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Respaldan padres de Ayotzinapa al Equipo Argentino; nunca ha sembrado evidencia y la PGR sí, señalan

*En lugar de cuestionar su capacidad probada en distintas partes mundo deberían de atender sus recomendaciones, pide Felipe de la Cruz. Es clara la intención de encubrir del Estado, pero no van a descansar hasta saber la verdad sin importar las consecuencias, “porque se tiene que castigar a todos los que intervinieron en el crimen de lesa humanidad”, agrega

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Padres y alumnos de la Normal Rural Ayotzinapa ratificaron su confianza y aval al Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), que el sábado desacreditó la versión oficial de la Procuraduría General de la República (PGR), la cual dice que los estudiantes detenidos-desaparecidos por policías en Iguala fueron asesinados y quemados por sicarios en el basurero de Cocula.
Volvieron a demandar la presentación con vida de los 42 (antes 43) jóvenes desaparecidos la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre, así como respeto al trabajo y a la integridad del prestigiado grupo de expertos que reveló las fallas en la investigación de las autoridades.
Por otro lado, la PGR también emitió un comunicado para insistir en su posición, y recriminó que el EAAF quiera sembrar la duda de la ejecución e incineración de alrededor de 40 personas en el basurero de Cocula, que dice que documentó con pruebas, peritajes y testimonios.
El dirigente estudiantil, Omar García recordó que el equipo argentino “nunca ha actuado sin rigor científico, no ha sembrado evidencia, nunca ha forzado evidencia para cuadrar una hipótesis. La PGR sí”.
En conferencia de prensa en la ciudad de México, trasmitida en Internet, el vocero de los padres de familia, Felipe de la Cruz, dijo que tienen mucha desconfianza en la PGR “ante la mentira descubierta”.
Recordó que nunca creyeron en la tesis del procurador Jesús Murillo Karam sobre el basurero de Cocula, basada en testimonios de presuntos homicidas pero ahora tienen elementos para confirmar su postura.
El EAAF señaló que la PGR simplificó la evidencia sólo para hacerla coincidir con la historia de los implicados en la detención y desaparición de los normalistas.
Indicó que en el basurero ha habido incendios desde 2010, y entre los restos que recolectaron en el lugar había una prótesis dental que no corresponde a los estudiantes. Concluyó que aún no existe evidencia de que el asesinato y la desaparición de los jóvenes ocurrió en el basurero de Cocula la madrugada del 27 de septiembre de 2014, aunque tampoco cerró la posibilidad de que alguno o algunos estudiantes hubieran pasado por ahí.
De la Cruz consideró que estas revelaciones, preocupan, porque saben que el gobierno es represor, “cuando algo no le sale bien y hay alguien que lo denuncia viene la presión y de todo lo que le pueda suceder al equipo forense argentino queremos hacer responsable al gobierno de México”. Añadió que es clara la intención de encubrir del Estado, pero los padres y estudiantes no van a descansar hasta saber la verdad de los delitos que cometieron policías municipales y militares, sin importar las consecuencias, “porque se tiene que castigar a todos los que intervinieron en el crimen de lesa humanidad”.
Adelantó que en los próximos días van a revisar los cuarteles porque fue un compromiso del gobierno federal, abrir las instalaciones militares para que los padres busquen a sus hijos desaparecidos.
El presidente del Comité de padres de los desaparecidos, Melitón Ortega denunció que la PGR quiere cerrar el caso de desaparición forzada como un homicidio, sin dar certeza a los familiares de las víctimas del destino de sus hijos.
Por otro lado no ha esclarecido el homicidio del normalista Julio César Mondragón, desollado vivo la noche del 26 de septiembre en Iguala, tras el ataque de policías y la detención de 43 estudiantes.
Insistió en que la PGR se niega a investigar al Ejército a pesar de los señalamientos de los sobrevivientes, al alcalde Cocula y al exgobernador Ángel Aguirre Rivero.
Dijo que respaldan al EAAF porque no tiene un fin político, hace un trabajo técnico revisando todo tipo de evidencia.

La Policía Federal sabía de más de 100 fosas en Iguala, denuncian

El señor, Mario Gonzalez denunció que hace unos días se enteraron que antes del 26 de septiembre la Policía Federal supo de cien fosas clandestinas en Iguala, y no hizo nada.
Las instituciones omisas, denunció, ahora dicen que tampoco tienen el historial médico de los normalistas para determinar si la prótesis dental que hallaron en el basurero de Cocula es de algún estudiante.
Recordó que desde que les tomaron las primeras muestras de sangre para los análisis de ADN en la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado, y después en la Normal Rural los peritos argentinos y de la PGR les preguntaron por todos los antecedentes y señas particulares de sus hijos.
“Que no lo niegue, que no tienen el perfil médico de los chamacos, y si no los tienen ellos son los culpables, por ineptos, porque es su obligación sacarlos… siempre dije que no eramos tan necios, que mientras no hubiera pruebas científicas íbamos a seguir buscando a nuestros hijos, y ahora más que nunca señores, les digo que estamos más seguros que nuestros hijos están vivos”, expuso.
Lamentó que el procurador dé más crédito a los delincuentes que a los expertos argentinos, “que le dé un poco de vergüenza, que tengan un poco de dignidad y que ya digan la verdad”.

