Exigen esposas de presos políticos al gobernador que libere a sus parejas y deje de engañarlas

*El peor delito de nuestros maridos es pertenecer a la CRAC”, dice la cónyuge de Arturo Campos en el mitin celebrado al finalizar la marcha del viernes. “Ya es tiempo que se entere todo mundo de cómo nosotros estamos sufriendo con nuestros hijos, a veces no tenemos ni qué darles de comer… y el gobernador muy chingón allá arriba”, manifestó

Karina Contreras

El viernes, luego de la marcha para exigir la liberación de los presos políticos del estado convocada por la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero, el Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Presa La Parota, el Movimiento Popular Guerrerense y padres de los 43 normalistas detenidos-desaparecidos de Ayotzinapa, en un mitin que se llevó a cabo frente al Centro Internacional Acapulco, Agustina García, esposa del promotor de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), de la Casa de Justicia de El Paraíso, Arturo Campos Herrera, llorando acusó al gobierno de encarcelar a personas inocentes por el delito de manifestarse.
Agustina García exigió al gobernador Rogelio Ortega Martínez la libertad de su esposo y que deje de engañar a las parejas de los presos políticos.
La esposa del luchador social preguntó: “¿acaso no hay leyes para indígenas? ¿No hay respuesta para los indígenas?, me pongo a pensar ¿hasta cuándo van a voltear a ver a los indígenas? ¿Cómo están sufriendo los niños?, sin comer, sin estudios y encarcelando a los luchadores sociales”.
Acompañada de mujeres que también piden la libertad de sus parejas, en un discurso emotivo, donde varias veces se le quebró la voz, Agustina García exigió al gobernador Rogelio Ortega: “que libere a nuestros maridos, porque no es justo que los tengan encerrados a ellos, que son inocentes, y los delincuentes anden fuera”. Preguntó, “¿siempre el gobierno va seguir torturándonos físicamente, psicológicamente? Esto ya estuvo bueno, yo soy indígena, habló mixteco, pero tampoco voy a callar, ya es tiempo de abrir los ojos, ya es tiempo de despertar, compañeros. No es justo que todavía no nos dé respuesta el gobernador, en pocas palabras, nos está haciendo pendejas”.
Subrayó, “ya es tiempo que se entere todo mundo de cómo nosotros estamos sufriendo con nuestros hijos, a veces no tenemos ni que darles de comer… y el gobernador muy chingón allá arriba sentado disfrutando la vida, y a los pobres no les hacen caso, ¿por qué no hay justicia para los pobres?… en La Montaña tenemos que bajar caminando, sin recursos económicos, ¿hasta cuándo nos van a tener así?, ¿hasta cuándo, señores? Yo pido justicia”.
Subrayó que está llena de coraje, de rabia y manifestó que entendía a los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, “ese gobernador no tiene calidad humana, de estar jugando con los sentimientos de los demás, a mí me duele porque lo estoy viviendo, un año tres meses sin mi compañero, trabajar día tras día para dar de comer a mis hijos, y el gobierno no da respuesta… hago responsable al gobernador de cualquier cosa que pase, a mis compañeras y compañeros, o a nuestros hijos”.
Exigió respeto a los derechos que tienen como indígenas y dijo: “el peor delito de nuestros maridos es pertenecer a la CRAC, el peor delito es abrir los ojos de los demás, es enseñar a las personas cómo vivir bien, que ya no haya asesinatos, que no haya violaciones, que no haya robo, y el coraje del gobierno es que no pudo con la delincuencia organizada, y el proyecto de la CRAC, gracias a Dios, en nuestras zonas bajó la delincuencia, y gracias a nuestros compañeros, y ahora están encarcelados en reclusorios de máxima seguridad”.
Agregó: “Gonzalo Molina, Nestora Salgado y mi esposo Arturo Campos, y Marco Antonio (Suástegui) no merecen estar en esos lugares, esos lugares son para delincuentes no para luchadores sociales”. Convocó a los presentes a que abran los ojos y no dejen que los sigan pisoteando, “como si fuéramos basura, todos tenemos el mismo derecho”.
Por su lado, la esposa de Ángel García García, también policía comunitario de El Paraíso preso, Minerva Donaciano de Jesús pidió que liberen a su marido y los demás presos políticos, y se quejó de que siempre les han mentido; “ya queremos hechos no palabras, porque el que yo hable mixteco, porque me vista como indígena no tienen porqué no hacerme caso y que no tengan en cuenta que tengo el mismo derecho que ellos, a pesar de que soy mixteca. No me da vergüenza decir lo que he sufrido con mis hijos”, acusó.
Agregó que también ha sufrido porque ha dejado a su hijo para bajar caminado en las noches a “buscar la manera de que mi esposo tenga la libertad; me da mucho coraje saber que ellos estén gozando de todos los privilegios y nosotros en la misma miseria”.
Finalmente dijo: “ya queremos que estén aquí porque ellos no son delincuentes, al contrario, son los que defienden a su pueblo, ellos tuvieron la necesidad de unirse y platicar cómo iban a defender a su pueblo porque había mucha delincuencia organizada mientras que el gobierno nunca tuvo ese interés de defender a los pueblos, de cuidarlos, y ahora ellos le echan la culpa a nuestros esposos, que son delincuentes, que son secuestradores, pero ellos no lo son, nosotros tenemos casas de lámina, pueden ir a la comunidad y ver por su propio ojos, no tenemos nada; fabrican y fabrican más delitos a nuestros esposos”.
Por su parte, Cleotilde Salgado, hermana de Nestora Salgado, manifestó que la coordinadora de la Policía Comunitaria de Olinalá está muy mal de salud y la tienen en un cuarto oscuro con una ventana muy pequeña, no le dan el medicamento que necesita, “por eso le pido ayuda a todos para que le den su libertad a Nestora y a todos los presos políticos, no es justo que los delincuentes anden en libertad paseándose y los que deben estar libres apoyando a su pueblo estén presos, no es justo”.
Pidió al gobierno que se “toque el corazón y vuelva a ver a esos presos que están sufriendo sin ninguna culpa, sin ser culpables” y denuncio, que el “corrupto gobierno de Olinalá ha puesto tantas demandas a nuestros compañeros comunitarios, hay algunos que tienen siete demandas, son unos 85 y no es justo que toda la gente que se alzó para defender a su pueblo ahora éste sufriendo la zozobra de que en cualquier momento la van a detener y hay delitos que ni siquiera alcanzan fianza”. También le recordó al gobernador que se comprometió a trasladar a los presos a cárceles del estado, y que ahora debe cumplir su palabra.