Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Se queja funcionaria de la Secultura de la cobertura dada a las Caravanas Culturales

Señor director:

Reciba como siempre mi reconocimiento a su labor periodística en el estado de Guerrero, misma que ha contribuido a formar criterios inobjetables de cómo debe ser el ejercicio del poder público, del quehacer político, y del desarrollo social y cultural de nuestra entidad y que ha influido de manera considerable a innumerables generaciones, entre las que me cuento.
Sin duda, la línea editorial de informar siempre con objetividad a sus lectores, lo ha mantenido como uno de los diarios con más prestigio y credibilidad, muy por encima de otros medios que no se toman el tiempo de verificar la información o que, sin descaro alguno, tergiversan el hecho noticioso. Eso ha marcado la diferencia. Lo reconocemos, aplaudimos y alentamos.
Por eso me extraña sobremanera la cobertura y la información que maneja el periódico en el evento de Las Caravanas Culturales por la paz, realizada el viernes 27 de febrero en el municipio de Arcelia y no como lo consignan sus corresponsales Alejandro Guerrero e Israel Flores, quienes informan a los lectores de El Sur que “de última hora el acto se cambió a Tlapehuala, por temor a disturbios con los maestros”, y sigo con la admiración al leer la supuesta llamada realizada a Taurino Vázquez, alcalde de Arcelia y de que el equipo del  DIF “pernoctó en Ciudad Altamirano”, cuando desde el jueves, tanto el equipo del DIF como el de las Caravanas, llegó a Arcelia y no se han movido de dicho municipio.
Y para no perder el sentido reiterativo de mi admiración: “Algunos no llegaron a tiempo por la confusión de la sede. El acto de entrega fue simbólica y rápida”. Nada más lejos de lo que en verdad ocurrió. Las caravanas culturales por la paz se realizaron en el Centro Cultural El Tecolote, desde las 11 de la mañana hasta las 10 de la noche, en donde se otorgaron los servicios comunitarios del DIF y se realizaron las actividades culturales previamente programadas.
En los momentos en que redacto esta carta, estamos en el zócalo de Arcelia en donde se están llevando a cabo los talleres de pintura, teatro, comic y se están otorgando los servicios ciudadanos del DIF Guerrero. Hemos sido informados que se dirigen maestros a tratar de impedir que se realicen las actividades. Aquí estaremos, pues hasta ahorita, que nosotros sepamos, la cultura no ha asesinado a nadie.
Reciba como siempre mi reconocimiento a su labor diaria de informar a los guerrerenses.

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