Marchan 10 mil maestros, estudiantes y padres de Ayotzinapa en Acapulco y cierran el aeropuerto

*Exigen la presentación de los 43 desaparecidos y que se garantice el pago a los trabajadores de la educación. En la noche representantes de la CETEG y del SUSPEG dialogan con el subsecretario de Gobernación Luis Enrique Miranda. Acuerdan reunirse hoy con funcionarios de la SEG para tratar el problema de las plazas sin presupuesto. Arrancan propaganda electoral durante la movilización

Karina Contreras y Jacob Morales

Maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) y del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG) encabezados por los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, bloquearon el aeropuerto internacional Juan Álvarez para exigir a las autoridades que firmen la minuta en la que se les dé certeza jurídica del salario de los profesores.
Antes, los más de 10 mil manifestantes marcharon junto al secretario general Ramos Reyes Guerrero desde el asta bandera hasta el Centro de Convenciones, donde tenían una reunión con el subsecretario de Gobierno Luis Enrique Miranda Nava, pero fue cancelada en ese lugar.
Finalmente la reunión se llevó a cabo desde las 9:00 hasta las 12:10 de la noche, tras el cierre del aeropuerto.
El líder de la CETEG, Ramos Reyes informó que una comisión de 37 trabajadores administrativos de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), del SUSPEG, maestros, y estudiantes del Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG) se reunieron con Miranda Nava en el aeropuerto.
Denunció que no llegaron autoridades de la Secretaría de Educación Pública (SEP) ni de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Agregó que acordaron una reunión para hoy con directores de personal de la SEG y del gobierno del estado para que informen a cuántos trabajadores les adeudan salarios de alguna quincena o el aguinaldo, y de cuánto es el monto de dinero que se necesita para pagarles, además de cuántas son las plazas que están sin presupuesto de la federación.
Después se encontrarán con el titular de la SEP, Emilio Chuayffet Chemor y con el secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, según el acuerdo.
Ramos Reyes afirmó que el gobierno federal sostiene que no sabe a cuántos trabajadores no se les ha pagado ni la cantidad de dinero se necesita para que mantengan su empleo.
Después de la 1:00 de la mañana el aeropuerto (que fue tomado a las 5:50 de la tarde) seguía bloqueado por unos 2 mil manifestantes, que estaban por definir si pernoctaban ahí y qué actividades de presión al gobierno tendrán hoy para que resuelva sus demandas.
A la 1:15 los maestros se retiraron hacia la delegación de la SEG en Acapulco, y acordaron marchar este miércoles a las 12 del día, mientras sus representantes dialogan con los funcionarios.

