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Cumplen seis meses sin agua seis colonias de Chilpancingo; sicarios les cortaron el servicio, denuncian

Zacarías Cervantes
Chilpancingo
Vecinos de seis colonias del poniente de la ciudad denunciaron que grupos armados relacionados con el narcotráfico les cortaron el agua desde hace seis meses y acusaron a las autoridades municipales de estar coludidas con esos grupos mientras que más de 2 mil familias tienen que comprar el agua con pipas para evitar conflictos con esos grupos delincuenciales.
Ayer habitantes de las colonias La Pradera, Independencia, Eduardo Neri, Lomas del Poniente, Las Palmas y Plan de Ayala se reunieron ante en el teatro hundido de La Alameda Granados Maldonado para analizar la situacio?n y determinaron pedir la intervención del gobernador Ángel Aguirre Rivero para que revise el caso.
De lo contrario acordaron realizar movilizaciones para exigir a las autoridades federales y estatales que apliquen la ley al grupo de ejidatarios que de manera ilegal se apoderaron del sistema de agua denominado Peña Rajada dejándolos sin este servicio en sus tomas domiciliarias desde hace seis meses.
En la reunión, los asistentes acusaron al alcalde interino de esta capital, Tulio Pérez Calvo de proteger a ese grupo de ejidatarios de La Ciénega para que con esa agua hagan su negocio personal.
José Inocencio Serrano, señaló que el edil no puede ejercer su autoridad contra los ejidatarios porque militan en las filas del PRI y en esta campaña electoral representan votos para los candidatos priístas.
En su intervención, Serrano Guerra recordó que en 1987, tras una lucha en las calles, lograron que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el gobierno del estado firmaran un acuerdo en donde a los habitantes de estas seis colonias del poniente de esta ciudad se les otorga la concesión de este proyecto de agua de Peña Rajada.
Sin embargo, aparecieron un grupo de ejidatarios que por poseer esas tierras donde están los manantiales, desconectaron la tubería que abastece del vital líquido a seis colonias en donde habitan diez mil familias que viven esa zona.
“Tenemos seis meses sin agua y los que tenemos posibilidades compramos pipas”, dijo uno de los colonos al hacer uso de la palabra.
Hace dos semanas, los colonos tomaron el Ayuntamiento de esta capital y se retiraron ante la promesa que les hizo el alcalde Tulio Pérez de que al otro día tendrían agua aunque sea a través de pipas. Sin embargo, eso no ocurrió,  y la gente sigue padeciendo la falta de suministro.
En un escrito que le enviaron al gobernador, Ángel Aguirre Rivero, le exigen a éste y a la Conagua que convoquen a una mesa de diálogo en donde estén presentes el grupo de ejidatarios a quienes se les tiene que decir que esa concesión de explotación de agua le pertenece a los habitantes de las seis colonias.
“Los ejidatarios están haciendo un negocio personal ya que están vendiendo el agua a gente de otras colonias de reciente fundación”, dijo uno de los colonos.

En el documento, los inconformes advierten a los gobiernos federal y estatal que si no se pone atención a este problema, puede haber brotes de violencia.
Uno de los acuerdos aprobados durante la asamblea es de que en las próximas horas van a realizar protestas en las calles de esta ciudad para exigir que sus demandas se resuelvan.

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