Resguardan en Iguala 400 policías la ceremonia por el 194 aniversario de la bandera nacional

*Pide el gobernador Rogelio Ortega apoyo federal para “resarcir la tragedia” causada por la desaparición de los 43 normalistas. No participa el Ejército en el desfile. Rosario Robles sólo asistió en representación del presidente Peña Nieto al izamiento en el cerro del Tehuehue

Alejandro Guerrero

Iguala

En el contexto de la conmemoración 194 de la confección de la Bandera Nacional, el gobernador Rogelio Ortega pidió al gobierno federal ayuda y atención especial para Iguala, para “resarcir la tragedia del año pasado”.
Lo anterior lo expresó ante la representante en el acto, la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles.
La mañana de ayer en el cerro del Tehuehue, Rosario Robles, el gobernador Rogelio Ortega, la magistrada del Tribunal Superior de justicia, Lambertina Galeana, y mandos militares, encabezaron la ceremonia del 194 aniversario de la creación de la Bandera Nacional, en una zona completamente blindada por más de 400 policías antimotines de las policías militar, federal y estatal.
En este acto oficial, la representante del presidente Enrique Peña Nieto no dijo ningún discurso ni dio mensaje alguno, y al término del acto protocolario salió resguardada por militares en una camioneta que la llevó hasta el helicóptero en el que llegó a la cima del Tehuehue, para evitar preguntas de la prensa.
El acto dio inicio cerca de las 9:15 de la mañana con el izamiento de la bandera y la entonación del Himno Nacional, con la banda de guerra del 27 Batallón de Infantería.
El comandante de la 35 Zona Militar, Raúl Gámez Segovia, fue el encargado de dar las palabras alusivas al aniversario, refrendando el compromiso de lealtad a la bandera.
Pidió: “no permitamos que nada ni nadie nos distraiga en la gran labor que tenemos de construir un México mejor, seguro estoy que unidos lo lograremos”.
Lo anterior en aparente referencia al señalamiento que hay de los padres de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, de que el Ejército participó en la detención y desaparición de los 43 estudiantes.
Posteriormente la alumna Araiza Monserrat Mena declamó la poesía “Cuna de Honor”, de la poeta Catalina Pastrana.
Asimismo, la escolta con bandera de Guerrero del 27 Batallón de Infantería hizo un recorrido frente a las tropas formadas, para posteriormente ser incinerada la vieja Bandera de Guerra por la titular de la Sedesol, tras ser reemplazada por una nueva.
Rosario Robles abanderó a las escoltas de instituciones de servicio, escuelas de nivel básico, medio superior y superior, y soldados del 27 batallón realizaron un disparo de salva.

Pide el gobernador obras para el municipio

En su discurso, Rogelio Ortega pidió al gobierno federal a través de Rosario Robles, apoyar con inversión a Iguala en el último año de gestión “para resarcir la tragedia”, sin mencionar explícitamente el ataque de policías y sicarios a normalistas de Ayotzi-napa y la desaparición de 43 de ellos.
Dijo a Robles Berlanga que “Iguala tiene pasado, presente y futuro, Iguala requiere por la tragedia del año pasado especial atención, apoyar en esta recta final a nuestro presidente interino Silviano Mendiola para cerrar con broche de oro y reconstruir el tejido social de Iguala, la armonía desde Iguala para transitar en la ruta de la paz democrática”.
Informó que comuneros cercanos a Iguala donaron 32 hectáreas de terreno con la idea de establecer un centro de estudios avanzados, de investigación, tecnología e innovación para trabajar líneas de investigación en biotecnología y con la posibilidad reconstruir el sueño de la Ciudad Industrial.
Propuso la construcción de una planta para la fabricación de trenes de alta velocidad con energías alternativas en la zona de la Ciudad Industrial de Iguala, cerca de donde ocurrieron los hechos del 26 y 27 de septiembre.
Dijo que esos son dos proyectos que “habrán de contribuir a resarcir la tragedia del año pasado y contribuir desde Iguala en el lanzamiento del proyecto de armonía que se necesita hoy en Guerrero, el proyecto de la aplicación de la ley de manera ejemplar para los autores intelectuales y materiales de la tragedia de Iguala, para la restitución del pleno Estado de derecho”.
Ortega Martínez llamó a “aprovechar” la oportunidad que tenemos los guerrerenses para acudir a las urnas “en paz” para emitir nuestro voto libre “y que nunca más político alguno, vuelva a mancillar el honor de Guerrero, el honor de Iguala”.
Dijo que “desde aquí, desde Iguala, donde inició esa profunda crisis política y social, para que crucemos en los próximos años en la ruta de la gobernabilidad democrática con el apoyo decidido del presidente Enrique Peña Nieto como lo ha demostrado y lo seguirá demostrando, nuestra gratitud al presidente de los Estados Unidos Mexicanos, desde aquí, desde la cuna de la bandera”.
Al término del acto los mandos militares y Rosario Robles, se retiraron en helicóptero y ya no bajaron al centro de la ciudad a presenciar el desfile en el que participaron escuelas secundarias, de nivel medio superior y superior.
Al acto del cerro del Tehuehue también asistieron el comandante de la Novena Región Militar, Alejandro Saavedra Hernández; el jefe de la Octava Región Naval, Pedro Franyuti Bustillos; el diputado local, Roger Arellano Sotelo, en representación del Poder Legislativo; el secretario de Gobierno, David Cienfuegos Salgado; el alcalde interino, Silviano Mendiola Pérez, y el rector de la UAG, Javier Saldaña.

