Cumple Tlachinollan 18 años en un medio hostil para defensores y el exilio de su abogado

Redacción

En medio de un contexto hostil que enfrentan los defensores de derechos humanos en la entidad y del exilio que vive uno de sus integrantes, el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan conmemorará su 18 aniversario de fundación este viernes 15 y sábado 16 de junio en Tlapa.
Por medio de un comunicado de prensa, detalla que el primer día inaugurarán el foro estatal denominado Desde el corazón de nuestras luchas, en el que participarán activistas que han sufrido persecución por las luchas que han emprendido en defensa de su derecho a la salud, a la vivienda, a la educación, al medio ambiente, al territorio, entre otras.
Agrega que la participación de defensores concluye el sábado, y por la tarde celebrarán una misa en la catedral de San Agustín para concluir posteriormente con una convivencia en el salón Marsil.
En su comunicado Tlachinollan destaca que los derechos humanos en México son una realidad cada vez más alejada para los pueblos y comunidades indígenas de la región Montaña y Costa Chica de Guerrero o cual  origina que el  Estado mexicano y sus agentes corruptos se conviertan en el factor que más amenaza el ejercicio y la defensa de los derechos humanos.
Asimismo menciona que en Guerrero los defensores y defensoras de los derechos humanos se multiplican en La Montaña para denunciar las atrocidades del Ejército y no permitir más la ocupación de sus territorios entre ellos se encuentra: Raúl Lucas Lucía, Manuel Ponce Rosas (ambos ejecutados en 2009), Raúl Hernández Abundio, Lorenzo Fernández Ortega, Álvaro Rodriguez Concepción, Obtilia Eugenio Manuel, Cuauhtémoc Ramírez, Maximino García Catarino, Inés Fernández Ortega y Valentina Rosendo Cantú.
Indica el organismo que los defensores de los derechos humanos forman parte de los centenares de víctimas que no encuentran justicia y  se ven obligados a vivir entre el miedo y el silencio.
En este contexto se menciona el caso “del compañero Vidulfo Rosales Sierra por asumir con gran pasión el caso de los estudiantes de Ayotzinapa recibió una amenaza más. Le dijeron que si sigue defendiendo a los vándalos de Ayotzinapa, a las mujeres que supuestamente fueron violadas por el Ejército y a los campesinos y campesinas opositores al proyecto hidroeléctrico La Parota, lo harán pedazos. Le pidieron que vaya juntando sus flores porque se va a morir”
También retoma el caso de los dirigentes ecologistas que aún siguen desaparecidos, Eva Alarcón y Marcial Bautista, “sin que la Procuraduría General de la República haga investigaciones serias y conducentes para dar con su paradero. Es posible afirmar que la impunidad en que se encuentra la desaparición de los defensores ecologistas, favoreció las condiciones para que se perpetrara el atentado contra integrantes de otras organizaciones defensoras del medio ambiente también de Guerrero”.
Es por ello que Tlachinolla  asegura que en Guerrero hoy se difunden  las voces de indígenas y campesinos que defienden sus territorios contra la entrada de las mineras y la construcción de hidroeléctricas, los estudiantes normalistas que se manifiestan y ejercen su derecho a la protesta para defender un proyecto educativo comprometido con las luchas..
En otro momento dice que a unos días de que Tlachinollan cumpla 18 años de  servir a los pueblos me’phaa, na savi, nauas, n’aanncue y mestizos de Guerrero no hará celebración alguna debido a que;  “¿Cómo podemos decir que celebraremos cuando Vidulfo, uno de nuestros compañeros, está en el exilio por amenazas provenientes de agentes del Estado? ¿Cómo podemos celebrar cuando Eva Alarcón y Marcial Bautista llevan 189 días desaparecidos sin que las autoridades asuman una investigación responsable para dar con su paradero? ¿Cómo celebrar si los guerrerenses hemos perdido dos valiosos profesores con los asesinatos de Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús?”