Se plantan en la tienda Sam’s de la capital beneficiarios del comedor popular de la colonia Indeco; solicitan alimentos

*Adultos mayores y madres solteras piden a los encargados del autoservicio que en lugar de tirar los productos que están por caducar, se los den a ellos

María Avilez

Chilpancingo

Unos 150 adultos mayores y madres solteras se plantaron en la puerta principal de la tienda Sam’s Club de la capital, en demanda de que ésta y otras empresas les donen alimentos que están apunto de caducar para el comedor comunitario de la colonia Indeco.
Cerca de las 11 de la mañana, adultos mayores y madres solteras llegaron a la tienda comercial, unos se colocaron en la puerta principal de la tienda Sam’s Club, y otros en puertas de acceso de los empleados, cuando los encargados se dieron cuenta de esta acción, cerraron la tienda con los clientes dentro.
De acuerdo con la organización Raymundo Carachure Lemus, estos comercios tiran los alimentos días antes de que caduquen, por lo que hace dos días acudieron a pedir que los donen a la casa de ancianos y al comedor comunitario que abrió la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), pero al no obtener respuesta, se plantaron este lunes y tomaron las instalaciones de una de ellos, Sam’s Club.
La dirigente de la organización, Lucía Nogueda Arellano dijo: “venimos hace dos días a pedir de buena manera para que nos sedan los productos que están por caducar, porque ellos los tiran a la basura, como pan, frijol, frutas, cereales y todo lo que nosotros no tenemos en el comedor”.
Explicó que la organización solicitó a Sedesol un comedor comunitario, pero ellos no surten los alimentos que requieren los usuarios, principalmente madres solteras y adultos mayores, por lo que ellos los tienen que comprar; consideró que las cadenas comerciales “deberían tocarse el corazón”, y en lugar de tirar los productos mejor se los regalen.
Nogueda Arellano expresó que si los encargados de la tienda Sam’s Club no les proporcionan los alimentos bloquearán la entrada, iniciarán una huelga de hambre y no permitirán que los camiones descarguen los productos.
Comentó que ya han solicitado apoyo del gobernador Rogelio Ortega Martínez, pero que nunca los ha atendido.
El comedor se encuentra ubicado en avenida Zihuatanejo, número 3, colonia Indeco; ahí sirven dos veces al día comida para 150 personas; la Sedesol les surte despensas cada mes, y ahí los mismos encargados del comedor preparan los alimentos.
Alrededor de las 11:40 de la mañana, la gerente general de Sam’s Club, Carmen Carrillo García solicitó a Nogueda Arellano un diálogo para conocer sus demandas, además solicitaron a los inconformes que se retiraran de la entrada principal.
Los inconformes liberaron la entrada; se pudo ver que salieron algunos compradores que habían quedado encerrados cuando la tienda cerró ante la llegada de los manifestantes, y la tienda comenzó a funcionar normalmente.
Poco antes de las 12 del día, al lugar llegaron cuatro patrullas de policías estatales, uno de los encargados se dirigió a Nogueda Arellano y preguntó por el motivo de la obstrucción de la entrada a la tienda, la dirigente de la organización explicó: “nosotros venimos en son de paz y venimos de buena manera para solicitar productos”, no queremos confrontación.
Los policías de la Fuerza Estatal resguardaron la tienda para que los manifestantes no volvieran a obstruir la entrada principal.
A las 12:40 del día Nogueda Arellano solicitó a los inconformes que se retirarán del lugar, debido a que fue un requerimiento que pidió la gerente general de tienda porque argumentó que los inconformes ahuyentaban a los clientes.
Al terminar el diálogo, la dirigente informó que la gerente requirió todos los papeles del comedor para saber si se encontraban en regla, Nogueda Arellano explicó que sólo le hizo falta un documento, por lo que hoy acudirá a Hacienda y lo solicitará.
Argumentó que si Hacienda no les da el papel, o si la tienda Sam’s Club continúa poniéndoles pretexto, bloquearán la entrada de manera indefinida, y otras establecimientos comerciales de la capital, porque “no es correcto que se desperdicien los alimentos” que ellos necesitan.