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Es un derecho del Estado mexicano pedir aclaración sobre los informes, dice la ONU

*Nuestro papel aquí es contribuir a las soluciones y no contribuir a decir que el problema existe y que jamás será superado”, destaca Marcia de Castro, coordinadora residente de la organización internacional en el país

Agencia Reforma

Ciudad de México

El Gobierno federal está en su derecho de exigir aclaraciones a los mecanismos de Naciones Unidas que han cuestionado su labor en la promoción y defensa de los derechos humanos, aseguró Marcia de Castro, coordinadora residente de la ONU en México.
Afirmó que existe preocupación por la inseguridad y la violencia que vive el país, sin embargo, advirtió que el propósito de las agencias de Naciones Unidas en México era contribuir a resolver ésos y otros problemas.
“Las agencias de la ONU en México no son una extensión directa de lo que pasa en Ginebra o en estos foros. Nuestro papel aquí es contribuir a las soluciones y no contribuir a decir que el problema existe y que jamás será superado”, puntualizó.
Expresó que el rol de la ONU en México no es sustituir aquellos espacios donde el Estado no está, sino influenciar las políticas públicas, propiciar diálogos y construir puentes.
“Quiero dejar claro, como representante de la ONU, que por supuesto estamos siguiendo muy cercanamente estos debates, que queremos que cada vez más las prioridades del Gobierno, los planes nacionales y transversales, puedan incidir en la reducción de la inseguridad y la violencia, que puedan resultar en políticas públicas más incluyentes, más focalizadas en atender las áreas de este país donde hay más carencias”, señaló.
En entrevista con Reforma la funcionaria de origen brasileño advirtió que los recientes señalamientos no se hubieran dado sin la apertura del Gobierno al escrutinio internacional.
Destacó que además de haber ratificado todos los tratados internacionales de los derechos humanos, de 2011 a la fecha, el Gobierno de México presentó cinco informes nacionales a diferentes Comités de la ONU, preparó informes a dos Grupos de Trabajo y recibió a seis relatores especiales.
“Creo que es perfectamente correcto y es el derecho del Estado mexicano de pedir aclaración y de poder entender exactamente de dónde, cómo llegaron a estas conclusiones”, manifestó.
En febrero, el Comité contra la Desaparición Forzada de la ONU presentó sus observaciones finales sobre el informe presentado por el Estado mexicano, en las que alertó sobre un contexto en que se dan desapariciones generalizadas en gran parte del País, a lo que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) respondió que los señalamientos eran inexactos.
La semana pasada, el Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, incluyó a México dentro de un grupo de países de preocupación en materia de derechos humanos, advirtió que la desaparición de los 43 normalistas no era un caso aislado y dijo que México era un cruel ejemplo de cómo la violencia criminal puede amenazar ganancias democráticas.
Este lunes, el Relator Especial contra la Tortura, Juan E. Méndez, reiteró que la tortura era una práctica generalizada en el País, calificativo que fue rechazado por la Cancillería.
De Castro consideró que el número de recomendaciones y señalamientos derivan de un conjunto de informaciones importante presentado, tanto por el Estado como por organizaciones de la sociedad civil.
Dijo que estas recomendaciones son una invitación al público en general para conocer más de los mecanismos de derechos humanos que tiene la ONU, así como una oportunidad para profundizar el diálogo y renovar los compromisos.

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