Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Carlos García Jiménez

BAJO EL ALA DEL SOMBRERO*

* Consejo Guerrerense para el Desarrollo Rural Sustentable

Carmen Aristegui: tu lucha por el derecho a saber es de todos.

Sin abordar a profundidad los temas fundamentales del campo guerrerense, este martes –aunque de manera protocolaria– por fin volvió a sesionar el Consejo Guerrerense para el Desarrollo Rural Sustentable (CGDRS) luego de dos años de mantenerse congelado, y tras la petición reiterada de organizaciones sociales rurales agrupadas en el Frente Popular para el Desarrollo de Guerrero.
El acto de reinstalación, presidido por el gobernador del estado y el delegado estatal de la Sagarpa, en su calidad de presidente y secretario técnico del mismo, se realizó en el Forum de Mundo Imperial, en la ciudad de Acapulco, contando con la presencia de más de 100 representantes de organizaciones sociales rurales e instituciones públicas de los ámbitos federal y estatal.
Tal como se establece en el artículo 15 de la Ley de Desarrollo Rural Sustentable del estado de Guerrero, “el CGDRS es el órgano consultivo de participación, análisis, deliberación, promoción de consensos, acuerdos, seguimiento y evaluación, que coadyuva a favorecer, definir y orientar una mejor política, programas y acciones públicas que impulsen el desarrollo rural sustentable en Guerrero”.
En otros términos, esta instancia colegiada es la encargada de planear y evaluar la inversión pública que, año con año los gobiernos federal y estatal destinan al campo guerrerense. El no funcionamiento de esta instancia ha sido una omisión gubernamental que ha dado lugar a que el presupuesto público rural se ejerza sin transparencia y de manera discrecional.
De hecho, el CGDRS hasta hace dos años funcionó al amparo de la antigua ley de desarrollo rural y de un reglamento que favorecía la visión y los intereses de los funcionarios de las instituciones públicas; las organizaciones campesinas eran minoría y sólo eran convocadas para “validar o avalar” las propuestas y el ejercicio presupuestal que hacían los funcionarios de las instituciones gubernamentales.
Pero las cosas cambiaron a partir de que se promulgó la nueva Ley de Desarrollo Rural Sustentable (número 814) y el reglamento interno del CGDRS, impulsados por las organizaciones más activas del estado de Guerrero. En estas nuevas circunstancias se planteaba que el CGDRS funcionara con equidad entre representantes gubernamentales y organizaciones sociales, que las instituciones transparentaran y alinearan sus presupuestos a un plan de desarrollo sectorial aprobado por el CGDRS, entre otras innovaciones democratizadoras. Quizá por ello, tanto la delegación de Sagarpa como el gobierno estatal congelaron durante dos años el funcionamiento de dicho órgano de planeación y deliberación del presupuesto público, contraviniendo la Ley de Desarrollo Rural Sustentable y el Reglamento del propio Consejo.

Primeros acuerdos para la reactivación de CGDRS

No obstante que la sesión de reinstalación del CGDRS fue más protocolaria que deliberativa, tras la intervención del gobernador los consejeros aprobaron que a partir de esta sesión extraordinaria reiniciarán sus trabajos bajo el marco jurídico vigente y con la anuencia de los gobiernos estatal y federal.
En tal sentido, acordaron que en breve se instalará la Comisión Intersecretarial para integrar los presupuestos en torno al Programa Concurrente 2015 y que éste será presentado en la próxima sesión del CGDRS. En este mismo tenor se facultó a Rigoberto Acosta González, secretario de Desarrollo Rural del gobierno del estado, y presidente suplente del CGDRS, que elabore a la brevedad el calendario para la instalación de las 10 comisiones operativas de dicha instancia: presupuesto y evaluación, soberanía alimentaria, agricultura, ganadería, pesca y acuacultura, recursos naturales y medio ambiente, equidad de género y juventud, grupos vulnerables, asuntos indígenas, y admisión y exclusión de miembros.
Otro acuerdo relevante fue la autorización de las ventanillas del Programa Estatal Concurrente cuya vigencia será del 18 al 27 de marzo; cabe precisar que en esta ventanilla los productores, en lo individual y organizados, podrán presentar sus solicitudes de apoyos para equipamiento e infraestructura productiva. Finalmente se acordó que la próxima sesión del CGDRS, tal como se establece en su reglamento, tendrá lugar en la segunda semana de abril en la ciudad de Chilpancingo.
Si el acto de reinstalación del CGDRS no queda en sólo protocolo, se abrirá la posibilidad de que instituciones públicas y organizaciones sociales conjunten visiones, recursos y propuestas viables que, bajo un enfoque de consenso y visión estratégica, empiece a revertir los problemas de hambre y pobreza estructural que padece el campo en Guerrero.

* Bajo el ala del sombrero es un espacio de análisis y propuestas para la transformación del campo desde la visión y acción cotidiana de los campesinos

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