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Inicia juicio político contra el presidente de Paraguay por desalojo que dejó 17 muertos

EFE

Asunción

El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, enfrentaba ayer un juicio político impulsado por el Congreso y podría ser destituido hoy mismo si finalmente su defensa no consigue levantar los cargos que le imputan los legisladores.
La acusación fue promovida por la Cámara de Diputados, aprobada luego por la de Senadores, que le dio curso inmediato y dispuso que hoy mismo se presentaran las acusaciones en el pleno, dominado por la oposición.
Los fiscales acusadores fueron los diputados Oscar Tuma y Carlos Liseras, del Partido Colorado; Clemente Barrios y José López Chávez, de la Unión de Ciudadanos Eticos (UNACE), y Jorge Alvarez, del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA).
Entre los cinco utilizaron ayer 35 minutos para enumerar los cargos contra Lugo. Entre ellos se incluye la autorización y financiación en 2009 de un acto político de jóvenes socialistas sudamericanos en un predio militar y lo ocurrido en febrero en Ñacunday, departamento de Alto Paraná, al este de Asunción, cuando campesinos sin tierra ocuparon predios privados y generaron un “estado de pánico” en la zona.
También se le responsabiliza por la “ola de inseguridad” que hay en el país, por haber avalado el protocolo de Montevideo, también llamado Ushuaia II, sobre compromiso democrático en los países del Mercosur, y por la violencia desatada este viernes en un predio rural de Curuguaty, al noreste de Asunción, que provocó la muerte de 11 campesinos y 6 policías.
El diputado Tuma informó en su intervención que Lugo será denunciado ante la justicia ordinaria por las irregularidades cometidas durante su administración y sostuvo que está “sobradamente justificada la acusación por el mal desempeño de sus funciones”, de acuerdo a lo que sostiene el artículo 225 de la Constitución.
Tuma calificó la tarea de Lugo desde 2008, cuando asumió, de “impropia, negligente e irresponsable” y que “perjudicó los intereses supremos de la nación”.
Más temprano, el presidente afirmó en un mensaje al país que no renunciará y que se someterá al juicio político, a la vez que denunció que está siendo objeto de “un ataque inmisericorde de sectores que siempre se opusieron al cambio y a que el pueblo pueda participar como protagonista de su democracia”.
Sostuvo que se somete “con absoluta obediencia a la Constitución y a las leyes” y enfrentará un juicio político promovido por la Cámara de Diputados, “con todas sus consecuencias”.
La Iglesia católica le pidió al mandatario que renuncie a su cargo “para descompromir la tensión tan grande que se vive” en el país, dijo en rueda de prensa Claudio Giménez, presidente de la Conferencia Episcopal.
Las Fuerzas Armadas afirmaron que “se mantienen dentro de su función específica que le confiere la Constitución Nacional y las leyes, respetando el ordenamiento constitucional y democrático vigente”.
La crisis política desatada en Paraguay opacó ayer los debates ambientales en la cumbre Río+20, y generó un “éxodo” de cancilleres sudamericanos que abandonaron la ciudad brasileña rumbo a Asunción.
Una delegación de ocho cancilleres de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR) arribó en la noche a Asunción para interiorizarse de la crisis institucional. Los ministros de Exteriores de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Perú, Uruguay y Venezuela tenían previsto reunirse con Lugo y con su canciller, Jorge Lara Castro, en la residencia presidencial.
La visita a Paraguay fue decidida este jueves en Río por los presidentes de la UNASUR con el propósito de asegurar “el pleno respeto al orden democrático” en ese país.
Hoy a las 15:00 GMT habrá otra sesión extraordinaria para que el mandatario haga su defensa, personalmente o a través de sus abogados.
Las pruebas se evaluarán a las 17:00 GMT y los alegatos a las 19:30 GMT, mientras que la sentencia será a partir de las 20:30 GMT, si todo transcurre como se prevé.

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