Al mentir, la PGR es cómplice

María de Jesús madre de un joven desaparecido denunció que la PGR miente y se hace cómplice de la desaparición de sus hijos. Indicó que los pobladores les confirmaron que no hubo incendio la noche del 26 ni la madrugada del 27 de septiembre en el basurero de Cocula.
Incluso señalaron que estuvo lloviendo hasta las 6 de la mañana del 27 y nadie vio humo durante el día, a pesar de que expertos de la UNAM señalaron que para quemar 40 cuerpos se necesitan toneladas de madera y miles de llantas.
Añadió que los padres también estuvieron en el basurero el 8 de noviembre, un día después de que el procurador dijo que los normalistas fueron quemados hasta las cenizas en Cocula, pero no encontraron indicios del incendio ni vegetación seca por el calor.
“A nosotros como padres no nos engañaron, porque dicen que cuando queman cuerpos las piedras quedan con grasa, el suelo queda grasoso, los cuerpos de abajo no pudieron haberse quemado totalmente ni enfriarse, debieron tener brasas (en ese caso), al echarlos a bolsas se habría quemado el plástico”, agregó.
Cuestionó la tesis de la PGR que indica que los cuerpos se terminaron de quemar a las 3 de la tarde, y a las 5 los echaron en bolsas de plástico, “por eso decimos que es mentira… nuestros hijos están vivos, los sentimos y exigimos su presentación lo antes posible y no descansaremos hasta encontrarlos”.
Bernabé Campos, el padre que estuvo en la sesión de la ONU en Ginebra, Suiza, donde México fue evaluado en desapariciones forzadas, señaló que los representantes del Estado no supieron dar información sobre el paradero de sus hijos. Tampoco dijeron que estaban muertos. “Por eso le digo a nuestro gobierno que ya basta, que no juegue con nosotros, les dijimos que nos los entreguen, nosotros hemos dicho no nos vamos a ir hasta encontrarlos, hasta las últimas consecuencias… exigimos los 43 padres de familia que ya nos los entreguen, es mucho el sufrimiento que hemos pasado pero vamos a seguir luchando”, demandó.
Los padres reivindicaron la información que hizo pública el EAAF sobre irregularidades en la investigación de la PGR, porque sustentan sus conclusiones en imágenes satelitales del basurero de Cocula, que indican que ahí hubo incendios desde desde 2010, por lo tanto, la PGR no puede atribuir los restos que encontraron a un solo evento el 26 y 27 de septiembre.
El vocero señaló que la PGR puede estar ignorando otros crímenes de personas desaparecidas, y demandó que presente para el escrutinio público los dictámenes que tiene sobre el basurero de Cocula.
Como recomendaron los expertos argentinos, también exigió que se preserve toda la evidencia, incluido el basurero de Cocula, para que los expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) haga la revisión técnica de la investigación. Se espera su llegada en unos días.
El dirigente estudiantil David Flores consideró que en su momento los expertos de la CIDH van a evidenciar todas las artimañas de las autoridades.
Omar García destacó que los peritos del EAAF tienen contactos que apoyaron su investigación para presentar conclusiones sólidas. Mientras las autoridades usan pruebas superficiales y aún hay decenas de prófugos implicados en los crímenes contra los estudiantes.
Recriminó que no se ha tipificado el delito de desaparición forzada ni se ha investigado la corrupción política de Guerrero y del país, “no se investigan denuncias de tortura de los desaparecidos y hay versiones contradictorias en el expediente”.
Demandó que los dictámenes se presenten al público en Internet, en lugar de llevar videos editados sobre un caso que evidencia los graves problemas que dañan a todo México, “23 mil familias como nosotros que viven en la zozobra”.
Concluyó que mientras México no cuente con instituciones periciales independientes, las investigaciones en casos como el de Ayotzinapa no tendrá credibilidad.
Felipe de la Cruz subrayó que lo único que da constancia de la investigación de la PGR es el equipo argentino, y las autoridades, en lugar de cuestionar su capacidad probada en distintas partes mundo deberían de atender sus recomendaciones.
En cuanto a las elecciones, el vocero de los padres aclaró que no van a boicotearlas, pero siguen en la postura de que al menos en Guerrero no haya campañas ni votaciones mientras no se presente con vida a los 43 estudiantes.
Explicó que así las elecciones son la continuidad de la impunidad y la corrupción de autoridades ligadas con el crimen organizado, que son los mismos políticos buscando los puestos de elección popular, como ejemplo señaló al hijo del exgobernador Ángel Aguirre, que quiere ser alcalde de Acapulco, o el diputado local Héctor Astudillo Flores, próximo candidato del PRI a gobernador, que nada hicieron para contrarrestar a la delincuencia.

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