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Repliegan ciudadanos a soldados que iban a desarmar a comunitarios en Petaquillas

*Bloquean las carreteras en esa población de Chilpancingo, en Tierra Colorada, Xaltianguis, El Ocotito y Mazatlán para demandar la salida del Ejército

*Unos cien militares quedan sitiados entre los manifestantes y los vehículos parados

*A la media noche los vecinos rompen un cerco militar y abren paso a más comunitarios que llegaron a apoyarlos

*Se confrontan a empellones en tres ocasiones cuando los uniformados intentaron detener a integrantes de la nueva Policía Comunitaria

*El comandante de la 35 Zona Militar les dijo que no se permitiría la circulación de hombres armados

Repliegan ciudadanos de Petaquillas a soldados que pretendían desarmar a policías comunitarios

*Bloquean las carreteras en esa población del municipio de Chilpancingo, en Tierra Colorada, Xaltianguis, El Ocotito y Mazatlán para demandar la salida del Ejército. Unos cien militares quedan sitiados entre los manifestantes y los vehículos parados. A la media noche los vecinos rompen un cerco militar para abrir paso a más comunitarios de El Ocotito y Tierra Colorada que llegaron a apoyarlos. Se confrontan a empellones en tres ocasiones cuando los uniformados intentaron detener a los comunitarios

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Entre reclamos de la ineficiencia de las instituciones en materia de seguridad, vecinos de Petaquillas replegaron a un centenar de soldados que pretendían instalar un retén en la entrada a esa comunidad, y desarmar a los policías comunitarios que llegaron el sábado del Ocotito.
Cuando los uniformados se negaron a retirarse comenzaron las protestas ciudadanas y bloqueos a las carreteras en Petaquillas, Tierra Colorada, El Ocotito, Mazatlán y Xaltianguis sobre la carretera federal y la autopista, que se mantuvieron hasta la madrugada de hoy.
A las 2:05 de esta madrugada, frente a la colonia  Villas Magisteriales, en la entrada a Chilpancingo, seguía el bloqueo de los ciudadanos. A 500 metros se veían dos camiones llenos de soldados y 20 camionetas con policías estatales y federales con equipo antimotines.
En Chilpancingo, vecinos de Petaquillas bloquearon la carretera federal México-Acapulco, a 10 kilómetros al sur de la capital, y exigieron a los soldados el libre tránsito para los policías comunitarios del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) en el corredor desde Petaquillas hasta Xaltianguis, en Acapulco.
En este diálogo con mandos castrenses, los soldados quedaron atrapados entre los manifestantes y los automovilistas, en medio del boqueo, y a las 7:30 de la noche trascendió una versión extraoficial de que policías antimotines estatales y federales iban a desalojar a los manifestantes si a las 9:00 no desocupaban la vía.
Se dio la media noche y no hubo desalojo, fueron los ciudadanos los que rompieron un cerco militar en Petaquillas para abrir paso a más policías comunitarios de El Ocotito y Tierra Colorada que llegaron a apoyarlos.
Antes de las 12 se confrontaron a empellones en tres ocasiones soldados y ciudadanos, cuando los primeros intentaron detener a policías ciudadanos que iban armados con escopetas en la carretera, entre los automóviles detenidos en el bloqueo de Petaquillas.
En la tarde acudió a la protesta un asesor del gobierno del estado que intentó llevar a una comisión de vecinos al Palacio de Gobierno, pero se exaltó pronto ante los reclamos de los ciudadanos.
Incluso durante una hora se negó a hablar con los manifestantes. El resto de la noche, el gobierno del estado mantuvo esa posición, aún cuando los ciudadanos exigieron que los funcionarios se acercaran a la protesta.
A las 8 de la noche el movimiento de Petaquillas anunció que no se movería de la carretera federal, porque los soldados dejaron claro que no iban a permitir gente armada en la carretera, en clara alusión a los policías comunitarios que asumieron la seguridad en esa comunidad.
Media hora después, vía telefónica, solicitaron al secretario general de Gobierno, David Cienfuegos Salgado, que “entre generales” se entendiera con los mandos del Ejército, para que hablara del retiro de los militares del territorio comunitario.
Mediante un vocero, los ciudadanos denunciaron que en la tarde los soldados impidieron el paso de policías comunitarios que iban a reforzar a la población en Petaquillas, donde se temía un ataque de los narcotraficantes que operan desde Colotlipa, Mochitlán y Quechultenango hasta Tlanicuilulco, en la zona conocida como circuito Río Azul.
Tras 4 horas y media de bloqueo, de 4 a 8 de la noche, se informó que ciudadanos y policías comunitarios de Tierra Colorada y Ocotito iban a reforzar la protesta de Petaquillas, donde ya se repartía café y alimentos entre los manifestantes en plena carretera federal.
A las 9:25 confirmaron, sin precisar la fuente, que había una orden federal para desarmar a la Policía Comunitaria en Petaquillas y anunciaron que en apoyo, vecinos de Tierra Colorada y El Ocotito cerraron la Autopista del Sol, y en Mazatlán se bloqueó el paso en la carretera federal.
También se movilizaron alrededor de las protestas agentes de la Gendarmería y de la Policía Federal, denunciaron. Antes de las 9 de la noche, en Petaquillas el bloqueo se hizo intermitente.

