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Se documentan ya las observaciones de la ASF a la UAG, responde el rector

Jacob Morales Antonio

El rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Javier Saldaña Almazán, dijo que los señalamientos que hizo la Auditoría Superior de la Federación (ASF) a la universidad están “perfectamente identificados y dónde fue ejercido” el dinero.
Explicó que los nueve trabajadores sin cédula profesional fueron contratados hace más de 25 años y no en su administración.
Ayer en estas páginas se publicó que en la cuenta pública 2013 la UAG generó un probable daño al erario por 3 millones 775 mil 900 pesos y tiene pendiente por aclarar el uso de 711 millones 587 mil 800 pesos, según dictaminó la ASF, por haber pagado salarios a empleados sin cédula profesional, a trabajadores dados de baja o que tienen permiso y licencias sin goce de sueldo, además de que pagó impuestos de años anteriores con recursos del 2013.
En declaraciones por teléfono, Saldaña Almazán aseguró que el destino del dinero está “perfectamente identificado y dónde fue ejercido… todo se está solventando y documentando”.
Argumentó que la falta de reconocimiento de recategorizaciones por parte de la SEP ha obligado a tomar dinero del rubro de gastos de operaciones para el pago de sueldos, e informó que tiene 90 días para solventar las observaciones.
Precisó que los nueve trabajadores a los que se les pagó un total de un millón de pesos 159 mil 900 pesos durante el 2013 y que no tienen cédula profesional, no fueron contratados en su administración y laboran desde hace más de 25 años, e incluso afirmó que su contrato fue a través del sindicato de académicos y algunos están en sus tramites de jubilación.
“Son la gente que se contrataba en aquellos años, donde no se requería la licenciatura –para dar clases- en las preparatorias”, expresó. Dijo que aun no determinan cómo procederá la universidad con los trabajadores pero manifestó que será conforme a derecho.
De los seis trabajadores que pidieron permiso o licencia sin goce de sueldo y de los pagos improcedentes a 20 empleados por incapacidad, manifestó que fueron trabajadores a los que se les tuvo que sustituir en algunas áreas, sin precisar.
Dijo que una vez que termine la auditoría, porque sigue la investigación, la UAG tendrá 90 días hábiles para corroborar las observaciones.
De la falta de aclaración de 629 millones de pesos integrados por diferencias entre las nóminas ordinarias y complementarias y de lo reportado en el 2013, dijo que gran parte del gasto de operación “lo ocupamos en nóminas, hay categorías que no están reconocidas por la federación”.
Saldaña Almazán informó que están pidiendo a la SEP que las absorba para que no vuelvan a tener observaciones por parte de la Auditoria Superior. “Mientras no reconozcan 16 mil horas que no tienen techo presupuestal y mil plazas, entonces seguiremos ocupando el recurso para pagar el salario de los trabajadores”, señaló.
En este contexto dijo que hay tres grandes pasivos en la universidad; 16 mil horas y mil plazas que requieren un monto de casi 700 millones de pesos que la institución no tiene; además de 550 millones de pesos para pagar y reconocer la antigüedad de trabajadores; y mil 500 millones para reconocimientos de jubilados.
Sobre los impuestos que se pagaron de otros años con dinero del 2013, indicó que la unidad tuvo que hacer esas operaciones porque tenía que pagar deudas ante el Fovissste, el ISSSTE y SAT, pero que durante el 2014 “ya no pasó”.
La UAG también tiene pendiente por aclarar 82 millones 788 mil 620 pesos por registrar conceptos en gastos que corresponden a ejercicios fiscales del 2009 y 2010.

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