La seguridad

Desde antes del inicio del acto protocolario, diferentes grupos de unos 50 efectivos de la Policía Federal con equipo antimotines se plantaron en vallas en los cuatro diferentes accesos al cerro del Tehuehue para evitar el paso a automovilistas y sólo dar acceso a vehículos oficiales.
Por una calle alterna se dio paso a la prensa y otros invitados. La zona estaba completamente resguardada por policías militares, federales y estatales, desde la parte baja del cerro.
En al menos cinco puntos, grupos de antimotines de la policía militar y federal estaban instalados ante la posibilidad de protestas en esta zona, seguridad que no se había visto en los últimos años en esta conmemoración.
A diferencia de años anteriores, en que el discurso oficial del desfile del Día de la Bandera lo daba algún representante del gobierno federal, en éste lo dio el gobernador.
También por primera vez efectivos del Ejército no encabezaron este desfile que años anteriores había sido cívico-militar y que representaban el principal atractivo para la población
La inasistencia de soldados al desfile y en la organización y se-guridad del mismo, así como de mandos militares en la mesa de honor, se dio a la par de pintas hechas la mañana del lunes en la sede del Ayuntamiento, en las que se pidió “no militares en el desfile”, y de las acusaciones de que el Ejército estaría implicado en la desaparición de los 43 normalistas.
En su discurso improvisado, el gobernador se refirió al rezago histórico que tiene Guerrero, a la vocación comercial de Iguala y la necesidad de apoyarla; de lograr un crecimiento económico para el estado y evitar la migración y que los jóvenes no se involucren en actividades ilícitas.
Dijo que nunca más debe darse otro caso como el de Iguala, en referencia a lo sucedido el 26 y 27 de septiembre pasados.
Conminó a los asistentes a acudir a las unas en las elecciones del 7 de junio, y que los partidos deben elegir a sus mejores hombres y mujeres y evitar que suceda lo de Iguala, donde hubo autoridades involucradas en el crimen organizado.
Reiteró lo de la instalación de un centro de investigación que permitirá que Iguala tenga otras opciones de desarrollo al aprovechar la presencia de investigadoras de alto nivel.
Durante su participación, debido al retraso del desfile, hubo momentos de rechiflas, lo que no impidió que Ortega continuara con su discurso improvisado.
Entre los contingentes que participaron, maestros de la preparatoria 32 de la UAG se colocaron en la manga derecha de su uniforme un listón blanco y en éste el número 43 en alusión a los jóvenes de la normal de Ayotzinapa desaparecidos en esta ciudad hace cinco meses.
En el desfile participaron 21 instituciones educativas, y las asociaciones de charros y patrullas de la policía del estado.
En el templete que sería para los ediles y algunos funcionarios, sólo pudieron estar los regidores Juana Álvarez, Nicolás Guerrero, Soledad Mastache y Martha Rojas.
Otros ya no pudieron tener asiento porque ya estaban ocupados por familiares y asistentes de la esposa del alcalde, Patricia Rojas.
Estuvo el rector Javier Saldaña Almazán. Es, en muchos años, el primer rector de la UAG que asiste a un acto del 24 de febrero.
Durante el desfile se corrió la versión de que habían llegado siete autobuses de normalistas. Nunca llegaron al Zócalo durante el desfile. (Con información de Eduardo Albarrán)