López Rosas no pudo eludir su responsabilidad como procurador de los hechos del 12 de diciembre de 2011, responde

Señor director:

Nuevamente recurro a su espacio periodístico para hacer uso del derecho de contrarréplica ante las respuestas que da el señor Alberto López Rosas a mi persona. He de agradecerle infinitamente la inserción de la presente en su diario y sin el afán de convertir este tema en un diálogo con este comentario pongo fin al asunto.
Señor Alberto López Rosas: solo quiero recordarle lo que usted declaró en la entrevista que le hicieran en la Redacción de El Sur y cuyo contenido apareció el sábado 28 de marzo del presente año.
Ante la pregunta del reportero de que Ángel Aguirre Rivero y usted quedaron estigmatizados por el caso ayotzinapa del 12 de diciembre del 2011 no pudo usted eludir su responsabilidad implícita toda vez que se desempeñaba como procurador de Justicia del estado, y por ende, tenía responsabilidad jurídica, política, y ética de llegar al descubrimiento de la verdad y exigir castigo a todos los responsables a cualquier costo.
Ya se le olvidó que en su momento la CNDH determinó que “hubo responsabilidad institucional del gobierno del estado de Guerrero por la indolencia y la intolerancia con que se condujo la interlocución política con los estudiantes”.
Asimismo, declara en la entrevista que “cada día menos” lo cuestionan por este acto represivo donde fueron asesinados los estudiantes, Jorge Alexis herrera y Gabriel Echeverría de Jesús.
Usted podrá argumentar lo que quiera y decirme “Que no puedo acusarlo de indolencia” pero la mancha que usted lleva no podrá quitársela porque ya es un problema de responsabilidad histórica; es una deuda que tiene con los normalistas de Ayotzinapa, con los padres de familia y con el pueblo consciente y crítico que tiene memoria histórica.

Atentamente
Arnulfo Cuenca Adame