Jobamex los despidió por protestar, denuncian trabajadores del hospital general de la capital

Luego de que el pasado viernes 100 trabajadores de seguridad y de limpieza de la empresa Jobamex que laboraban en el hospital general Raymundo Abarca Alarcón, en Tierras Prietas, pararon labores, este domingo el dueño de la empresa, Joaquín Badillo Escamilla, les dijo que fueron despedidos por protestar.
Los empleados de Jobamex exigieron el viernes en su sitio de trabajo sus prestaciones laborales y el cumplimiento del pliego petitorio que entregaron a la empresa el 10 de febrero. Además informaron que de los 100 trabajadores sólo renunciarían 60, y los otros 40 seguirán trabajando en las misma condiciones laborales.
Uno de los trabajadores, quien quiso omitir su nombre por temor a represalias, expresó que no cree que vayan a presentar una denuncia laboral en contra de la empresa porque “nos han amenazado de muerte, nos dijeron que si continuábamos molestando irían por la cabeza, es decir que nos iban a levantar, y otro de los motivos por los cuales no podemos demandar es porque antes de entrar a trabajar firmamos un pagaré en blanco, que legalmente nos perjudica”, explicó.
Dijo que, este domingo uno de sus compañeros recibió una llamada del propio Badillo Escamilla, quien les anunció que todos los que protestaron estaban despedidos y que no les iban a pagar. Badillo es presidente de la Coparmex en Acapulco y busca ser postulado a alcalde.
Otro ex empleado comentó que supieron que estaban despedidos porque al llegar a sus trabajos vieron que ya había otros empleados laborando. Ahí, la encargada de recursos humanos de la empresa, les informó que este lunes a las 12 del día debería de ir a la Junta local de Conciliación y Arbitraje en Chilpancingo, para firmar su renuncia y para que les entregarán sus documentos.
Un trabajador dijo: “Los encargados de la empresa nos dijeron que si queríamos regresar con las misma carencias, que lo hiciéramos, y si no que nos retiráramos, algunos si se regresaron porque tienen necesidad, pero no sabemos si los recontrataron o no”.
Los 15 trabajadores que acudieron a la dependencia, dijeron que es poco lo que les pagan, que no cuentan con seguro médico, y consideraron que es peligroso trabajar en el hospital porque hay muchas infecciones de las que se pueden contagiar, “uno está enfermo y luego sin seguro, aparte, si faltas te descuentan 500 pesos, y nosotros por día ganamos 133 pesos, no nos conviene estar ahí”.
Acudieron a la Junta de Conciliación para que los asesoraran legalmente, con el procurador de Trabajo y Previsión Social, Martín Roberto Ramírez Ruiz, quien les dijo que no interpusieran una demanda a la empresa, porque ellos –los ex empleados– firmaron un pagaré en blanco, lo que les perjudica, ya que al denunciar, la empresa puede hacer una contra demanda, es decir todo estaría a su favor, los únicos perjudicados serían los empleados.
Informó que en el área les brindaron asesoría legal porque son la primera instancia a la que deben de acudir, quien informó a los trabajadores que deberían de analizar su situación, puesto que el error que cometieron fue haber firmado un pagaré en blanco.
“Ellos cometieron ese grave error, y no es la primera vez que ocurre esto por parte de esta empresa (Jobamex), ya que hemos tenido más casos, por lo que nosotros les dijimos que estaban en su derecho de proceder, pero antes les dimos a conocer los pros y los contras. Los trabajadores ya no quisieron continuar con la denuncia”, añadió Ramírez Ruiz.
A la 1:50 de la tarde, la encargada de recursos humanos de la empresa les proporcionó la carta de renuncia; sin embargo, los inconformes no quisieron firmar porque lo que contenía el escrito no era lo que habían recibido.
En el documento decía que habían tenido vacaciones, pago de horas extras, seguro médico y prestaciones de ley, lo que ocasionó que los ex trabajadores se molestaran, se rehusaron a firmar y se retiraron.
Comentaron que hoy volverán a reunirse en las oficinas de la Junta local de Conciliación y Arbitraje para determinar qué es lo que harán.