Denuncian policías municipales de Tamaulipas presión para dejar su cargo

Policías municipales de Tamaulipas que tienen un año acuartelados y desarmados esperando presentar las pruebas de confianza de las autoridades estatales aseguran haber recibido presiones de parte de mandos superiores para dejar su cargo.
En mayo del 2011, el Ejército Mexicano tomó el control de las corporaciones policiacas de los municipios, mientras el Gobierno estatal ordenó el acuartelamiento de los agentes para someterlos a exámenes de confianza a fin de integrar la nueva Policía Estatal.
La medida provocó que cientos de uniformados abandonaran las filas de las policías municipales, sin embargo, otros elementos con años de servicio continúan a la espera de las evaluaciones para volver a su trabajo.
Un agente con 15 años en la Policía Municipal de esta capital, que pidió omitir su nombre, reveló que él junto con otros 28 compañeros, han tenido que soportar tortura psicológica y el acosos de superiores.
“Vienen cada rato (los comandantes) a pedirnos que renunciemos”, aseguró el oficial.
Los jefes policiacos, dijo, nos exigen la renuncia con el pretexto de que la Policía Municipal desaparecerá y no habrá otra alternativa más que irse sin liquidación.
“Nos dicen que es la última oportunidad que tenemos para recibir algo de dinero, si no lo hacemos nos dejarán en la calle”, expresa el policía entrevistado en las instalaciones de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
En Ciudad Madero, otro agente que pidió el anonimato, señaló que ha pensado en renunciar, pero los 10 años de servicio como policía lo detienen, ya que debe mantener a su esposa y dos hijos.
“A nosotros nos ponen a limpiar las plazas, la playa, yo no digo que eso sea malo, por el contrario, a mí no me humilla, me hace sentir útil”, añadió.
“Yo quiero que las pruebas terminen, que se nos diga qué va a pasar, si me voy a quedar o no, tal vez estoy perdiendo el tiempo en el que ya debiera buscar chamba”.
En la Policía de Matamoros, un oficial entrevistado señaló que además de la evaluación, también esperan el aumento de 700 pesos que les prometieron y que no han recibido.
“Nosotros no pedimos estar acuartelados, vivimos de nuestro sueldo, todo ha subido y el aumento que nos prometieron lo necesitamos”, señaló.

La desbandada

La llegada de los militares a las corporaciones municipales provocó una ola de renuncias de agentes.
Graciela Tovar Trejo, presidenta de la Comisión de Seguridad Pública en Tampico, precisó que el 9 por ciento de los 774 policías que integraban la Policía Metropolitana, que abarca Tampico, Ciudad Madero y Altamira, dejaron sus cargos.
“Hemos tenido bajas voluntarias, despidos por baja productividad, jubilación”, explicó.
Gabriel López Ordaz, titular de Seguridad Pública en Matamoros, informó que de los 640 oficiales que tenían en el 2011, 35 renunciaron y 9 solicitaron su pensión por incapacidad permanente.