Preocupa a la Cruz Roja la situación humanitaria por la violencia en el país

Agencia Reforma

Ciudad de México

Peter Maurer, presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja, manifestó la preocupación de la organización por la violencia imperante en México y la falta de atención a los problemas humanitarios que provoca.
“El CICR está muy preocupado por la situación humanitaria en varias partes de este país en las que se encuentran personas afectadas por altos niveles de violencia que no reciben la ayuda y la asistencia que necesitan”, señaló en una conferencia magistral dictada en la Facultad de Derecho de la UNAM.
Alertó, además, sobre la problemática que enfrenta México por el fenómeno de las desapariciones forzadas y advirtió que miles de familias desconocen el paradero de alguno de sus miembros.
“Un amplio número de esas personas ha desaparecido en México por diversas razones, pero no existe un único mecanismo para buscar personas desaparecidas ni para identificar los restos mortales.
“Por ello, la mayoría de las familias, así sea en México o en otros países de la región, no pueden saber qué les ha sucedido a sus parientes desaparecidos, lo que prolonga el sufrimiento de todas esas personas que tienen derecho a recibir una respuesta”, expresó.
El funcionario de origen suizo destacó que, si bien el número de guerras disminuye en el mundo, van al alza los conflictos armados internos y prolongadas situaciones de violencia en nuevas dinámicas, lo que plantea otros retos para los organismos humanitarios.
Advirtió que una de estas dinámicas es la violencia impuesta por nuevos actores, en las que se mezclan intereses políticos, criminales y comerciales en estructuras amorfas, lo que sucede tanto en México como en Centroamérica.

Alerta ministro de la Suprema Corte sobre indignación social

Alberto Pérez Dayán, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, advirtió ayer que la sociedad mexicana experimenta “indignación y desesperanza” ante el futuro.
“No soslayo que tiempos actuales, en ocasiones, despiertan indignación y desesperanza entre la sociedad; que a veces el desasosiego se apodera del futuro mediato e inmediato y desgraciadamente la alegría se hunde frente a la formación de un esquema desalentador, aparentemente invencible.
“Es por ello que el deber del juzgador exige, más que nunca, el desempeño leal y humano de aquel a quien la sociedad recurre buscando remediar lo que le fue privado”, dijo el ministro durante la toma de protesta de 19 nuevos magistrados de circuito y 21 jueces de distrito, a quienes llamó a destacarse por sus sentencias y complementar su labor jurisdiccional con un modo sensato y ejemplar de vida.
Pérez Dayán, quien llegó a la Corte en 2012 tras una larga carrera judicial, urgió a los nuevos juzgadores a procurar estándares de excelencia que cierren el paso a conductas abusivas, maliciosas o dolosas en sus órganos jurisdiccionales.
Señaló que si bien los retos para la nación son enormes, el Poder Judicial de la Federación sigue representando un verdadero deseo de cambio.
“Demostremos, una vez más, todos, que el Poder Judicial de la Federación no es ajeno a ello”, demandó ante la cúpula judicial en la Suprema Corte.