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Justicia para Ayotzinapa y no más cárcel a líderes sociales, pide a Ortega la viuda de Genaro Vázquez

*El gobernador asiste al 43 aniversario luctuoso del guerrillero al que califica de referente en la lucha social, que combatió el autoritarismo reinante por la vía electoral. Marchan en memoria en San Luis Acatlán maestros, alumnos y el MPG

Jacob Morales Antonio

San Luis Acatlán

Durante el acto del 43 aniversario luctuoso de la muerte del guerrillero fundador de la Asociación Cívica Nacional Revolucionaria (ACNR), Genaro Vázquez Rojas, su viuda Consuelo Solís Morales exigió justicia para los padres y los normalistas de Ayotzinapa, no más desapariciones en el país, y un alto al encarcelamiento de los luchadores sociales, ante la presencia del gobernador Rogelio Ortega Martínez.
El gobernador en su discurso dijo que Genaro Vázquez es un referente en la lucha social, porque luchó contra el autoritarismo que reinaba en los años 1960 por la vía electoral, y fue reprimido, perseguido y encarcelado. Fue en este contexto que decidió organizar un grupo guerrillero.
También manifestó que al gobierno no le asustan las protestas, porque son justas y porque antes nadie los volteó a ver para atenderlas, contrario a lo que ocurre con su gobierno que mantiene las puertas abiertas.
Por la tarde, unas 300 personas, entre maestros y alumnos de las preparatorias del municipio, que llevan el nombre del extinto líder, además de integrantes del Movimiento Popular Guerrerense (MPG), marcharon por las principales calles y depositaron una ofrenda floral en la tumba del maestro normalista, egresado de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa.
Minutos después de las 10 de la mañana, el gobernador y su esposa Rosa Icela Ojeda, llegaron al panteón municipal donde depositaron una ofrenda floral en nombre del gobierno del estado. Ahí, la viuda del guerrillero demandó una investigación que deje conformes a los familiares de los 43 estudiantes normalistas, desaparecidos por policías los días 26 y 27 de septiembre en Iguala.
“Queremos justicia y todo el pueblo de Guerrero y de México lo reclama”, subrayó Consuelo Solís. Además, recordó que el gobierno habla de fomentar la educación y de crear profesionistas “y responde así, no queremos más desaparecidos”.
Ante la presencia del hijo del extinto líder, quien lleva el mismo nombre de su padre, quien fue alcalde de San Luis Acatlán y ahora es asesor del gobernador, su madre demandó un gobierno que sepa oír al pueblo y a las organizaciones sociales. Un alto a la corrupción, para que el país se vaya despejando de esa situación que calificó de grave. “Ojalá que sea Guerrero el que comience a poner en orden las cosas”, confió.
La viuda de Vázquez Rojas también demandó un alto a la represión en contra de los líderes sociales, y pidió la liberación de los dirigentes encarcelados durante el gobierno de Ángel Aguirre Rivero.
Solís Morales enfatizó que el gobierno debe de dar solución a las demandas de los campesinos del estado y sus comunidades, una de las exigencias por las que su esposo pugnó en vida.
Por su parte, el gobernador dijo que estaba en el lugar porque no olvida su origen de luchador social y de hombre de izquierda, en alusión a su participación en la refundación de la Asocación Cívica Nacional Revolucionaria a principios de la década de 1980.
Recordó que Genaro Vázquez “abrió una brecha para que en aquellos tiempos difíciles, donde no había pluralidad, donde el autoritarismo y la intolerancia era lo que reinaba, no sólo en Guerrero, sino en todo el país, y aun así fueron a la competencia electoral, ahí fueron perseguidos, reprimidos y encarcelados”.
Esto, en clara alusión al acuerdo de la Asamblea Nacional Popular y los padres de los 43 normalistas, de que no haya elecciones al no haber condiciones en el estado.
Abundó: “Y la democracia seguramente todavía imperfecta que tenemos todavía en México, pero que gracias al luchador como el profesor Genaro Vázquez disfrutamos ahora los ciudadanos”.
El gobernador también reconoció que los maestros educan en las aulas, pero de igual modo lo hacen en las calles y en las protestas, porque se convierten en líderes sociales.
Sobre las movilizaciones de los familiares de los estudiantes desaparecidos y organizaciones sociales, expresó: “No nos asustan, por ningún motivo y bajo ninguna circunstancia, si protestan es por algo, porque seguramente en algún momento nadie los escuchó, porque nadie los vio, porque les cerraron las puertas y no atendieron sus justas demandas”.
En respuesta a la demanda de la viuda del Guerrillero, dijo que el gobierno escucha y mantiene abierta las puertas del “corazón de quienes gobernamos”, para atender las demandas de la gente.
El gobernador reconoció que la paz democrática llegará cuando exista plena justicia para todo el pueblo del estado, pero en especial para los familiares de los asesinados y heridos en Iguala. “Y lo más terrible, de los 43 normalistas desaparecidos”.
Al término del acto, el gobernador y familiares tuvieron un encuentro privado donde desayunaron y al que también asistieron el coordinador de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias, Abad García García; la gestora de mujeres indígenas, Apolonia Plácido Valerio; además de Guillermo Sotelo Rabiela y familiares del guerrillero, oriundo de San Luis Acatlán.

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