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Dedican en Hogar Moderno la tradición religiosa a los jóvenes desaparecidos

La principal consigna: “Queremos que reine la paz y la justicia”, y en una de las estaciones del viacrucis, los cristianos recuerdan a los 43 normalistas desaparecidos en septiembre del año pasado

 

Argenis Salmerón

Unos 200 feligreses de la colonia Hogar Moderno, ubicada en la zona poniente de la ciudad, encabezados por el sacerdote Bulmaro Hernández Morales, participaron en la tradicional viacrucis de la Semana Santa, que dedicaron a los jóvenes desaparecidos del país y del estado, entre ellos los 43 normalistas desaparecidos, y pidieron paz.
La principal consigna de los católicos fue: “Queremos que reine la paz y la justicia”, y en una de las estaciones del viacrucis, los cristianos recordaron a los 43 normalistas desaparecidos en septiembre del año pasado.
A las 10 de la mañana, los vecinos salieron de la parroquia San Antonio de Padua, para recorrer 14 estaciones, donde rezaron en cada vivienda el proceso de la crucifixión, hasta la sepultura de Jesucristo, además los católicos guardaron un minuto de silencio para las peticiones.
En el recorrido, los católicos se rotaron para cargar la cruz, además de la figura de un Nazareno y la virgen La Dolorosa.
Durante el trayecto, los feligreses, que en su mayoría eran mujeres y adultos mayores, entonaron oraciones del viacrucis en alusión a la Semana Santa.
El camino de la crucifixión a la sepultura

En la primera y segunda estaciones del viacrucis, el párroco acompañado de los feligreses, las dedicó a los desaparecidos del país y del estado; y en la tercera parada, el sacerdote pidió un minuto de silencio por las víctimas de la violencia a causa de la inseguridad.
El sacerdote a la cuarta estación la designó a las madres cuyos hijos están desaparecidos y ejemplificó con las madres de los 43 normalistas desaparecidos, “que tiene la esperanza de que regresen sus hijos”.
La quinta estación fue en protesta a la injusticia que hay en el país y a los oídos sordos de las autoridades, mientras que los habitantes piden justicia por los jóvenes desaparecidos.
El regreso de los jóvenes desaparecidos a consecuencia de la violencia, en especial de un joven de la colonia privado de la libertad, del que no dieron más datos, fue la sexta etapa del viacrucis, mientras que la séptima por la construcción de la paz y el acompañamiento de las víctimas.
La octava estación estuvo dedicada a los detenidos o desaparecidos y por un mundo más humano y justo; y la novena por erradicar la injustica y la impunidad que cometen las autoridades.
Porque se respete los derechos humanos de los habitantes y exigir a las autoridades agilizar las averiguaciones de los jóvenes desaparecidos, que el gobierno no despoje de educación y salud, fue la décima estación.
En la décima primera estación, el párroco pidió que los habitantes recen por los jóvenes desaparecidos; la siguiente etapa del viacrucis fue dedicada para que los jóvenes desaparecidos regresen a sus casas con vida.
Una respuesta favorable de los familiares que tienen un joven desaparecido, por la justicia y la paz, ocurrió en la decima tercera estación, y la última etapa para dar a conocer que la corrupción crece más que la honradez.

El final del recorrido

Al concluir las 14 estaciones que se realizaron en las viviendas, los feligreses regresaron al templo católico para hacer el rezo del viacrucis, con un enfoque para pedir paz y leer las siete palabras que dijo Jesús antes de morir.
En declaraciones a reporteros, el sacerdote Hernández Morales dijo que la procesión estuvo dedicada a los jóvenes desaparecidos del país, que según estudios son 20 mil, aunado a que hay un joven de la colonia desaparecido, no especificó cuándo fue el rapto, y por los normalistas de Ayotzinapa.
Comentó que el Evangelio abarca todas las dimensiones de la persona y todos los aspectos de nuestras vidas para construir la paz, lo que presupone justicia, perdón y reconciliación.
Mencionó que el estado vive una emergencia social y política, y ejemplificó con la desaparición de los 43 normalistas, pero “han destapado raíces profundas”, como la corrupción, la injusticia, la impunidad y la crisis de legalidad en México y el estado.
Declaró que la Iglesia invita a los feligreses a participar en las elecciones de este año, “se puede participar de diferentes maneras, dicen que emitiendo nuestro voto, cancelando nuestro voto, incluso boicotear las elecciones, y es una forma de participar”.
El sacerdote consideró que los habitantes tienen desconfianza en las instituciones, “nos lo hemos ganado a pulso todos, gobierno, Iglesia, sociedad y la gran tarea es recuperar la confianza”.
Por último, dijo que el Viernes Santo se celebra el viacrucis,  “que es el camino de Jesús, del calvario hacia la cruz, en este camino lo acompañamos no solamente para recordar su muerte, sino para recordar que nos invita a vivir aquello que nos enseña”.

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