La marcha

Desde las 9 de la mañana los manifestantes se apoderaron del carril Centro-Base para manifestarse, y el carril Base-Centro fue habilitado en doble sentido.
La marcha partió a las 11 de la mañana e iba por la Gran Plaza cuando se incorporaron los padres de los 43 normalistas desaparecidos y estudiantes de Ayotzinapa, quienes se colocaron al frente.
Durante su recorrido gritaron consignas como “De este a oeste, ganaremos esta lucha cueste lo que cueste”, “Aplaudan, aplaudan, no dejen de aplaudir que el pinche gobierno se tiene que rendir”. También, “Manitas arriba, manitas abajo, si no hay salario tampoco trabajo” .
Los padres de los normalistas traían sus propias consignas para exigir la presentación con vida de sus hijos mientras caminaban con sus ya conocidas fotografías.
La marcha avanzaba a paso lento mientras el orador exigía el reconocimiento de sus plazas y el apoyo total a los padres de los normalistas de Ayotzinapa.
En su trayecto jóvenes despegaron propaganda política del perredista Evodio Velázquez que se encontraba en los carros de publicidad así como una manta de apoyo a la Gendarmería que colocaron empresarios.
La marcha se desarrolló sin incidentes. Algunas personas que venían acompañando la marcha y que cubrían sus rostros realizaron pintas en mamparas de publicidad ubicadas a lo largo de la Costera donde pintaron con aerosol “Nos faltan 43” y “Ayotzinapa vive”.
Otro grupo quitó de la avenida la propaganda de políticos bajo la consigna de que no habrá elecciones en el estado, pues no existen condiciones para su desarrollo en tanto las autoridades no presentan a los estudiantes desaparecidos.
Incluso retiraron lonas en dos carros de publicidad, pero no causaron daños a las unidades móviles.
En la retaguardia de la marcha se integraron estudiantes normalistas de las nueve normales del estado aglutinados en el Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG). Dieron las 12 del día cuando la vanguardia de la marcha llegó frente a La Diana y la retaguardia salía del asta bandera.
Después de 2 horas llegaron al Centro Internacional Acapulco (CIA), bloquearon los dos carriles y permanecieron otras 2 horas.
En la mañana la Dirección de Comunicación Social de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) informó que por solicitud de los maestros de la CETEG la reunión sería pospuesta, pero no se fijó el lugar ni la hora.
El secretario general de la CETEG, Ramos Reyes Guerreo, en breves declaraciones dijo que en la mesa de trabajo con el subsecretario de educación Luis Enrique Miranda exigirían como primer punto la presentación con vida de los estudiantes de Ayotzinapa.
Además que el gobierno federal garantice los pagos a los trabajadores estatales y que las plazas fueran reconocidas por la Secretaría de Educación Pública (SEP) y se diera estabilidad laboral a los trabajadores del sector educativo en el estado.
Tras la información de que las autoridades federales no llegaron al encuentro, los maestros, normalistas y familiares permanecieron en plantón y bloquearon por completo la costera en sus cuatro carriles.
Minutos después de las 3 de la tarde los manifestantes subieron a los autobuses y camionetas en que se transportaban y se trasladaron al aeropuerto de la ciudad, para bloquearlo y presionar a las autoridades.
Ramos Reyes dijo que las autoridades no pueden tratar así a los trabajadores y exigió la minuta firmada que garantice el pago.

Confrontación con antimotines en el aeropuerto

Poco después de las 3:00 de la tarde los cetegistas y los padres se trasladaron al aeropuerto para presionar a las autoridades para que los recibieran, aunque para esa acción ya fueron menos los maestros que participaron.
A unos pocos metros del aeropuerto los esperaban antimotines de la Policía Federal, pero no se bajaron de los autobuses y sólo se acercaron los mandos para dialogar.
A diferencia de la marcha en la Costera, los normalistas y maestros se taparon el rostro y mostraron palos y piedras en las manos.
Los mandos de la Policía Federal se acercaron y fueron recibidos con mentadas de madre y reclamos debido a que recientemente golpearon y amenazaron a estudiantes en la Autopista del Sol.
Los maestros exigieron que se quitaran porque de todas formas iban a pasar, y los mandos policiacos pidieron a los dirigentes de la CETEG que les devolvieran a una mujer policía que habían detenido.
Minutos después los maestros llegaron con la mujer, quien venía llorando y denunció que le quitaron su arma de cargo, su celular y su tablet además de que fue golpeada. Un maestro dijo que investigaría quién tenía esa arma.
Una camioneta cerrada que le fue quitada a la agente fue destrozada totalmente y pintada por los manifestantes.
Durante el avance de la marcha al aeropuerto sobrevoló un helicóptero de la Policía Federal a baja altura. Los manifestantes no entraron de repente, permanecieron una hora y media en las inmediaciones y bloquearon las vías aledañas.
A las 5:50 los maestros, los padres y alumnos ingresaron al aeropuerto y los bloquearon totalmente, y ante las pintas de normalistas tapados del rostro, Ramos Reyes subrayó que era una toma pacífica y quedaba prohibido hacer destrozos. Que lo único que tenían que hacer era resguardar las puertas para que no ingresara nadie.
Hubo momentos de tensión cuando salieron nuevamente mandos de la Policía Federal para pedir que desalojaran el lugar porque ya se estaban cancelando vuelos. Los manifestantes les gritaron que a ellos les quitaron su salario, y eso al gobierno no le preocupaba.
Hubo empujones porque policías grababan el diálogo entre sus jefes y los manifestantes. Los jóvenes encapuchados exigieron que borraran el video porque luego los persiguen y pretendieron quitarle el celular, pero un mando policiaco le dijo que estaban hablando ante muchas cámaras y la situación no pasó a mayores.
Las puertas de acceso del aeropuerto fueron resguardadas desde adentro por antimotines de la Policía Federal. Se cancelaron vuelos del Distrito Federal a Acapulco.