Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Marchan más de mil 500 en Tlapa en la novena acción por Ayotzinapa

“El gobierno sabe dónde están nuestros hijos y no quiere decirnos, lo que nos ha informado la Procuraduría General son puras mentiras”, dice el padre de uno de los normalistas desaparecidos

Redacción

Tlapa

En el contexto de la novena acción global por Ayotzinapa, marcharon más de mil 500 maestros, estudiantes y ciudadanos por las calles de la ciudad, para exigir la presentación con vida de los 43 estudiantes, a cinco meses de su desaparición forzada en Iguala y en repudio al desalojo violento que sufrieron los maestros en Acapulco.
El contingente salió a las 11 y media de la mañana, del mercado Nuevo Horizonte, en la entrada sobre la carretera Tlapa-Chilapa.
Durante la marcha, el grupo de avanzada bajó las lonas de la propaganda política, como la de Luis Walton Aburto, candidato a la gubernatura por el Partido del Movimiento Ciudadano, que se encontraba en un espectacular.
Durante el recorrido se oyó: “Ayotzi vive, la lucha sigue y sigue”, “vivos se los llevaron, vivos los queremos” y “urgente que renuncie el presidente”.
Participaron integrantes del Movimiento Popular Guerrerense, Policía Comunitaria de Olinalá, Coordinadora Estatal de Trabadores de la Educación en Guerrero (CETEG), Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), Escuela Normal Regional, Preparatoria 11, CBTIS y Instituto Tecnológico Superior de La Montaña.
Durante el mitin, que inició como a la 1 de la tarde, participó Eleuterio Ortega Carlos, padre de Mauricio Ortega Valerio, uno de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala.
Carlos Ortega aseguró: “El gobierno sabe dónde están nuestros hijos y no quiere decirnos, lo que nos ha informado la Procuraduría General son puras mentiras”. Recordó que él llegó el 27 de septiembre a la escuela de Ayotzinapa, porque estaba muy preocupado por su hijo y ahí ha permanecido durante este tiempo.
Invitó a la gente a que se una a la lucha, porque para los pobres y campesinos no hay justicia.
Una estudiante de la normal regional recalcó que el gobierno ha demostrado su incapacidad de resolver los problemas sociales, porque en el país y en el estado cada día aumentan las desapariciones, secuestros, asesinatos y represiones a los luchadores sociales.
Preguntó que a quién se debe recurrir, si las autoridades están coludidas con los narcotraficantes, y la opción es que el pueblo sea quien elija a sus gobernantes mediante los usos y costumbre, como lo hacían antes.
Integrantes de la Policía Comunitaria de Olinalá denunciaron que hasta el momento el Ejército los sigue hostigando, porque no permite que ellos realicen sus rondines, porque luego empieza con sus retenes de revisión.
Dijo que Nestora se encuentra detenida porque se metió con el síndico municipal, Armando Patrón, a quien lo detuvieron por abigeato y ahora es quien acusa a Nestora por secuestro.
Mencionó que llevaba saludos de Nestora para todos, que “no se va a quebrantar, va estar resistiendo desde donde está y que no desistamos”.
Un maestro de la CETEG condenó los hechos ocurridos el 24 en Acapulco, dijo que el gobierno opresor desalojó violentamente a sus compañeros y recriminó que los abusos sexuales que sufrieron cuatro maestras, aseguró que 500 de ellos fueron heridos, 12 corren el riesgo de perder la vida y hay desaparecidos.
Por el asesinato del maestro Claudio, pidieron un minuto de aplausos y toda la vida de lucha al ser un ejemplo a seguir.
Un vecino de la comunidad de Tlaquilzinapa enfatizó que ya viene los tiempos electorales y “a los candidatos y políticos se la vamos a cobrar, cuando lleguen a nuestros pueblos ahí los vamos a atrapar, ahí los vamos a estar esperando”.
Coincidieron que no permitirán elecciones, porque ellos no eligen a los candidatos sólo acuden a votar, al menos que ellos elijan a sus gobernantes por usos y costumbres, sólo así habrá elecciones y que están trabajando para la creación de los consejos municipales.
La actividad cerró cerca de las 3 de la tarde, con la entonación del himno nacional e izamiento a la bandera.

468 ad