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Responsabiliza la Comunitaria a vecinos de San Jerónimo, Chilapa, de la balacera del domingo

*Intentaron dialogar con el comisario, pero “se inició una ráfaga de disparos en contra de los policías comunitarios, quienes optaron por colocarse pecho a tierra, y resultaron heridos por rozones de bala cuatro de ellos”, explican

Redacción

Ayahualtempa, José Joaquín de Herrera

La Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias- Policía Comunitaria de los Pueblos Fundadores (CRAC-PC-PF) de la Montaña baja señaló como responsables del enfrentamiento del domingo, en la comunidad de San Jerónimo, al comisario Alfonso Castro Calvario, y a los vecinos Antonio Bolaños Calvario y Domingo Orgín Calvario, quienes además se oponen a que la PC opere en la comunidad de Chilapa.
El enfrentamiento dejó cinco muertos, 10 heridos y 25 detenidos, pero posteriormente fueron liberados ocho.
En conferencia de prensa, en la comunidad  de Ayahualtempa, municipio de José Joaquín de Herrera, representantes de la CRAC-PC-PF, adscrita a la Casa de Justicia de El Rincón de Chautla, leyeron un boletín de prensa en el que narraron los hechos ocurridos en la comunidad de San Jerónimo el domingo.
Indicaron que este domingo, a las 11 de la noche arribó una comisión de 30 policías comunitarios acompañados por consejeros y coordinadores, con el propósito de conocer la situación de sus compañeros Rufino Orgín Calvario e Isaac Xochitempa Chautla, consejero de justicia y seguridad respectivamente, y entablar un diálogo para negociar su liberación.
Cuando llegaron al lugar conocido como Dos Vistas, cerca de la comunidad, notaron que la compuerta de acceso tenía candado y estaba custodiada por tres civiles armados quienes, al acercarse los policías comunitarios, huyeron. Además, había postes enterrados y una fila de piedras que obstruían el paso.
Enseguida, continúa el comunicado, escucharon al comisario llamar a los vecinos a congregarse, “para dar el recibimiento que ya tenían planteado”, señalaron. Fue entonces que mujeres con piedra en las manos les impidieron el paso.
Los consejeros de seguridad y justicia que se encontraban detenidos alertaron a la policía comunitaria sobre la presencia de hombres armados en la azotea, el corredor y dentro de la comisaría, donde también se encontraban vecinos de la comunidad con piedras, palos y barretas, en “una actitud predispuesta para el enfrentamiento”, apuntaron.
Cuando le pidieron al comisario entablar un diálogo, “se inició una ráfaga de disparos en contra de los policías comunitarios, quienes optaron por colocarse pecho a tierra, resultando heridos por rozones de bala cuatro de ellos”.
Al ser alcanzados por las balas, cinco personas resultaron muertas, una señora recibió en la boca un disparo que provino del interior de la comisaría, relataron.
Policías comunitarios vieron que mujeres y un vecino de la comunidad agarraron a un comandante y lo hirieron con una navaja en el hombro y la espalda, sin embargo intentaron controlar a quienes seguían disparando.
“Una vez que la situación se controló, los policías comunitarios abrieron la puerta principal de la comisaría, hicieron algunos disparos para derribarla e ingresar para detener a las personas que había en su interior, permitiendo la evacuación de otras que también se encontraban allí”, indica el boletín.
Finalmente detuvieron a 25 personas, pero posteriormente liberaron a ocho, al no encontrarles participación en el enfrentamiento. El resto continúa detenido en Ayahualtempa y sujetos a proceso de investigación, informaron.
De acuerdo con las primeras declaraciones de detenidos y testigos de la comunidad, concluyeron que tanto el comisario como dos pobladores, son los responsables del tiroteo.
“Planearon el enfrentamiento organizando un grupo armado con rifles y escopetas, así como a un grupo de vecinos de la comunidad para emplearlos como primer grupo de choque en contra de los policías comunitarios”, refirieron.
Respecto a un boletín que publica otra versión de los hechos, que responsabiliza a la policía comunitaria del enfrentamiento, la rechazaron.
En el boletín, exigieron al gobierno del estado no interferir “con dolo o mala fe” en las investigaciones, “ni genere un ambiente de confusión o confrontación entre comunidades, lo cual no abonaría a la paz de la región”, advirtieron.
Finalmente, señalaron que “en el fondo de estos hechos se encuentra el control sobre la siembra y cultivo de droga, además de la introducción y venta de armas por parte de estas personas (el comisario y dos vecinos)”.
“Alertamos a las comunidades de la región a no dejarse manipular por ninguno de los grupos de la delincuencia organizada que operan en la zona, en especial de Los Rojos y Los Ardillos, ya que sólo se disputan el control de este territorio sembrando discordia, violencia y terror en  la población”, leyeron.
Invitaron a las comunidades de la región a sumarse a la Policía Comunitaria para defender su territorio ante la violencia generada por la delincuencia organizada.
Recordaron a los gobiernos municipal, estatal y federal que su actuación como policía comunitaria es legal y legítima, que la ley reconoce su función como actos de autoridad.
Finalmente, citaron el artículo 2 y 39 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; la Ley 701 sobre derechos y cultura indígena en el Estado; el Convenio 179 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para sostener que “Somos autoridades comunitarias, exigimos respeto y no aceptamos que autoridad alguna nos acuse irresponsablemente de ser grupos armados ilegales o de tener personas secuestradas”.

Acuerdan reunirse hoy vecinos de San Jerónimo Palantla y policías comunitarios

*Mediarán en el encuentro soldados y policías estatales para destrabar el conflicto que el domingo dejó cinco muertos en una balacera

Luis Daniel Nava

Chilapa

Tras el enfrentamiento armado del domingo en la comisaría de San Jerónimo Palantla, del que resultaron cinco personas muertas, este miércoles acordaron reunirse en la comunidad vecinos, policías comunitarios, soldados del Ejército y policías estatales.
Hasta ayer, continuaban detenidas 19 de las 26 personas detenidas por la Policía Comunitaria el domingo.
La noche del domingo en la comunidad indígena de San Jerónimo, del municipio de Chilapa, cinco personas resultaron muertas (entre ellos una mujer) y 10 heridas luego de que pobladores armados y policías comunitarios de Rincón de Chautla se enfrentaron a balazos en las inmediaciones de la comisaria municipal por la disputa de un terreno y la detención previa de personas de ambos bandos.
Hoy a las 9 de la mañana está programada una reunión entre los pobladores de San Jerónimo y la Policía Comunitaria, en la misma Comisaría donde se dieron las muertes; en ella intervendrán para destrabar el conflicto representantes del Ejército, de las Fuerzas Estatales y de la Policía Ministerial. Hasta anoche no se sabía si participaría algún funcionario del gobierno del estado.
La Policía Comunitaria perteneciente a la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) que integran 12 pueblos de esa zona de Chilapa y otros de Hueycantenango, depende de la Casa de Justicia de los Pueblos Fundadores, con sede en Santa Cruz El Rincón, por lo que mañana se espera la participación de Cirino Placido Valerio y otros representantes de esa organización.

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