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Se unen administrativos, intendentes y maestros en Acapulco para exigir el pago de la quincena

*Durante la marcha se da un zafarrancho entre maestros del SNTE y la CETEG, y éstos se separan y se dirigen a una oficina de Finanzas

Karina Contreras

Unos 5 mil trabajadores administrativos y de intendencia de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), apoyados por maestros adheridos a la sección 14, del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación Guerrero (SNTE), llevaron a cabo una marcha para exigir a los gobiernos federal y estatal, el pago de su quincena.
Al finalizar la marcha, los maestros bloquearon por dos horas el carril con sentido Base-Centro y se recolectaron, en cinco mesas receptoras, firmas para demandar a los gobiernos federal, estatal y SEG ante el Tribunal de Conciliación y Arbitraje del Estado de Guerrero, por la retención del salario ya devengado.
Durante la marcha se dio un zafarrancho entre los maestros del SNTE y la CETEG, lo que provocó que los primeros ya no concluyeran la marcha como la tenían planeada.
Durante la marcha, se vieron varias cartulinas que decían: “Comunicado. Tu sueldo ya no lo pagará el estado, porque son muy rateros. Tu sueldo te lo pagará la federación, porque son mucho más rateros”, “¿De qué te quejas, tu sueldo está invertido en la casa blanca mexicana?”, “tus hijos y tú muéranse de hambre”, “gobierno mañoso, ya págame que tengo que mantener familia” y “presidente, ya paga a los maestros, trabajamos por necesidad”.
Uno de los oradores dijo que las acciones van a seguir, porque han pasado cinco días desde que les tuvieron que haber pagado y demandó que si la federación no tiene la capacidad de administrar un recurso ya presupuestado a la educación, que deje que el estado, lo ejerza, pues antes de que la federación concentrara la nómina nunca habían sufrido su falta de pago. Dijo que ahora argumentan la conciliación de la nómina, cuando las partes debieron haber tomado medidas cautelares y tomarse todo el tiempo necesario para la revisión de la nómina.
La manifestación del magisterio ocupó todo el carril del sentido Base-Centro, lo que provocó un fuerte tráfico. El carril Centro-Base se tuvo que habilitar en doble sentido, y elementos de la Gendarmería daban paso vial.
La manifestación fue vigilada por patrullas de la Gendarmería, pues los organizadores dijeron que habían informado mediante un oficio a ésta, así como al Ayuntamiento, de su movilización.
Los maestros siguieron su marcha, pero a medíahora de haber iniciado, se dio un zafarrancho con maestros de la CETEG, que los obligó a desistir de su movilización y concentrarse en un mitin en la glorieta de La Diana.
Los oradores decían que la marcha no tenía otro objetivo que exigir que la federación liberara el pago ya devengado de los trabajadores administrativos y de intendencia; acusaron a los cetegistas de llevar otras banderas políticas y éstos acusaban que lo que se estaba viviendo era por culpa del “charrismo sindical”, lo que provocó al furia del SNTE, quienes les gritaron: “fuera”.
Desde el sonido los dirigentes de la SNTE exigieron a los cetegistas salirse de la marcha.
“Hagan lo que tengan que hacer, hay que ver cuántos son, pedimos prudencia y paciencia y quedarnos aquí; que los cetegistas avancen”, y otro orador acusó a la CETEG de querer colgarse de la movilización de ellos, porque “no tiene capacidad de convocatoria, tienen que montarse en nuestro escenario; que nos demuestren esa capacidad de convocatoria y manden a llamar a sus compañeros que representan y no se suban en escenarios ajenos, que con mucho orgullo encabeza el SNTE”.
Mientras que desde su sonido, los oradores de la CETEG también respondieron que los problemas son ocasionados por la aprobación de la reforma educativa, que apoyo el “charrismo sindical”, y gritaron: “Unidad, unidad sin charrismo sindical”.
Luego, los maestros de ambos lados empezaron a gritar “unidad, unidad” o “avanzar, avanzar por la lucha sindical”. Los de la CETEG dijeron que ellos exigían también al gobierno federal el pago inmediato a los compañeros administrativos e intendencia.
Los maestros continuaron con sus gritos de unidad para que les pagaran su salario, que caminaran juntos, exigían que se dejaran de un lado las cuestiones políticas, gritaban: “magisterio unido, jamás será vencido” o “no es un movimiento político, no es contra nosotros mismos la pelea, sino contra el gobierno”. Pero nada de eso importó a algunos maestros que empezaron gritar y aventar puñetazos y patadas, y una de ellas fue a dar directamente al integrante de la comisión política de la CETEG, Walter Manuel Añorve, quien también tiró puñetazos.
Maestros los separaron y pidieron prudencia, los dirigente del SNTE, entre ellos el secretario de Organización Martín Radilla, les pidieron que avanzaran con su contingente. Luego de permanecer parados unos diez minutos, los del SNTE decidieron no seguir la ruta de la marcha que se tenían planeada y se pasaron al otro carril, para regresar a la glorieta de La Diana, aunque varios de sus agremiados siguieron la marcha de frente.
Por dos horas, los maestros bloquearon frente a la plaza Galerías Diana y recabaron firmas, para poder demandar al gobierno federal, del estado y la SEG por la falta de pago. En su mensaje, el secretario de Organización 6 de la región Acapulco, del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Martín Radilla Mendiola, pidió a sus agremiados que firmaran para interponer un juicio ordinario laboral ante el Tribunal de Conciliación y Arbitraje del Estado de Guerrero.
Indicó que tomaron la decisión de sacar el magisterio a la calle, aún cuando fue difícil como organización, porque no hacen eso, pero que ahora se trata del salario de trabajadores que todos los días han estado cumpliendo en las escuelas. Luego, en referencia a la CETEG, dijo: “Aquí no hay encapuchados, no hay violentos, aquí estamos los maestros que todos los días cumplimos en las aulas, esa es la diferencia”.
Explicó que la certeza laboral ya se reflejó en el personal docente y directivo supervisión, que no están en juego las plazas ni están en juego los salarios.
“El problema que tenemos no es la plaza de los administrativos, el salario, el problema es la elevada nómina que el gobierno del estado hizo llegar a la federación, donde hasta los trabajadores de confianza se los insertó, ese es el problema. Eso es la consecuencia de que los compañeros administrativos no les haya llegado el salario de estas quincenas”.

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