No llegan a acuerdos con militares

Alrededor de las 4 de la tarde, un centenar de militares llegó a la entrada principal de Petaquillas a instalar un retén sobre la carretera ederal, pero se desplegaron unos 300 metros hacia el sur cuando los vecinos les exigieron que se retiraran.
Ese era un nuevo retén a propósito de la llegada de la Policía Comunitaria del FUSDEG el sábado a Petaquillas, la población más cercana a la capital, por el cual se manejó que los soldados pretendían desarmar a los comunitarios.
Ante esa versión se reunieron unas 600 personas en la carretera y se acercaron a los militares para confrontarlos.
Mediante el excomisario de Petaquillas, Beslester Herrera Rojas, pidieron al coronel al mando que se movieran al norte, a la altura de la colonia La Cinca, en Chilpancingo, donde generalmente mantienen su retén, para no inhibir el apoyo de los comunitarios que vendrían de Tierra Colorada.
Después de consultar a su mando superior, el coronel dijo que no podía moverse, incluso hubo comunicaron vía telefónica con el capitán Raúl Gámez Segovia, comandante de la 35 Zona Militar. Parecía que habría acuerdos pero el jefe militar sólo ofreció mover a los soldados un kilómetro más al sur (no al norte como pidieron los manifestantes) y dijo que no iban a entorpecer sus actividades.
También adelantaron que un grupo de soldados iba a entrar a Petaquillas por el lado del Río Azul, para contrarrestar un posible ataque de sicarios, aunque también se mencionó que policías estatales entraban por ese lado.
Los vecinos insistieron en que el peligro estaba en el otro lado, no en el corredor de la carretera federal donde operan los policías comunitarios. Herrera Rojas reconoció que los pueblos tienen miedo por los riesgos confrontar el gobierno y a la delincuencia, “pero no significa cobardía”.

“Tengan vergüenza y retírense”: gritan a los soldados

Durante la comunicación no cesaron los reclamos a los militares. Casi al llanto, una mujer les gritó que alguna vez creyó que los soldados eran buenas personas, pero no más, porque nada hacen para evitar los crímenes y atropellos.
Denunció que apenas el jueves un grupo armado sacó a punta de pistola a su yerno de su casa y amenazó al resto de la familia, lo desnudaron y golpearon y ahora está hospitalizado.
Se informó que un día antes de la entrada de la policía comunitaria encontraron a una joven de 29 años asesinada en Petaquillas, junto a ella dejaron abandonado y con golpes a su hijo de dos años de edad.
Una maestra añadió que a las 11 de la mañana pasaban carros con personas armadas matando a cualquiera en la calle, “¿No cree que causa temor en los niños?, y ahora dice el gobierno que les demos un voto de confianza, ¿Ahora que está la comunitaria se vienen a plantar aquí?”.
Recordaron que los criminales constantemente van a tirar cuerpos al puente de Petaquillas y a las barrancas, y los soldados no les dieron seguridad, “tengan vergüenza y retírense”, gritaron.
Acusaron a los uniformados de la agresión a los estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa el 26 de septiembre en Iguala, porque protegieron la acción de quienes los atacaron y desaparecieron.
Otra voz añadió, “¿A cuántos han detenido (en el retén)?, ¿Cuántos carros han revisado? porque la Policía Comunitaria en dos días en Petaquillas decomisó 39 kilos de droga que se atrevió a pasar ahí por el cobijo que tuvo de las autoridades”.
A las 10:30 de la noche se informó que comunitarios del Ocotito se acercaban al plantón de Petaquillas, pero no les permitía el paso otro retén de militares cerca de Mazatlán.
Se organizó una comisión para ir con ellos con una valla humana, pero los militares que estaban en medio del plantón intentaron impedir el paso a los armados. La población los rebasaba en número y luego de tres intentos, donde hubo empujones, pasaron vecinos y policías comunitarios solidarios con Petaquillas.
Cerca de la media noche un grupo mantuvo el bloqueo en la carretera federal, y otro se movió al norte más cerca de la capital, frente a las Villas Magisteriales.
La comunicación con autoridades estatales seguía, y a las 12:40 seguían atorados en el sitio de la reunión para comenzar las pláticas. Los vecinos, acordaron que de concretarse la reunión hoy en Palacio de Gobierno tendría que ser abierta a los medios comunicación, para evitar el acoso de las autoridades.

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