra en un área la delincuencia y se mueve a otra, donde hay menos seguridad, por lo que han planeado con las autoridades correspondientes un blindaje más efectivo.
Consultado en relación con la negativa del fiscal general, Miguel Ángel Godínez Muñoz, de acceder a su solicitud de desistimiento de los cargos del fuero común contra Nestora Salgado, respondió que el gobierno del estado explorará otras rutas en el ámbito jurídico, que es lo que respetaran como autoridades, además de que existen otras leyes en las que se pueden respaldar, como la de los derechos humanos y la ley 701 que ampara la actuación de las policías que forman los pueblos originarios. Además de que seguirá con “toda la voluntad política, para distender el conflicto político y social que se vive en el estado”.
En el caso del vocero del Cecop, Suástegui Muñoz dijo que hay una disposición de un juez en ese tema, en referencia al amparo concedido por la jueza tercera de Distrito, Liliana Maya Delgadillo, en contra de las violaciones de los derechos del dirigente social, y declaró inconstitucional su traslado al penal de máxima seguridad de Tepic, Nayarit, y ordenó su regreso a la cárcel de La Unión.
Del viaje a Ginebra de los padres de los normalistas desaparecidos en Iguala, en el contexto de la evaluación de México ante el comité de la ONU contra las desapariciones forzadas, el gobernador se limitó a decir que “todo lo que podamos respaldar, nuestra solidaridad con los padres de los muchachos desaparecidos, lo hemos hecho desde que llegamos al ejecutivo del estado”.
Sobre el bloqueo de trabajadores de la SEG, el viernes en la avenida Costera para exigir el pago de su quincena, así como la amenaza de los maestros de continuar las protestas, el gobernador dijo que “ese es el Guerrero que tenemos, no es el que yo quisiera”, pero insistió en su postura en contra de los bloqueos porque, subrayó, afectan a miles, incluso a ellos mismos.
Lamentó que los docentes estén acostumbrados a bloquear como única vía para resolver los sus inconformidades, que es lo que anuncia al país y al mundo que en Acapulco hay un caos, sin embargo, celebró que a pesar de “ese repertorio de inconsciencia que le hace daño a Guerrero y a Acapulco, la gente sigue viniendo”.
Aplaudió que “ya no hay bloqueos en la autopista, ya no se va a permitir que encapuchados estén cobrando, afectando el derechos de miles, y pues la gente tiene devoción por Acapulco”. Señaló que es comprensible la protesta, cuando las puertas de las autoridades están cerradas, lo cual consideró que no es el caso de su gobierno.
Sobre si le dejó muchos problemas el gobierno anterior, Ortega explicó que se vienen arrastrando de administraciones pasadas, como las once mil plazas del sector educativo que no tienen techo presupuestal y que es a los que no les han pagado. “Este estado acumuló una gran cantidad de rezagos, es una acumulación que en pocos meses se puede dejar encaminada en una ruta, hacia los próximos años, hacer esfuerzos para sacar del rezago al estado y ahí tenemos que colaborar todos”, puntualizó.

No acuden funcionarios estatales a Petaquillas; se cancela la reunión anunciada

Rosalba Ramírez García

Petaquillas

La reunión del gobierno del estado, integrantes del Frente Unido por la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) y de la recién creada Policía Comunitaria de Petaquillas fue suspendida porque las autoridades estatales no quisieron acudir a esta población del municipio de Chilpancingo.
La reunión estaba programada para las 11 de la mañana del domingo frente a la comisaría municipal, y sería pública como lo reclamaron los habitantes.
El comisario municipal, Arquímides Vargas Encarnación, y otros representantes de los ciudadanos organizados pidieron vía telefónica al secretario general de Gobierno, David Cienfuegos Salgado, que junto con representantes de Seguridad Pública estatal y federal acudieran a la comunidad para realizar la reunión frente a la población, como lo habían acordado un día antes.
Sin embargo el gobierno estatal insistió en que un grupo de representantes de la comunidad acompañados con integrantes del FUSDEG fueran a la Secretaría General de Gobierno en Palacio de Gobierno, pero los pobladores se negaron.
El comisario preguntó pasado el medio día a unos 300 habitantes que seguían esperando, si estaban de acuerdo en que fuera una representación a reunirse con el gobierno estatal, pero todos los asistentes a mano alzada votaron en contra y exigieron la presencia del secretario de Gobierno en Petaquillas.
La última propuesta del comisario y los representantes del FUSDEG fue que acudirían a Chilpancingo sólo si se permitía el acceso a los policías comunitarios armados, porque solo saldrían de Petaquillas escoltados “por estos hombres humildes que nos vinieron a dar la seguridad que tanto le pedimos al gobierno”.
Pero la segunda propuesta de los representantes de Petaquillas no fue aceptada por la Secretaría General de Gobierno y la reunión se canceló.