Montan la obra teatral Fosa sobre luchadores sociales que han sido aniquilados por el poder

Los gritos que alguna vez exclamaron justicia se han convertido en silencio.
Se trata de cinco voces que alguna vez lucharon por una causa y fueron aniquiladas por un sistema represor del mundo, y su eco ahora se escucha bajo la tierra.
Fosa, una obra escrita por Juan Rocha, es un retrato actual de lo que sucede con todos aquellos luchadores sociales que se meten con algún sistema represor: son asesinados y enterrados sin misericordia en el olvido del subsuelo.
Manejo de corporalidad, drama en sus expresiones y diálogos desgarradores conducen la puesta que carece de tiempo y lugar.
Más de 40 personas aplaudieron su estreno en el recinto Un Teatro, cuya cara conocida resultó ser Francesca Guillén, la hija de Alejandro Camacho, quién apareció con el cabello corto y un blusón transparente.
Durante los 50 minutos que dura el montaje, los personajes hacen uso de su cuerpo para mostrar al espectador que fueron brutalmente asesinados.
Además, se preguntan sobre el tiempo en que sus batallas serán recordadas.
El texto hace revivir al público la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y otras tragedias en la historia de México.
Fosa estará todos los sábados y domingos hasta el 10 de mayo. (Jorge Santamaría / Agencia Reforma / Ciudad de México).